17.06.2016 Views

LA TEORIA CRITICA DE LA SOCIEDAD DE HADERMAS

2hYKorj5R

2hYKorj5R

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

9 4 T E O R IA C R IT IC A D E <strong>LA</strong> SO C IE D A D D E H A B ER M A S<br />

lineal, tipificado según el modelo de desarrollo propio de la dimensión técnica;<br />

mientras que, por otro lado, toda la carga crítica de los sociólogos francofurtenses<br />

estaba orientada a dinamitar el positivismo, no ya larvado, sino<br />

militante, de la organización socioeconómica y política de nuestra sociedad<br />

superindustrializada y del nuevo pensamiento dentista que la cimenta. Sirviéndonos<br />

de nuestro sencillo «esquema de las dos dimensiones» podemos<br />

entonces resumir: ante la creciente tendencia hacia la subordinación de la<br />

dimensión social bajo los imperativos de la dimensión técnica, en el desarrollo<br />

histórico moderno (tanto en el contexto social real como en el terreno<br />

ideológico), la Teoría Crítica quiere rescatar la supremacía de la dimensión<br />

social a través de una nueva comprensión teórica de la interrelación entre<br />

ambas dimensiones que sea capaz de impulsar una nueva praxis liberadora<br />

de un supertecnicismo deshumanizante. Veamos ahora brevemente cómo los<br />

capítulos IV y V nos han colocado ya a Habermas de lleno en el intento de<br />

llevar a buen puerto esta grandiosa empresa, en seguimiento de sus predecesores.<br />

En los capítulos IV y V hemos planteado respectivamente la crítica de<br />

Habermas al contexto real sociopolítico-económico del supertecnicismo moderno<br />

y al desarrollo del pensamiento filosófico que culminó en el Positivismo<br />

de las Ciencias, aludiendo en ambos casos al entronque del planteamiento<br />

habermasiano con el de la primera generación de la Escuela de Frankfurt.<br />

Retrospectivamente podemos ver ahora que la problemática resumida en<br />

nuestro esquema de las dos dimensiones jugaba en ambos capítulos un papel<br />

central. La distinción entre trabajo (o acción dirigida a la consecución de un<br />

fin) e interacción (o acción comunicativa) era, en definitiva, en el capítulo<br />

IV el instrumento teórico con el que Habermas nos esbozaba un esquema<br />

interpretativo de la evolución de la sociedad (desde las sociedades primitivas<br />

hasta las sociedades modernas, pasando por las sociedades tradicionales), esquema<br />

en el que insertaba su análisis de la sociedad capitalista contemporánea.<br />

Su diagnosis sobre esta última era allí también la de la tendencia creciente<br />

de la dimensión técnica a invadir y a eliminar la dimensión social o<br />

de la moralidad. Y su búsqueda de solución no iba por el camino de llegar<br />

hasta un nuevo tipo de Técnica no opresora (como, en parte, Marcuse), sino<br />

por el de llegar hasta una nueva relación entre Técnica y Política, que devolviera<br />

a esta última la racionalidad pretendidamente monopolizada por la<br />

Técnica. El tratamiento de la trayectoria histórico-filosófica que abocó en el<br />

Positivismo de las Ciencias discurrió en el capítulo V como una reconstrucción<br />

de la pérdida de la unidad entre la Filosofía y las Ciencias, pérdida que<br />

tomó la forma de una absolutización del método propio de las Ciencias de la<br />

Naturaleza como único criterio de cientificidad, y que llegó a su culminación<br />

en la sustitución de la Teoría del Conocimiento por una Teoría de la<br />

Ciencia. Al final del capítulo veíamos que la tarea que Habermas se proponía<br />

era la de llegar a fundamentar una Teoría del Conocimiento que restableciera,<br />

en una forma nueva, la relación entre Ciencia y Filosofía, entre Ciencias<br />

de la Naturaleza y Ciencias del Hombre.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!