Capítulo 4. Estrategias e instrumentos <strong>de</strong> conservación:jardines zoológicos o botánicos, áreas naturales protegidas y museos.15.16.17.18.19.Ser un santuario <strong>de</strong> la vida, apoyado con orgullo por toda lacomunidad.Conectar a los visitantes con los hábitats in situ.Ser un recurso para la conservación.Informar a los visitantes <strong>de</strong> las acciones directas y los cambiosque estos pue<strong>de</strong>n hacer en pos <strong>de</strong> la conservación.Ser una organización sin fronteras cuyos propietarios <strong>de</strong>benser los ciudadanos, las instituciones académicas, científicas yconservacionistas <strong>de</strong> la comunidad y estará conectada con elmundo a través <strong>de</strong> la conservación <strong>de</strong> la naturaleza.B. Los jardines botánicosLos jardines botánicos –al igual que los zoológicos- podrían consi<strong>de</strong>rarsecomo museos vivientes. En estos lugares las plantas se cultivany exhiben (al aire libre o en inverna<strong>de</strong>ros) con fines científicos, educativosy conservacionistas. Muchos albergan también un herbario ocolección <strong>de</strong> plantas secas, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> salas <strong>de</strong> lectura, laboratorios,Sería <strong>de</strong>seable quecada municipio <strong>de</strong>cada provincia cuentecon su propio jardínbotánico para quetodos los ciudadanospuedan reconocer susplantas silvestres.70La naturaleza <strong>de</strong> la patriaValor y cuidado <strong>de</strong> la biodiversidad argentinaMIRADAS DE LA ARGENTINA
Capítulo 4. Estrategias e instrumentos <strong>de</strong> conservación:jardines zoológicos o botánicos, áreas naturales protegidas y museos.bibliotecas, instalaciones museísticas y plantaciones experimentaleso <strong>de</strong> investigación.Al igual que suce<strong>de</strong> en un zoológico con la colección <strong>de</strong> animales,las plantas pue<strong>de</strong>n organizarse <strong>de</strong> acuerdo a su i<strong>de</strong>ntidad taxonómicao sistemática (es <strong>de</strong>cir, ajustada a la clasificación botánica <strong>de</strong> losejemplares), geográfica (por regiones <strong>de</strong> origen) o ecológica (en función<strong>de</strong> su relación con el medio). Los jardines botánicos más gran<strong>de</strong>ssuelen contener a<strong>de</strong>más sectores temáticos <strong>de</strong>dicados a los gruposmás atractivos, como los inverna<strong>de</strong>ros para orquí<strong>de</strong>as y los cactarios(para las cactáceas). Cuando la colección <strong>de</strong> plantas contiene sóloárboles, se la conoce con el nombre <strong>de</strong> arboreto o arboretum.La importancia <strong>de</strong> estos lugares (jardines botánicos y parques zoológicos)es tan gran<strong>de</strong> que prácticamente no existe ciudad importanteque no tenga uno, porque constituyen una carta <strong>de</strong> presentación <strong>de</strong>la naturaleza <strong>de</strong> la región o <strong>de</strong>l país. Casi todas las característicasseñaladas para un zoológico <strong>de</strong> primer nivel <strong>de</strong>ben aplicarse a un jardínbotánico que aspire a dicha jerarquía. Los jardines botánicos másmo<strong>de</strong>rnos, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego, están comprometidos con la conservación <strong>de</strong>las plantas silvestres y tienen proyectos para reproducir y propagar lasespecies amenazadas.Los jardinesbotánicos másmo<strong>de</strong>rnos estáncomprometidoscon la conservación<strong>de</strong> las plantassilvestres ytienen proyectospara reproduciry propagarlas especiesamenazadas.C. Los museos <strong>de</strong> ciencias naturalesLa mayoría <strong>de</strong> la gente asocia la palabra museo con algo que guarda“cosas viejas” en “un lugar aburrido” u otros conceptos poco alentadores.Sin embargo, el objetivo no es aburrir ni “guardar” cosas viejas.Veamos lo que dice el Consejo Internacional <strong>de</strong> Museos (ICOM): unmuseo “es una institución permanente, sin fines <strong>de</strong> lucro, al servicio<strong>de</strong> la sociedad y <strong>de</strong> su <strong>de</strong>sarrollo, abierta al publico, que realiza investigacionesconcernientes a los testimonios materiales <strong>de</strong>l hombre y suentorno, los adquiere, los conserva, los comunica y, principalmente,los exhibe con fines <strong>de</strong> estudio, educación y <strong>de</strong>leite”. Por lo tanto, siaceptamos esta <strong>de</strong>finición, podremos comprobar que muchos lugaresque se auto<strong>de</strong>nominan “museo” no lo son y que para cumplir con sumisión un museo no tiene por qué resultar aburrido.Los museos que conocemos en la actualidad se crearon en Europaen el siglo XVIII y la mayor parte <strong>de</strong> ellos provenían <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s coleccionesprivadas o <strong>de</strong> la realeza. En 1750, por ejemplo, el gobiernofrancés comenzó a admitir público dos veces por semana, sobretodo artistas y estudiantes, para que contemplaran unos 100 cuadroscolgados en el Palacio <strong>de</strong> Luxemburgo <strong>de</strong> París. Esta colección setrasladó <strong>de</strong>spués al famoso Louvre. Este museo, que tuvo su origenen las colecciones <strong>de</strong>l rey Francisco I (siglo XVI) se convirtió -duranteLa naturaleza <strong>de</strong> la patriaValor y cuidado <strong>de</strong> la biodiversidad argentinaMIRADAS DE LA ARGENTINA71