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Tabla 5. Gastos (2* fase) y producción (3 8 fase) por oveja y precios umbrales (000 pts)
Explotación
J
L
N
S
N e ovejas
548
345
439
355
Gastos variables específicos ovino
2.705,8
3.897,6
2.728,5
2.023,2
Otros gastos variables ovino
1.355,0
815,8
1.514,9
2.014,4
Gastos fijos actividad ovina
857,1
644,4
764,6
457,0
Gastos totales (pts/oveja)
8.974,3
15.529,8
11.407,7
12.660,8
N s corderos vendidos
972
567
683
651
Peso canal medio (kg)
11,5
11,5
11,0
10,75
Producción (kgloveja)
20,4
18,9
17,1
19,7
Fre«ou»i6/Yj/(fn/s/Ar#)
439,9
821,7
667,1
642,6
La explotación (J) es por lo tanto la que presenta una actividad ovina más eficiente desde el punto de
vista biológico y económico conjuntamente. Constituye una explotación altamente especializada de carácter
estante, con las mayores disponibilidades de rebaño y trabajo, con el mayor porcentaje de superficie forrajera
y con carnicería propia en la que comercializa la totalidad de su producción.
En el extremo opuesto, la explotación (L) es la menos eficiente de las consideradas y difiere en
muchos aspectos. A pesar de presentar una superficie parecida, cuenta con un porcentaje de superficie
forrajera inferior, siendo la dimensión de su rebaño ovino y potencial de trabajo familiar también menores.
En este caso, sólo una parte de la producción es también comercializada en carnicería propiedad de la
familia. No obstante, como puede observarse en las características señaladas en la Tabla 1, además de la
citada dimensión del rebaño, los elementos que en mayor medida las diferencian son el hecho de que la
explotación (L) utiliza durante el verano el pastoreo de estivas y la existencia de otras actividades productivas,
aunque el peso del ovino en el conjunto de la producción final de la explotación es semejante.
Hay que considerar que otra explotación, la (S) que también cuenta con un rebaño de pequeña
dimensión, con niveles menores de superficie forrajera, de escasa especialización ovina y con un sistema que
supone utilización estival de pastos de altitud, presenta sin embargo una mayor eficiencia de la actividad
ovina.
Finalmente el indicador de eficiencia no aparece aparentemente relacionado con el nivel de
intensificación de los sistemas practicados por las explotaciones, según se pone de manifiesto en la Tabla 6.
Si bien cabrá hacer a este respecto algunas matizaciones sobre la significación de algunos de los indicadores
recogidos (los que consideren el número de ovejas, en los casos en los que existen otros componentes del
capital vivo), tanto desde la óptica del nivel de intensidad en capitales (G.T./ha SAU; ovejas/ha SAU) como
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