15.05.2013 Views

Aviraneta, o la vida de un conspirador - AMPA Severí Torres

Aviraneta, o la vida de un conspirador - AMPA Severí Torres

Aviraneta, o la vida de un conspirador - AMPA Severí Torres

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Pío<br />

Baroja A v i r a n e t a o l a v i d a d e u n c o n s p i r a d o r<br />

No era muy agradable para <strong>un</strong> ejército numeroso <strong>la</strong> estancia en Ciudad Rodrigo.<br />

Por fort<strong>un</strong>a, <strong>Aviraneta</strong>, en compañía <strong>de</strong> alg<strong>un</strong>os amigos, fueron encargados <strong>de</strong> hacer excursiones<br />

para forrajear por los alre<strong>de</strong>dores, y se establecieron con <strong>un</strong> piquete en <strong>un</strong>a alquería próxima, que se<br />

l<strong>la</strong>maba Pedro Tello.<br />

El estado <strong>de</strong>l país iba haciéndose <strong>de</strong>sesperado. El ejército liberal no hacía el esfuerzo necesario<br />

para oponerse al avance <strong>de</strong> los franceses. Se dijo que los franceses se <strong>de</strong>tenían; pero no fue así.<br />

Los franceses pasaron los Pirineos, no se quedaron en <strong>la</strong>s provincias <strong>de</strong>l Norte, cruzaron el Ebro<br />

y Castil<strong>la</strong> y atravesaron Despeñaperros.<br />

El Empecinado no estaba sostenido por el espíritu <strong>de</strong> <strong>un</strong>a ciudad liberal: se encontraba en tierras<br />

hostiles, sin más consejo que el <strong>de</strong> <strong>Aviraneta</strong>, y no podía aceptar siempre sus inspiraciones.<br />

Entre los dos existía oscura incompatibilidad. <strong>Aviraneta</strong> sentía mezc<strong>la</strong> <strong>de</strong> cariño, <strong>de</strong> admiración y<br />

<strong>de</strong> <strong>de</strong>sdén por el general. El verle tan tosco, y muchas veces tan incomprensivo, le ponía en contra<br />

suya.<br />

Al Empecinado, por su parte, le producía su secretario sentimiento confuso <strong>de</strong> <strong>de</strong>sconfianza y <strong>de</strong><br />

repulsión. Sabía que era hombre <strong>de</strong> probidad, pero le creía capaz <strong>de</strong> <strong>un</strong>a infamia por <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r su<br />

causa. <strong>Aviraneta</strong> pensaba que el fin justificaba los medios.<br />

49

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!