15.05.2013 Views

Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat

Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat

Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Fundatión En la Calle Recta (ECR)<br />

Después <strong>de</strong> abandonar el convento, el primer peluquero que me sirvió se <strong>de</strong>tuvo un<br />

momento, intrigado, observando mi coronilla. ¡La tonsura no había <strong>de</strong>saparecido<br />

todavía! Le largué en aquel momento una espléndida propina y me guiñó el ojo. No<br />

hubo ningún comentario.<br />

Problema <strong>de</strong>licado mis libros. ¿Podía consi<strong>de</strong>rarlos <strong>de</strong> mi propiedad? Los había<br />

comprado con dinero recibido <strong>de</strong> mi familia pero la Regla estipula que todo lo que<br />

adquiere un religioso pasa a ser propiedad <strong>de</strong> la comunidad. ¿Qué hacer?<br />

Había trabajado largo tiempo al servicio <strong>de</strong> la Congegación, no recibiendo como pago<br />

más que la manutención y el alojamiento y mis estudios <strong>de</strong> filosofía y teología.<br />

Calculé, pues, por un lado lo que la or<strong>de</strong>n había ganado con mi trabajo. Sin<br />

escrúpulos, llegué a la conclusión <strong>de</strong> que los libros me pertencían.<br />

Pero, ¿cómo sacarlos <strong>de</strong>l convento? No podía hacerlo el día <strong>de</strong>finitivo pues eran<br />

<strong>de</strong>masiados. El pastor Nocetti me había dado el nombre <strong>de</strong> una familia protestante <strong>de</strong><br />

Tieté. Ignoraba la dirección pero sabía que el cabeza <strong>de</strong> familia era concejal <strong>de</strong>l<br />

municipio. Busqué ávidamente el nombre en la guía telefónica pero no lo encontré.<br />

¿Dón<strong>de</strong> ir? Conocía la existencia <strong>de</strong> una iglesia presbiteriana en Tieté pero carecía<br />

entonces <strong>de</strong> pastor. Más <strong>de</strong> una vez pasé ante el templo con la esperanza <strong>de</strong><br />

encontrar un conserje, pero sin éxito.<br />

Las semanas pasaban y yo precisaba solución urgente. Pensé entonces dirigirme, en<br />

la calle, a cualquier transeunte y preguntarle el domicilio <strong>de</strong>l concejal mas <strong>de</strong>seché la<br />

i<strong>de</strong>a por peligrosa.<br />

Tomé nuevamente la guía <strong>de</strong> teléfonos y en ella encontré, a fe mía, la dirección. No<br />

había ninguna duda. Al lado <strong>de</strong>l nombre se <strong>de</strong>cía , o sea, concejal.<br />

Le visité tan pronto como pu<strong>de</strong>. Estaba enfermo y yacía en el lecho. Su familia quedó<br />

estupefacta al verme en la casa. El conceja; me habló <strong>de</strong> Jesús como <strong>de</strong> mi Salvador<br />

y me asombró al oir a un simple hombre <strong>de</strong> mundo hablarme <strong>de</strong> Jesús con tanta<br />

piedad y fervor. Me prometió su colaboración y me aseguró que podía visitarle<br />

cuantas veces lo <strong>de</strong>sease y traerle los libros. El los enviaría a Sao Paulo <strong>de</strong>spués <strong>de</strong><br />

mi salida.<br />

Tiempo <strong>de</strong>spués vi la acción <strong>de</strong> la Provi<strong>de</strong>ncia en estos sucesos. Si hubiera enontrado<br />

enseguida la dirección, me hubiera dirigido <strong>de</strong>masiodo pronto a casa y me hubiera<br />

expuesto a un fracaso. Dios vela por sus hijos. (Sal. 91:11-13). ¡Caminar sobre <strong>las</strong> serpientes! Las serpientes<br />

son un azote <strong>de</strong>l Brasil. En Sao Paolo existe un instituto encargado <strong>de</strong> dirigir la lucha<br />

contra<strong>las</strong> especies venenosas. <strong>Se</strong> le pue<strong>de</strong> enviar toda serpiente capturada siempre<br />

que el animal esté vivo. Cuando se envían tres ejemplares venenosos se recibe, a<br />

cabio, un frasco <strong>de</strong> antídoto contra el veneno.<br />

Existe en Brasil la creencia <strong>de</strong> que ningún sacerdote ha sido mordido jamás por una<br />

serpiente. <strong>Se</strong> atribuye el hecho a una protección especial <strong>de</strong> la Provi<strong>de</strong>ncia. Sin<br />

embargo, un religioso re<strong>de</strong>ntorista había sido mordido, aunque fue <strong>de</strong>bido, según se<br />

<strong>de</strong>cía, a que saltó temeriamente sobre el animal. El contraveneno le curó.<br />

A pesar <strong>de</strong> estos rumores, durante algún tiempo tuve mucho miedo. Cuando<br />

transitaba por una región infestada <strong>de</strong> serpientes, más <strong>de</strong> una vez pensé que, puesto<br />

que yo era en el fondo <strong>de</strong> mi alma un sacerdote infiel, Dios permitiría que una<br />

<strong>Se</strong> Rompieron <strong>las</strong> Ca<strong>de</strong>nas 73 Herman J. Hegger

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!