Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat
Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat
Se rompieron las cadenas.pdf - Stichting In de Rechte Straat
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Fundatión En la Calle Recta (ECR)<br />
Me alegró leer en estos libros simbólicos que nadie se con<strong>de</strong>na sino es por su propio<br />
culpabilidad. Los calvinistas no convierten, pues, a Dios en un tirano que se complace<br />
en con<strong>de</strong>nar a algunos hombres al infierno. Antes, pues, había comprendido mal la<br />
doctrina calvinista sobre este punto.<br />
Dos meses <strong>de</strong>spués entré en contacto con la colonia reformada <strong>de</strong> Carambei. Tuve<br />
entonces la ocasión <strong>de</strong> <strong>de</strong>partir con el Pastor Muller a quien le expuse mi concepción<br />
sobre la elección divina. El me consi<strong>de</strong>ró, sin dudarlo, como un auténtico calvinista.<br />
<strong>Se</strong>gún mi parecer, todo protestante se adhiere, implícitamente al menos, a la doctrina<br />
<strong>de</strong> la elección. Nosotros confesamos, en efecto, que no po<strong>de</strong>mos merecer el cielo.<br />
Creemos en la salvación por la sola gracia, . Así, pues, afirmamos que el<br />
hombre no se justifica por sus mismas obras, sino que admitimos necesariamente que<br />
nuestra salvación está en manos <strong>de</strong> Dios.<br />
Existen, empero, gran<strong>de</strong>s misterios, que nunca podremos calar. No nos es posible<br />
conciliar lógicamente el hecho <strong>de</strong> que Dios es el único autor <strong>de</strong> nuestra salvación con<br />
la responsibilidad humana. Después <strong>de</strong> siglos, aún en la Iglesia <strong>de</strong> Roma, los teólogos<br />
y filósofos discuten estos problemas sin llegar a una conclusión clara. Basta citar los<br />
nombres <strong>de</strong> Molina y Yañez.<br />
Este problema, según creo, sólo admite una solución religiosa y no filosófica. Es lo que<br />
enseña la Biblia. Esto no le dice al incrédulo que <strong>de</strong>be esperar la intervención divina,<br />
sino que le exhorta vivamente a actuar: . Este <br />
impone un imperativo a su conciencia. A la luz <strong>de</strong> la Palabra <strong>de</strong> Dios, todo hombre<br />
honrado, sincero consigo mismo, sabe perfectamente que si no se convierte a Dios,<br />
y, como consecuencia, se con<strong>de</strong>na, sólo él tiene la culpa. Si son<strong>de</strong>a su propio yo,<br />
<strong>de</strong>scubrirá enseguida que toda objeción sobre la incertidumbre <strong>de</strong> su elección no es<br />
sino un camuflaje <strong>de</strong> su malvada voluntad.<br />
La Biblia, a<strong>de</strong>más, exige la humildad al convertido. No le fecilita jamás ni le dice:<br />
Le dice por el<br />
contrario: (Efesios 2:8-<br />
10).<br />
Y la admirable solución que ofrece la Escritura satisface <strong>las</strong> más profundas<br />
necesida<strong>de</strong>s religiosas <strong>de</strong>l creyente. Éste siente la necesidad <strong>de</strong> acusarse <strong>de</strong>lante <strong>de</strong><br />
Dios. <strong>Se</strong> siente responsable <strong>de</strong> <strong>de</strong>seos torcidos y <strong>de</strong> pensamientos malos que surgen<br />
en él y contra los que él combate. Y no se le ocurrirá jamás hacer a Dios, <strong>de</strong> alguna<br />
forma, responsable <strong>de</strong> <strong>las</strong> malvadas inclinaciones que turban su alma.<br />
Ni le es posible glorificarse como si todo fuera suyo. <strong>Se</strong> sabe pequeño, inútil y pecador<br />
ante Dios. Y sabe también que cuanto más se <strong>de</strong>spoje <strong>de</strong> sí mismo, tanto más pue<strong>de</strong><br />
apoyarse en la plenitud <strong>de</strong>l Dios que habita en Jesucristo, confiando<br />
en su po<strong>de</strong>r y en su misericordia, para adquirir así el sentimiento <strong>de</strong> una seguridad<br />
total.<br />
<strong>Se</strong> pue<strong>de</strong>, pues, aplicar a la doctrina <strong>de</strong> la elección <strong>las</strong> palabras <strong>de</strong> Pascal: <br />
En Navidad volví a casa <strong>de</strong> los Kraan. Entonces oí hablar, por primera vez, <strong>de</strong> una<br />
comunidad belga en Den<strong>de</strong>rleeuw. Mme. Kraan es, en efecto, la hija <strong>de</strong> M.P. Neven,<br />
<strong>Se</strong> Rompieron <strong>las</strong> Ca<strong>de</strong>nas 92 Herman J. Hegger