29.04.2013 Views

Vocabulario de Palabras Típicas - Hinojosa

Vocabulario de Palabras Típicas - Hinojosa

Vocabulario de Palabras Típicas - Hinojosa

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

17<br />

Diccionario típicas<br />

En los escritos eclesiásticos <strong>de</strong> 1765 con<strong>de</strong>nando las costumbres <strong>de</strong> estos<br />

pueblos en las bodas, cuenta, a la vez que con<strong>de</strong>na, la manera como era recibida<br />

la nueva esposa en el pueblo <strong>de</strong>l marido, cuando ésta era forastera: Acogida con<br />

un palio (<strong>de</strong> serón viejo) y con sahumerios, a la puerta <strong>de</strong> la casa se la hacía firmar<br />

(...y con a<strong>de</strong>mán que han <strong>de</strong> firmar con la punta <strong>de</strong> la mayor que encuentran...),<br />

quiere esto <strong>de</strong>cir que ella entraba en su propiedad.<br />

En los pueblos que me ocupan, y en un porcentaje gran<strong>de</strong> <strong>de</strong> estas tierras,<br />

no sólo se daban los trashumantes con sus ganados, también los arrieros, pimentoneros,<br />

muleteros o muleros que <strong>de</strong>jaban la casa y el pueblo en manos <strong>de</strong> sus<br />

mujeres. La mujer por tanto quedaba como dueña y señora <strong>de</strong> la casa...<br />

Hablo en un apartado <strong>de</strong> este vocabulario en la palabra hija, que quien<br />

tiene una hija comerá pollo o que tendrá media puerta abierta. Bueno, pues esta<br />

apreciación nació en pueblo <strong>de</strong> arrieros y muleteros, don<strong>de</strong> al volver <strong>de</strong> la temporada,<br />

el padre podía llamar en casa <strong>de</strong> sus hijas, sabiendo que siempre tendría<br />

un cobijo, o un tentempié. Cosa que no ocurría en casa <strong>de</strong> sus hijos don<strong>de</strong> quien<br />

recibía la llamada era la nuera.<br />

La mujer dominaba la casa. Era su dueña indiscutida. No es <strong>de</strong> extrañar<br />

tanto adjetivo con terminación en femenino...<br />

El espacio <strong>de</strong> la mujer queda aclarado: era la casa y cuanto a ella directamente<br />

pertenecía: <strong>de</strong>spensa, higiene, corral...<br />

O, <strong>de</strong>beremos <strong>de</strong>cir <strong>de</strong> patriarcado incipiente y por tanto belicoso...<br />

En cambio el hombre se <strong>de</strong>senvolvía en la plaza. En el carasol comentando<br />

trabajos y cosechas. En el juego <strong>de</strong> pelota y en el rincón <strong>de</strong> las apuestas <strong>de</strong> fuerza<br />

o <strong>de</strong> barrón...<br />

Recorría el monte <strong>de</strong> cazador y <strong>de</strong> pastor. Las fincas como propietario.<br />

Acudía a las ferias como comprador o como ven<strong>de</strong>dor, a veces como simple<br />

espectador en previsión <strong>de</strong> una necesidad. Y, en ellas, estudiaba incluso y<br />

proponía a su hijo como pastor o como agostero, si había suerte como ayudante<br />

<strong>de</strong> herrero o…<br />

Salía por el mundo como arriero. Uno <strong>de</strong> los juegos infantiles que recuerdo<br />

como una gracia que se hacía a los más niños, era echarlos al hombro como si<br />

lleváramos unas alforjas y gritar <strong>de</strong> puerta en puerta: “Se ven<strong>de</strong> aceite y vinagre<br />

que por el culo se le sale...” O como tratante recorría el mundo, y también <strong>de</strong><br />

pastor...<br />

La ley y las normas <strong>de</strong> la iglesia regulaban activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> herencias, compraventas<br />

etc. De las que no hago comentarios porque pertenecen a otros ámbitos<br />

más generales.<br />

Queda claro dón<strong>de</strong> se ubican los espacios en los que se <strong>de</strong>senvolvía la vida<br />

<strong>de</strong> ellas y <strong>de</strong> ellos. Su área, las parcelas <strong>de</strong> terreno que correspondían a cada uno<br />

y por tanto también las activida<strong>de</strong>s que en cada una <strong>de</strong> ellas se encerraban....<br />

La religión también les tenía señalado su lugar: niños a la <strong>de</strong>recha en la<br />

nave <strong>de</strong> la Iglesia, niñas a la izquierda. Mujeres <strong>de</strong>lante en sus sepulturas y<br />

hombres <strong>de</strong>trás. En las procesiones los hombres la encabezaban y las mujeres<br />

marchaban al final. Las imágenes <strong>de</strong> los santos y el oficiante en medio <strong>de</strong> la procesión.<br />

Cuando estos espacios específicos eran invadidos por ambos, se producía<br />

<strong>de</strong>terminada conmoción:<br />

Si era invadida por todos: festiva, <strong>de</strong> bailes por ejemplo, dolorosa, <strong>de</strong><br />

muertes… (en los entierros los hombres <strong>de</strong>lante <strong>de</strong>l ataúd y <strong>de</strong>l celebrante, y las<br />

mujeres <strong>de</strong>trás)<br />

y si era invadida por individuos particulares: <strong>de</strong> noviazgos...<br />

Este resumen esquemático <strong>de</strong> vidas, espero que sea suficiente aclaración<br />

para enten<strong>de</strong>r muchas palabras, así como frases alusivas a los espacios y activida<strong>de</strong>s<br />

que correspon<strong>de</strong>n a cada sexo.<br />

Queda también claro, -ya fue comentado- las maneras existentes hasta<br />

entonces, que sólo recibía la influencia externa <strong>de</strong> mano <strong>de</strong> sacerdotes, maestros

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!