JOAQUIM MONTEZUMA DE CARVALHO 69<strong>de</strong>sbandada <strong>de</strong> Europa <strong>de</strong> su propio pasado, toda volcada hacia el funesto y bronco yanquismo<strong>de</strong> la praxis mo<strong>de</strong>rna.13. En antología Poesías Escogidas (Coimbra, 1902) más tar<strong>de</strong> reunido en el vol. 1 <strong>de</strong> ObrasCompletas <strong>de</strong> Eugenio <strong>de</strong> Castro (1927 p. 533).14. Fredo Arias <strong>de</strong> la Canal encontrará en este Soneto <strong>de</strong> Eugenio <strong>de</strong> Castro un flagranteejemplo más <strong>de</strong>l creador afligido por neurótico sadomasoquismo, para él, como bien vio Ortegay Gasset, también el caso <strong>de</strong> la monja portuguesa Mariana Alcoforado y <strong>de</strong> las Cartas <strong>de</strong> Amor<strong>de</strong> ésta para el caballero <strong>de</strong> Chamilly y don<strong>de</strong> la apasionada le confía: "Os agra<strong>de</strong>zco <strong>de</strong>s<strong>de</strong>el fondo <strong>de</strong> mi corazón la <strong>de</strong>sesperación que me causáis y <strong>de</strong>testo la tranquilidad en que vivíaantes <strong>de</strong> conoceros". Es la proyección <strong>de</strong>l yo i<strong>de</strong>al <strong>de</strong> la persona enamorada para con el objeto<strong>de</strong> ese amor, en la línea <strong>de</strong> Bergler, el maestro <strong>de</strong> Fredo Arias <strong>de</strong> la Canal y que en las obrasliterarias expuestas ha encontrado esas "inexistentes perfecciones hacia el ser amado". Arias<strong>de</strong> la Canal aborda este tema en el texto "Hablemos <strong>de</strong>l Amor" que es la introducción a suedición facsimilar <strong>de</strong> Inundación castólida <strong>de</strong> Sor Juana Inés <strong>de</strong> la Cruz (México, 1995).15. El estudio <strong>de</strong> Joaquim <strong>de</strong> Carvalho se intitula Sobre el lugar <strong>de</strong> origen <strong>de</strong> los antepasados<strong>de</strong> Baruch <strong>de</strong> Espinosa y figura en la Miscelánea <strong>de</strong> Estudios en honra <strong>de</strong> D. Carolina Michaelis<strong>de</strong> <strong>Vasconcelos</strong> (ed. <strong>de</strong> Revista <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Coimbra, vol. XI, 1930).La confirmación <strong>de</strong> la afirmación <strong>de</strong> Joaquim <strong>de</strong> Carvalho se encuentra en la obra <strong>de</strong>l Prof.Dr. Antonio Borges Coelho, intitulada Inquisiciao <strong>de</strong> Evora - Dos Primórdios a 1668 (Ed.Caminho, Lisboa, 1° tomo, 1987, 488 pp. 2° tomo, 1987, 327 pp.) con numerosos procesos(hasta Borges Coelho nunca investigados) que la Inquisición sacó a los Espinosas <strong>de</strong>Vidigueira, incluyendo al padre <strong>de</strong>l filósofo. Estos datos documentados <strong>de</strong>scartan <strong>de</strong> una vezla i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que el filósofo era hijo <strong>de</strong> padres españoles; incluso gallegos. Si no fuera por laexpatriación <strong>de</strong> los padres -por huir al ghetto lusitano <strong>de</strong> la intolerancia, mal crónico-,Espinosa habría nacido en Portugal, sin embargo creo que, <strong>de</strong> no existir esa mismaintolerancia (que Sor Juana sufrió), el espíritu <strong>de</strong> Espinosa no habría dado los frutos que dio.Así, hasta se perdona el mal que la Inquisición hizo, pues fue la causa involuntaria <strong>de</strong> unbien: la existencia <strong>de</strong> un Espinosa.Para ser enteramente justos e imparciales, también <strong>de</strong>bemos aquí expresar nuestra gratituda la Sinagoga <strong>de</strong> Amsterdam (don<strong>de</strong> todavía se pronuncian oficios en lengua portuguesa) porhaber expulsado <strong>de</strong> su gremio (don<strong>de</strong> Espinosa realmente no cabía, era hombre sinceroconsigo mismo) el 27 <strong>de</strong> julio <strong>de</strong> 1656, al tal "judío <strong>de</strong> traslúcidas manos", "<strong>de</strong> tristes ojos y<strong>de</strong> piel cetrina" con esta furia que "todavía rasga la memoria:" y que Dios jamás le perdonesus pecados. Que la cólera y la indignación <strong>de</strong>l Señor lo cerquen y por siempre se abatansobre su cabeza. Que todas