Goethe 01-13.indd - Círculo de Bellas Artes
Goethe 01-13.indd - Círculo de Bellas Artes
Goethe 01-13.indd - Círculo de Bellas Artes
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
19 <strong>de</strong> septiembre <strong>de</strong> 1777<br />
Carboncillo sobre papel azulado<br />
47 x 32,2 cm<br />
Corpus I Nr. 181 / Nr. <strong>de</strong> inv. 959 B<br />
Bibliografía: Johann Heinrich Merck, Briefwechsel, ed. Ulrike<br />
Leuschner y otros, Göttingen, 2007, vol. 1, p. 768.<br />
[25] MONJE Y MONJA Obligaciones <strong>de</strong>l servicio condujeron a <strong>Goethe</strong> a la ciudad<br />
<strong>de</strong> Eisenach y sus alre<strong>de</strong>dores <strong>de</strong>s<strong>de</strong> septiembre a octubre<br />
<strong>de</strong> 1777 1 . En esa época realizó una serie <strong>de</strong> dibujos 2 .<br />
Pero más conocida que la mayoría <strong>de</strong> estos dibujos sería la<br />
por entonces noticia epistolar a Charlotte von Stein, en la<br />
que da cuenta metafóricamente <strong>de</strong> una temprana confesión<br />
que atestigua tanto su querencia por las artes plásticas<br />
como su visión distanciada y crítica, sostenida a lo<br />
largo <strong>de</strong> su vida, sobre su propio talento como artista<br />
plástico: «Es como si para mí dibujar fuese un chupete en<br />
la boca <strong>de</strong> un niño para que se calle y se tranquilice con<br />
un alimento imaginario» 3 .<br />
Siguiendo la recomendación <strong>de</strong>l duque Carlos Augusto,<br />
<strong>Goethe</strong> se alojó en el famoso Wartburg, apartado <strong>de</strong> la corte<br />
que se alojaba en Eisenach. Escribe lleno <strong>de</strong> entusiasmo:<br />
Esta vivienda es la más exquisita que he conocido, tan<br />
alta y alegre [...]. Si sólo pudiera mostrarle esta vista<br />
[....] en la horrible penumbra <strong>de</strong> la luna los profundos<br />
suelos, prados, arbustos, bosques y claros, las siluetas<br />
<strong>de</strong> los peñascos <strong>de</strong>lante y <strong>de</strong>trás las murallas, y<br />
cómo la sombra <strong>de</strong>l monte <strong>de</strong>l palacio y los palacios<br />
mantiene todo en la oscuridad y allá, en las silenciosas<br />
murallas, se agarra, cómo las <strong>de</strong>snudas puntas <strong>de</strong> roca<br />
enrojecen bajo la luna y las encantadoras pra<strong>de</strong>ras y<br />
valles lejanos allá abajo, y la vasta Turingia por <strong>de</strong>trás<br />
en la penumbra, mezclándose con el cielo.<br />
En todas las cartas semanales que escribió a Charlotte<br />
resuena la fuerte nostalgia <strong>de</strong> su amada. Y para consolarse,<br />
y con la esperanza <strong>de</strong> que ella se alegrara <strong>de</strong> recibir<br />
una palabra escrita «o sino un garabato» suyo, dibujó<br />
para ella –«cosquilleo sobre el papel»– una serie <strong>de</strong> motivos<br />
preferidos que él llamaba «rinconcillos estrechos».<br />
1 El ducado <strong>de</strong> Sajonia-Eisenach, un minúsculo estado surgido<br />
tras la división territorial <strong>de</strong> 1672 –<strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1760 acrecentado<br />
con el ducado <strong>de</strong> Sajonia-Jena, que no fue incorporado en<br />
el nombre–, en 1741 volvió a formar parte, bajo el gobierno<br />
<strong>de</strong>l duque Herzog Ernst August I, <strong>de</strong>l principado <strong>de</strong> Sajonia-<br />
Weimar (Weimar, 2007, pp. 23 y ss.).<br />
2 Corpus I, Nr. 179–184; VIB, Nr. 30.<br />
Entre ellos se encuentran dos dibujos poco conocidos<br />
con el lema <strong>de</strong> Monje y Monja, que en su forma<br />
original son dos puntas erosionadas <strong>de</strong> una formación<br />
rocosa <strong>de</strong> capas <strong>de</strong> permiana bajo el mojón (así <strong>de</strong>nominado<br />
por <strong>Goethe</strong>) colocado entre Eisenach y Wartburg.<br />
Des<strong>de</strong> su ventana en Wartburg, <strong>Goethe</strong> podía ver muy<br />
bien las dos puntas llamadas Monje y Monja.<br />
El nombre <strong>de</strong> la roca proviene <strong>de</strong> su i<strong>de</strong>ntifi cación<br />
con dos formas que se besan conforme a la leyenda <strong>de</strong> un<br />
amor extraordinariamente fuerte entre un monje y una<br />
monja que, lejos <strong>de</strong> la mirada <strong>de</strong> sus monasterios, se<br />
dieron cita en este remoto lugar. Unidos en un beso,<br />
se convirtieron en piedra. La leyenda cuenta que así se<br />
cumplió el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> los amantes <strong>de</strong> permanecer unidos<br />
para siempre 4 .<br />
En 1775, en el Teutschem Merkur <strong>de</strong> Wieland, apareció<br />
una balada sobre esta leyenda; <strong>Goethe</strong> pudo suponer<br />
entonces que la señora von Stein estaba enterada <strong>de</strong>l<br />
signifi cado <strong>de</strong> las rocas. Le <strong>de</strong>dicó los dibujos en cierto<br />
modo como mensaje, como metáfora <strong>de</strong> su amor.<br />
No es posible suscribir la i<strong>de</strong>a expresada por algunos<br />
investigadores <strong>de</strong> que este dibujo manifestaba el interés<br />
<strong>de</strong> <strong>Goethe</strong> por los fenómenos naturales, que luego le<br />
llevaría a la ciencia 5 . Más bien, el mo<strong>de</strong>lo natural actuó<br />
como <strong>de</strong>tonante <strong>de</strong> un estado <strong>de</strong> ánimo que fue llevado<br />
al papel azul para plantear un dibujo cifrado. Las formas<br />
<strong>de</strong> las rocas se representan <strong>de</strong> manera fuertemente<br />
abstraída, casi planas; aquí el espacio está sólo vagamente<br />
aludido. Esta reducción, muy cercana a la frontera <strong>de</strong><br />
lo abstracto, así como el cifrado <strong>de</strong> su lenguaje pictórico<br />
establecido a tal fi n, son hitos típicos <strong>de</strong>l estilo <strong>de</strong> dibujo<br />
<strong>de</strong> <strong>Goethe</strong> <strong>de</strong> los primeros años <strong>de</strong> Weimar y, a su<br />
manera, resultan absolutamente comparables con el lenguaje<br />
pictórico <strong>de</strong> la mo<strong>de</strong>rnidad 6 .<br />
3 <strong>Goethe</strong> a Charlotte von Stein, carta <strong>de</strong>l 13-16 <strong>de</strong> septiembre<br />
<strong>de</strong> 1777; WA IV, 3, p. 176. De aquí también las citas<br />
siguientes.<br />
4 Ludwig Bechstein, Deutsches Sagenbuch, Leipzig, 1853.<br />
5 Cf. Corpus I, Nr. 181.<br />
6 Cf. Fehrenbach, 1998, pp. 146 y s.