REGIÓN HUÁNUCO - BVS Minsa - Ministerio de Salud

LOS VALORES
Y LOS PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
La moral humanista no puede aceptar una concepción
utilitarista de la ética, ni el puro biologícismo o el
sociobiologícismo naturalista.
De la antropología se deducen así los puntos esenciales
siguientes: la corporeidad humana es concebida en el sentido
personalista, es decir, como constituyendo una unidad con el
yo personal.
Sobre la base de este valor de la corporeidad, la vida física es
considerada como valor fundamental en relación con los otros
valores, incluidos aquellos superiores en dignidad (la libertad,
la solidaridad, por ejemplo), dado que todos los otros valores
de la persona suponen la existencia física del individuo.
El principio terapéutico o el principio de totalidad, tiene por
consiguiente una posición central en la ética del trabajador de
salud. En virtud de este principio, toda intervención sanitaria o
quirúrgica (o genética) es permitida si es necesaria para salvar
una vida o para devolver la salud de la persona en su
totalidad. Toda intervención en el campo (del médico y del
paciente), deberá ser evaluada en relación con la
responsabilidad ante la vida y la salud. Sobre este principio se
fundamentan los derechos y deberes del paciente, y en
particular su derecho y su deber al consentimiento informado,
así como los deberes de los que le atienden.
Un factor importante para mejorar el clima conducente a una
conducta ética, es la actitud de la gerencia de salud. Además
de dar el ejemplo con su propio comportamiento, debe
establecer políticas claras que estimulen una conducta ética y
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