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aúauMo mas corlo , sufiíalos con valor
y ít^^ignat Ion. El zi¡)Izape era tanto
nia\or. cuanto los que vapulaban á Ilayladíiin
podían llama: se soldados sin esperj{!ncla
, que , (Mi lugar de azotar al
reo , se daban unos á otros fuertes golpes.
El r^rior, por fia, cpierieado poner
término á una escena mas escandalosa
(jue cdificaate, raandó abrirla puerta
d( 1 palio , y el gitano precipiláadose
por esta salida coa la rapidez del relámpago
, aprovechóse de la claridad de la
luna para despedirse del ooavenlo.
Ea esle latervaio, ana sospecha que
mas de una vez coacibiera Duiward presentóse
coa mayor f«;er7.a á su imaginacioi).
Cabaluieale aquel mismo día
Hayraddia le había prometido portarse
(le ua modo mas decenio y moderado
si(>uipre qne tuviesen que hacer alto en
algún monasterio; y sin embargo, lejos
de cumplir su palabra . procedió coii