09.04.2015 Views

jmiceli_la-cumbia-villera-2005

jmiceli_la-cumbia-villera-2005

jmiceli_la-cumbia-villera-2005

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

por los autores de <strong>la</strong>s canciones, ya que no pareciera que los personajes tuviesen <strong>la</strong><br />

posibilidad de seguir un camino alternativo en ninguno de los casos.<br />

Diríamos que estas narraciones tienen una primera función descriptiva que es una<br />

consecuencia directa de su naturaleza historiada. Los sucesos de cada re<strong>la</strong>to, como en<br />

el modelo proppiano, no pueden encadenarse de modo arbitrario sin tener en cuenta<br />

su capacidad de restricción respecto de los hechos que le continúan en <strong>la</strong> secuencia.<br />

Esta restricción tiene una doble cara. Por un <strong>la</strong>do los encadenamientos están<br />

limitados vivencialmente, y por otro a simple nivel lógico. La restricción que<br />

podríamos denominar lógica es inevitable y deviene de <strong>la</strong> misma existencia empírica<br />

de <strong>la</strong>s acciones.<br />

Este tipo de restricción está c<strong>la</strong>ramente descripta por C<strong>la</strong>ude Bremmond en sus<br />

comentarios respecto del modelo de Propp:<br />

“¿Puede ser libre el encadenamiento recíproco de <strong>la</strong>s funciones en el curso de un<br />

re<strong>la</strong>to? De lo que antecede, y contrariamente a <strong>la</strong> opinión de Veselovsky, se deduce<br />

que no. La solidaridad orgánica del conjunto rige el orden de sucesión de <strong>la</strong>s partes.<br />

Para evitar incoherencias, estas deben agruparse en secuencias estables: “el robo no<br />

puede tener lugar antes que se haya forzado <strong>la</strong> cerradura” (Barthes et al 1970: 74)<br />

Podemos aplicar directamente esta reflexión a los re<strong>la</strong>tos que abordamos. Para<br />

presentar el caso más extremo, en <strong>la</strong> secuencia<br />

ROBA HABITUALMENTE (EI)-- ENFRENTAMIENTO CON LA POLICIA<br />

(CO) -- MUERTE (RE) (“EL PIBITO LADRON”)<br />

No es pensable ninguna continuación que implique al protagonista central, ya que él<br />

dejó de existir.<br />

Sin embargo, lo que hemos dado en l<strong>la</strong>mar restricciones vivenciales exponen un<br />

aspecto necesariamente más interesante que el primero. Los hechos que aparecen no<br />

115

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!