29.04.2017 Views

TEORIA CRITICA-MAX HORKHEIMER

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

energías cobró una significación en extremo progresista. La<br />

imposición de una disciplina a todas las capas de la población,<br />

fruto de la necesidad de adaptar las masas al modo de producción<br />

burgués, reactuó sobre el desarrollo de esa forma de<br />

economía: no solo el inaudito perfeccionamiento de la técnica,<br />

la simplificación del proceso de trabajo, en una palabra, el<br />

aumento del poder del hombre sobre la naturaleza, sino también<br />

los supuestos humanos de una forma más alta de sociedad,<br />

son impensables sin ese proceso de espiritualización o interiorización.<br />

En la actividad del caudillo, en cuanto impulsora de<br />

la moralidad y la religiosidad, no hacen más que manifestarse,<br />

de un modo especialmente claro, tanto este proceso histórico<br />

cultural como los otros aspectos del proceso ideológico, que,<br />

también en las épocas denominadas normales, dominan la vida<br />

espiritual. La Florencia de Savonarola experimenta un arrebato<br />

de entusiasmo religioso y moral, como las ciudades y comarcas<br />

en las que ha prendido el protestantismo. Mientras en las<br />

revoluciones posteriores es el heroísmo idealista el que presta<br />

de preferencia su contenido al altruismo nacional, en las primeras<br />

predomina el estímulo religioso. «Un espíritu religioso se<br />

apoderó del pueblo redimido» dice Gregorovius describiendo<br />

la rebelión de Rienzo, «como en el pueblo británico en la época<br />

de Cromwell».*^ Por estos siglos se produce la hipóstasis de ia<br />

creencia en una libertad y justicia superiores, su separación<br />

ideológica respecto de la confusa comunidad de intereses de las<br />

masas, de la que esa creencia había surgido. Solo en las fases<br />

tardías de la época burguesa se supera esta alienación idealista,<br />

volviéndose a referir la creencia a la solidaridad consciente de<br />

los hombres que luchan. El heroísmo grandilocuente y vacío,<br />

que todavía pretende ser heredero de aquel idealismo en otro<br />

tiempo progresista, ha perdido todas sus funciones culturales<br />

y queda rebajado a mera pose, a mentira vulgar.<br />

El caudillismo, por el cual el pueblo debe ser conducido hacia<br />

determinados fines, y llevado a la interiorización de sus impulsos,<br />

que en ese período no pueden ser satisfechos, se sirve<br />

de un instrumento específico: el discurso en la asamblea de<br />

masas. También el político de la polis griega ha sido principalmente<br />

un orador y ha ejercido a veces funciones análogas a las<br />

del caudillo moderno. Sin embargo, el discurso en la Antigüedad<br />

griega se pronuncia ante una asamblea de hombres libres;<br />

los esclavos constituyen un elemento que simplemente debe<br />

ser dominado y al que no cabe interpelar. Por más que estos<br />

66 Gregorovius, op. cit., pág. 32L<br />

180

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!