Cien peliculas que me abrieron la cabeza - Nicolas AmelioOrtiz
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Santa Sangre
1989. Dirigida por Alejandro Jodorowsky
Antes de terminar la secundaria, la única película de Alejandro Jodorowsky
que había visto en mi vida era una que se llamaba El topo (1970). Vi la
película, porque había leído en algún lugar que fue la inspiración de Peter
Gabriel para el disco The Lamb Lies Down on Broadway (1974). Yo recién
empezaba a conocer algo de rock progresivo, y la película me interesó más
por ese lado que por sus aspectos cinematográficos. No volví a ver nada del
autor hasta unos años después, cuando el director Pablo César la proyectó en
un seminario. César era conocido en la facultad por enseñar películas bastante
peculiares: un día te mostraba el primer capítulo de la serie televisiva Neon
Genesis Evangelion (1995-1996), y al día siguiente aparecía con Blue (Derek
Jarman, 1993) —si se preguntan por qué esta es una película medio rara,
búsquenla y me van a entender—. A mí me gustaban mucho los seminarios de
César, porque era la única persona en toda la universidad que nos hacía ver
cine. Y aunque después se iba un poco por las ramas con conceptos
filosóficos, siempre le estaré muy agradecido por introducirme a obras que de
otro modo jamás hubiera visto.
Una de las películas que se proyectó en estos seminarios fue Santa
Sangre, un muy fellinesco trabajo de Jodorowsky, con una trama difícil de
explicar. A grandes rasgos, nos cuenta la historia de Fénix, un chico que vive
en un circo ambulante y que se va cruzando con distintos personajes
circenses. La bastante complicada vida de Fénix lo hará descubrir un culto
secreto, experimentar con drogas y sufrir enamoramientos frustrados.
La película arranca con un plano aéreo —el punto de vista de un águila—
acompañado de una música que nos recuerda el principio de Touch of Evil
(Orson Welles, 1958). Trazando un clima festivo pero a la vez misterioso, y
usando distintos planos que nos terminan revelando un desfile del circo por la
ciudad, Jodorowsky nos invita a meternos de lleno en el universo del circo,
Página 152