02.01.2015 Views

latin american essays maclas

latin american essays maclas

latin american essays maclas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Como observara Helena Ramos: “Tanto la poesía como la narrativa de María del<br />

Carmen son ácidas y osadas, valientes y turbadoras. Su incisivo feminismo no se<br />

contenta con las declaraciones políticamente correctas sino [que] cuestiona los<br />

omnipresentes esquemas sexistas, duela a quien duela. Aun cuando le duele a<br />

ella misma” (“Narradora”). Marta Leonor González en su libro Huérfana<br />

embravecida (1999) se aleja “pau<strong>latin</strong>amente de una poesía como proyecto<br />

nacional y elabora una voz que busca universalizar las circunstancias<br />

individuales, rompiendo con el utilitarismo lingüístico y usando un lenguaje<br />

violento para representar su entorno…que logra comunicar la violencia presente<br />

en la vida cotidiana de la Nicaragua de hoy” (Mantero, “Marta Leonor González”).<br />

Para algunas de las poetas nuevas, la vida personal supone pérdida,<br />

muerte, infierno o aislamiento social. En vez de la solidaridad entre vecinos,<br />

Jazmina Caballero García (1977) encuentra el rechazo y la burla:<br />

Cada día fue una mordida<br />

un entierro que se elevó<br />

sin oportunidad de abandonar nada,<br />

una ilusión que bastaba la tierra donde caer.<br />

Cada día fue un niño muerto,<br />

un desierto, una condena…<br />

Sin olvidar que afuera todos reían. (“Cada día fue una mordida”)<br />

Helena Ramos recalca “la negra luz” de esta poeta: “Un fulgor sombrío, una<br />

llama sola en medio de la nocturnidad; un valeroso desconsuelo ante el entorno<br />

hecho ‘de piedra y odio’, donde ‘todo se perdió en errores y silencios’…. La<br />

muerte ronda este saturnino microcosmos” (“La negra luz”). A diferencia de las<br />

nuevas poetas que hemos examinado, Caballero, según Ramos, “no asume el<br />

sufrimiento como parte intrínseca del orden universal, sino que problematiza<br />

desde una óptica de crítica social” (“La negra luz”).<br />

Algunas de las nuevas poetas plantean el escapismo de este “ridículo<br />

mundo” a través de la tripartita solución de drogas, licor y sexo, como poetiza<br />

Natalia Hernández Somarriba (1982) en “domingo naranja”:<br />

en permanente espera<br />

con el porro en una mano y el trago en la otra. […]<br />

consigo moldear cualquier situación en dependencia del grupo<br />

presente<br />

con más o menos droga, […]<br />

coca, ron, monte, sexo, risa, idioma, amor, todo.<br />

En contraste con la introducción del cuerpo femenino eróticamente potente en la<br />

poesía de Gioconda Belli y Christian Santos en los años 70, las nuevas expresan<br />

103

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!