MANEJO Y GESTION DE LA SEGURIDAD - Seguridad Ciudadana
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capitalino, la contraparte del alcalde metropolitano<br />
de Lima. Para que este nuevo esquema<br />
organizativo funcione bien es preciso garantizar<br />
que las jurisdicciones policiales se<br />
adecúen a las jurisdicciones distritales.<br />
Segundo, es imprescindible dotar a las comisarías<br />
de más medios logísticos, concentrando<br />
en ellas el mayor número posible de<br />
recursos, porque ellas son las unidades policiales<br />
básicas alrededor de las cuales se organiza<br />
el trabajo policial. Más allá de los recursos<br />
que puedan proporcionar los propios<br />
municipios, interesados en tener una Policía<br />
bien equipada y motivada en su distrito, la<br />
redistribución de los vehículos del Escuadrón<br />
de Emergencia hacia las comisarías<br />
permitiría, cuando menos, duplicar su número.<br />
Los 400 vehículos con que cuenta<br />
Emergencia son más que los que tienen las<br />
comisarías de Lima, lo que resulta un absurdo.<br />
Para atender las emergencias bastaría que<br />
esa unidad tuviera una fracción de los vehículos<br />
que tiene actualmente. Esta situación<br />
debe, y puede, ser corregida de inmediato.<br />
Simultáneamente hay que fortalecer el Escuadrón<br />
Verde creado durante la segunda gestión<br />
de Rospigliosi, pues ha dado buenos resultados<br />
en golpear a la delincuencia en la<br />
capital. Habría que incrementar su capacidad<br />
logística y desarrollar su inteligencia<br />
operativa, especialmente para desarticular<br />
las redes de microcomercialización de drogas.<br />
Es preciso garantizar que las autoridades<br />
municipales mantengan comunicación<br />
directa con el Escuadrón Verde, el jefe policial<br />
capitalino y eventualmente el Ministro<br />
del Interior, fortaleciendo así su autoridad y<br />
su margen de maniobra frente a los jefes policiales<br />
distritales. Estas medidas podrían ser<br />
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replicadas, sin dificultad alguna, en otras ciudades<br />
del país, donde corresponda.<br />
En términos de equipamiento quedarían<br />
pendientes otras dos tareas: uno, la adquisición<br />
de un sistema de comunicación radial<br />
para la capital, toda vez que los tres existentes<br />
no se comunican entre sí y no cubren la<br />
actual demanda; dos, la adquisición de nuevas<br />
unidades vehiculares, motocicletas y bicicletas.<br />
Estas dos tareas, sin embargo, sí requieren<br />
de recursos adicionales. Con el dinero<br />
destinado a los aviones y helicópteros<br />
se tenía previsto adquirir algunos de los equipos<br />
mencionados aquí.<br />
Tercero, un problema recurrente en las comisarías<br />
es que, según los policías, los vehículos<br />
disponibles no cuentan con suficiente combustible.<br />
Con frecuencia se condiciona la prestación<br />
de un servicio a que la ciudadanía cubra<br />
los gastos de combustible. Es probable que<br />
en algunos casos la dotación sea insuficiente;<br />
en la mayoría lo que ocurre es que el personal<br />
negocia con terceros la dotación asignada y<br />
obtiene una utilidad. Esta es una práctica que<br />
se encuentra muy extendida y es fuente de<br />
jugosas ganancias ilícitas, que ocasiona un tremendo<br />
perjuicio a la ciudadanía que se ve privada<br />
de un servicio por el que paga con sus<br />
impuestos. Esto se puede remediar.<br />
Hoy existen tecnologías de distribución y control<br />
del uso del combustible que reducen significativamente<br />
los márgenes para las irregularidades.<br />
Basta con que se licite la adquisición,<br />
almacenaje y distribución del combustible,<br />
que ahora se realiza de una manera tan<br />
poco transparente, para que esta situación<br />
cambie. El sistema actual parece estar diseñado<br />
para que se perpetuén las irregularida-