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fue aaluralmeate interpretada por los
Liejenses como el aauacio de la determinacioB
que habia toaiado de abrazar
abiertamente su partido. La vista de uao
solo de sus archeros parecíales segura
prenda de inmediato y eficaz apoyo.
Fundados alguaos en lo mismo, llegaron
á creer que las fuerzas auxiliares de Luis
entraban al propio tiempo por uaa de
las puertas de la ciudad , auaque nadie
supiera decir cual.
Quintín vio desde luego que era imposible
disipara!» error taa gencralmeate
admitido, y hasla llegó á persuadirse
de que le seria iaiposible desengañar á
naos hombres tan leaaces v aferrados ea
su opíaioa , sin correr algunos riesgos á
que no consideró necesario ni prudente
aveaturarse. Determinó por de proato
contemporizar, para librarse de aquel
solícito gentío del mejor modo que le
fuese dable. Sia embarco , íbasele enea-