17.05.2013 Views

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

El arte de no amargarse la vida - El mundo del "manitas "

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

A <strong>la</strong>s 9.30 llegó al lugar <strong>de</strong> <strong>la</strong> reunión. Llegaba<br />

veinte minutos tar<strong>de</strong>. Nervioso, Eusebio empezó<br />

a buscar aparcamiento, pero, ¡vaya día!, <strong>no</strong><br />

encontraba ningún espacio libre.<br />

Después <strong>de</strong> un cuarto <strong>de</strong> hora dando vueltas,<br />

ya se estaba poniendo <strong>de</strong> ¡verda<strong>de</strong>ro! mal<br />

humor. Su diálogo inter<strong>no</strong> era algo así: «¡Odio<br />

esta ciudad! ¡Con todos los impuestos que pago<br />

y <strong>no</strong> hay un con<strong>de</strong>nado lugar para aparcar ni un<br />

puñetero parking! Si tuviese <strong>de</strong><strong>la</strong>nte al alcal<strong>de</strong> le<br />

daría tantos sopapos que <strong>no</strong> lo reco<strong>no</strong>cería ni su<br />

madre. ¡Inútil <strong>de</strong>sgraciado!».<br />

Para entonces, el escozor en el estómago era<br />

intenso y empezaba a sumársele un insidioso<br />

dolor <strong>de</strong> cabeza. Casi podía escuchar su propio<br />

corazón <strong>de</strong> lo fuerte que <strong>la</strong>tía. Su ira estaba<br />

<strong>de</strong>scontro<strong>la</strong>da. Pero, por fin, vio un espacio en<br />

un chaflán. Era un aparcamiento <strong>de</strong> tiempo<br />

limitado, pero Eusebio <strong>de</strong>cidió <strong>de</strong>jar el coche<br />

allí. Total, <strong>la</strong> reunión duraría poco tiempo y ya<br />

estaba harto <strong>de</strong> buscar. Así que aparcó<br />

rápidamente y entró corriendo en el edificio<br />

don<strong>de</strong> le esperaban para <strong>la</strong> reunión.<br />

Aquel encuentro <strong>de</strong> trabajo era cosa fácil, pero<br />

el jefe llegó con una nueva or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l día y <strong>la</strong><br />

cosa se a<strong>la</strong>rgó. Se quedaron todos a comer y a<br />

nuestro hombre le sentó fatal <strong>la</strong> comida.<br />

Siempre que se estresaba se le revolvía el<br />

estómago. Pensó para sus a<strong>de</strong>ntros: «Menudo

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!