13.07.2015 Views

Se acata pero no se cumple

Se acata pero no se cumple

Se acata pero no se cumple

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

167el fruto de mi trabajoNeller Ochoaesclavos”, promulgada en Aranjuez (1789). Dicha ordenanza es hija del despotismo ilustrado deCarlos III y su incidencia liberal en las colonias americanas.La falta de un corpus <strong>se</strong>rio y coherente sobre las esclavitudes americanas fue una de las mayoresdeudas del Imperio español. Así lo dejó saber el Cabildo caraqueño a finales del siglo XVIII: “Bienco<strong>no</strong>cemos que aquí estamos muy necesitados de un Código Negro y que los amos han suspiradomucho por él…” 88 . No obstante, cuando la “Instrucción” entró en vigencia, esta necesidad <strong>se</strong>convirtió en rechazo y temor. La élite esclavista caraqueña protestó la iniciativa desde el Cabildo,aduciendo que la altivez propia de los esclavos aumentaría gracias al carácter paternalista de la ley.Cualquier ordenanza que limitara la toma de decisiones sobre los esclavos era vista comoun atentado a la propiedad, <strong>pero</strong> ya desde las Siete Partidas <strong>se</strong> insistía: <strong>no</strong> <strong>se</strong> les debe matar dehambre 89 . Una idea virginal sobre la hacienda cacaotera <strong>no</strong>s hace pensar en relaciones de producciónbien definidas, donde el amo otorgaba el alimento y vestido necesario a sus esclavos.Este precepto <strong>se</strong>ría irrespetado constantemente. Ya para 1687, el Sí<strong>no</strong>do Diocesa<strong>no</strong> de Caraca<strong>se</strong>stipulaba “…que es gravísimo pecado mortal, el <strong>no</strong> darles a sus esclavos lo necesario, paracomer, y vestir <strong>se</strong>gún su estado, y condición…” 90 . Casi 100 años después, en 1766, el obispo88 Ibídem, p. 109.89 “Llenero poder ha el <strong>se</strong>ñor sobre su siervo para facer dél lo que quiei<strong>se</strong>re; <strong>pero</strong> con todo esto <strong>no</strong>l debe matar nin estemar,maguer le fecie<strong>se</strong> por qué, á me<strong>no</strong>s de mandamiento del juez, nin matarle de fambre, fueras ende si lo falla<strong>se</strong> con sumuger ó con su fija, ó faciendo otro yero <strong>se</strong>mejante destos, ca entonces bien lo podrie matar…” (Partida Cuarta, TítuloXXI: De los siervos, Ley VI: “Qué poderío han los <strong>se</strong>ñores sobre sus siervos”, en Las Siete Partidas del Rey Don AlfonsoEl Sabio. Cotejadas con varios Códices Antiguos por la Real Academia de la Historia, t. III (Partidas cuarta, quinta, <strong>se</strong>xta yséptima), p. 120.90 Manuel Gutiérrez de Arce (comp.), El Sí<strong>no</strong>do Diocesa<strong>no</strong> de Santiago de León de Caracas de 1687: valoración canónica del regioplacet a las constituciones si<strong>no</strong>dales indianas, t.. II, p. 147.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!