07.05.2014 Views

El Espíritu Santo - OpenDrive

El Espíritu Santo - OpenDrive

El Espíritu Santo - OpenDrive

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

180 <strong>El</strong> Espíritu <strong>Santo</strong><br />

vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama:<br />

¡Abba, Padre!'. Romanos 8.16, 17 es el más explícito de<br />

todos, porque Pablo dice expresamente en ese pasaje: '<strong>El</strong><br />

Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que<br />

somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos<br />

de Dios y coherederos con Cristo.' No está muy<br />

claro cómo el Espíritu da testimonio dentro de nuestros<br />

espíritus. ¿Lo hace simplemente morando en nuestro<br />

corazón, 'iluminando nuesta mente? Esto sería testimonio<br />

a nuestro espíritu. Pero Romanos 8.16 también se puede<br />

traducir '<strong>El</strong> Espíritu mismo da testimonio con nuestro<br />

espíritu,' En otras palabras, junto con y además de su<br />

presencia santificadora dentro de nosotros, da testimonio<br />

junto con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.<br />

En último término, sin embargo, no importa mucho<br />

cuál de las dos interpretaciones se adopte. En ambos<br />

casos, ya sea que dé testimonio a nuestro espíritu o con<br />

nuestro espíritu, el resultado es el mismo: adquirimos<br />

conciencia del hecho de que somos hijos de Dios. Al<br />

comienzo es posible no estar absolutamente seguros de<br />

nuestra filiación, como tampoco cuando ya llevamos tiempo<br />

en ese estado, pero el Espíritu <strong>Santo</strong> nos dará testimonio<br />

de una forma u otra del hecho de nuestra filiación,<br />

y nos producirá con ello gozo y consolación muy grandes.<br />

Luego llegaremos, poco a poco, a la posición de Pablo,<br />

quien tenía seguridad plena cuando dijo: 'Yo sé a quién<br />

he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar<br />

mi depósito para aquel día' (2 Ti. I.I2); o cuando exclamó<br />

al concluir Romanos 8 que estaba persuadido de<br />

que nada 'nos podrá separar del amor de Dios, que es en<br />

Cristo Jesús Señor nuestro.' Poseemos paz con Dios. <strong>El</strong><br />

Espíritu <strong>Santo</strong> nos asegura que somos hijos adoptivos de<br />

Dios.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!