Haga Clic Aqui para abrir este Documento - Programa de Semiótica

SOCIEDAD, LENGUA, CONTROL. NOTAS INTRODUCTORIAS.
Por Froilán Fernández
El campo de las Políticas Lingüísticas resulta propicio para resaltar los mecanismos
y las relaciones, muchas veces dejadas al margen o dadas por supuestas, que se
establecen entre la lengua y los diversos tipos de sociedad. La lengua no escapa a las
relaciones de poder y las vicisitudes políticas que atraviesan las diversas esferas
comunitarias. Pero las intervenciones sobre la lengua y desde la lengua arrastran marcas
ideológicas determinadas que reflejan y refractan los proyectos y las visiones sobre el
estado y la sociedad.
El presente ensayo pretende reflexionar acerca de dichas problemáticas, realizando
recorridos y conexiones entre las planificaciones y políticas lingüísticas y las
concepciones diversas que algunos teóricos describen para el campo de las relaciones
sociales en el marco de nuestra actualidad “posmoderna” y “poscolonial”, destacando el
carácter fundamental y fundante que posee la lengua en tanto sistema semiótico que
interviene, transforma y modeliza las prácticas sociales, a la vez que es moldeado,
transformado e intervenido por dichas prácticas.
No exploraremos un caso preciso, ni profundizaremos en una “realidad” lingüística
específica, más bien intentaremos trazar un mapa teórico y reflexivo acerca de la
sociedad y el lenguaje, lo que no significa ignorar o escamotear algunas consideraciones
sobre el contexto en el que desarrollamos nuestras prácticas intelectuales. La
experiencia, aunque en ocasiones se diga lo contrario, no se ha agotado, e insiste sobre
los discursos.
I
De todos los sistemas semióticos vigentes en la cultura, la lengua posee
particularidades que la constituyen como el más privilegiado de ellos. Sistema de
traducción (pero no de reemplazo) general de otros lenguajes, desde la gestualidad hasta
la iconicidad, la lengua configura “lo social” al mismo tiempo que su desarrollo se ve
condicionado por la existencia de una esfera de relaciones comunitarias, de allí su
inexcusable carácter dialógico.