las maldiciones <strong>de</strong>l Libro <strong>de</strong> la Ley caigan sobre él. Que Dios loborre <strong>de</strong> su Libro; lo separe, en ruina, <strong>de</strong> todas las tribus <strong>de</strong> Israel, y le haga tocar en suertetodas las maldiciones anunciadas en el Libro <strong>de</strong> la Ley.Sólo que Dios se calló, no tuvo la fineza <strong>de</strong> borrar el nombre <strong>de</strong> Espinosa y este judío <strong>de</strong>fisonomía portuguesa y añeja sangre lusitana (la expulsión <strong>de</strong> los padres, la pa<strong>de</strong>cida por élmismo) es la que pone en tela <strong>de</strong> juicio la "benignidad" <strong>de</strong> las religiones perseguidoras, <strong>de</strong> lasmitras furiosas y <strong>de</strong>l fanatismo enfermizo que quiere tener a Dios a la mano para sembrar,¡como si fuera un santo remedio para todo!16. BENTO DE ESPINOSA, Ética <strong>de</strong>mostrada a la manera <strong>de</strong> los geómetras - Parte 1 - De Deus.Traducción, introducción y notas <strong>de</strong> Joaquim <strong>de</strong> Carvalho (la edición, Coimbra, 1950, consucesivas reediciones siempre agotadas).17. JORGE LUIS BORGES, Cap. "La Cábala" <strong>de</strong> Siete Noches <strong>de</strong> (la ed., 1980, Col. TierraFirme, Fondo <strong>de</strong> Cultura Económica, México D. F., pp. 134-135).18. En Boletín <strong>de</strong> la R.A.E., tomo LXIII, Cua<strong>de</strong>rno CCXXX, sept..dic., 1983, Madrid,Imprenta Aguirre, 1983, pp. 361.382.
Fernando <strong>de</strong> Herrera:Defensor <strong>de</strong> la Lengua. Pero, ¿cual?UBALDO DIBENEDETTOEn este ensayo escrito en ocasión <strong>de</strong>l Festschrift <strong>de</strong>dicado al críticoliterario Fredo Arias <strong>de</strong> la Canal, nos proponemos poner <strong>de</strong> manifiestoque el título "<strong>de</strong>fensor <strong>de</strong>l castellano" que, hace cuatro siglos FranciscoMedina otorgó a Fernando <strong>de</strong> Herrera y que los comentaristas contemporáneoscontinuan otorgando al sevillano quien logró hacer <strong>de</strong>l análisisliterario un proceso sistemático <strong>de</strong> los más consultados, es ambiguo."En las poesías <strong>de</strong> San Juan", escribió Rafael Lapesa en su Historia <strong>de</strong>Lengua Española, "como en los mejores momentos <strong>de</strong> Santa Teresa, seconvertía en realidad la frase <strong>de</strong> Carlos V: el español es la lengua parahablar con Dios." La exaltación nacionalista <strong>de</strong>l Emperador que donRamón Menén<strong>de</strong>z y Pidal solía autenticar durante sus conferencias sobreel idioma español en la facultad <strong>de</strong> Filosofía y Letras <strong>de</strong> Madrid, reflejael aprecio <strong>de</strong> las lenguas nacionales durante el Renacimiento propiocuando se iban creando los Estados europeos mo<strong>de</strong>rnos.'Des<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista diacrónico-lingüístico, el hecho más <strong>de</strong>stacado<strong>de</strong>l siglo XVI es el mar <strong>de</strong> tinta que usaron los teóricos <strong>de</strong> las i<strong>de</strong>as sobrelas lenguas respectivas que, a su vez, ocasionaron polémicas sobre lalengua literaria. Claro está que como "la cuestión <strong>de</strong> lengua" se habíaplanteado al propagarse el Renacimiento, casi todos los escritores sevieron, forzosamente o no, implicados en las polémicas. La cuestión <strong>de</strong> lalengua era un asunto <strong>de</strong>masiado serio y trascen<strong>de</strong>ntal para que noexistieran los "no-militantes".No se trata <strong>de</strong> un mero acto <strong>de</strong> <strong>de</strong>puración <strong>de</strong> una lengua común atodos, sino la actual aceptación y nacionalización <strong>de</strong> una lengua sólocomún a unos cuantos. Consecuentemente, cada escritor, fuese poeta,novelista u hombre <strong>de</strong> ciencia, vino a elegir su propia lengua o dialecto,proponer normas para la literatura, y <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r o criticar las otras queUbaldo DiBene<strong>de</strong>tto es profesor en la Universidad <strong>de</strong> Harvard, School ofContinuingEducation, Cambridge, Estados Unidos, y Premio José <strong>Vasconcelos</strong> 1976.