08.06.2017 Views

El vendedor de sueños -- Augusto Cury

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

vez a Dios con su soberbia y sus segundas intenciones? ¿Qué i<strong>de</strong>alista no traiciona sus<br />

i<strong>de</strong>as políticas en nombre <strong>de</strong> intereses subterráneos? ¿Qué ser humano no traiciona su<br />

salud por algunas horas <strong>de</strong> trabajo extra? ¿Quién no traicionó su sueño para hacer <strong>de</strong><br />

su cama un lecho <strong>de</strong> tensiones? ¿Quién no traicionó a sus hijos en pos <strong>de</strong> sus<br />

ambiciones diciéndoles que trabajaba para ellos? ¿Quién no traicionó el amor <strong>de</strong>l<br />

hombre o la mujer <strong>de</strong> su vida con sus prejuicios o su falta <strong>de</strong> diálogo y tolerancia?<br />

Traicionamos a la ciencia con nuestras verda<strong>de</strong>s absolutas, traicionamos a nuestros<br />

alumnos con nuestra incapacidad <strong>de</strong> escucharlos, traicionamos a la naturaleza con<br />

nuestro <strong>de</strong>sarrollo. Como nos había alertado el maestro, traicionamos a la humanidad<br />

cuando levantamos la ban<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> que somos judíos, palestinos, americanos, europeos,<br />

chinos, blancos, negros, cristianos o musulmanes. Todos somos traidores que<br />

necesitan <strong>de</strong>sesperadamente comprar sueños. Todos tenemos a un Judas alojado en<br />

nuestro interior. Especialistas en escon<strong>de</strong>r sus cimientos <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> la alfombra <strong>de</strong>l<br />

activismo, la ética, la moral, la justicia social.<br />

<strong>El</strong> maestro parecía leer mis pensamientos. Al percibir mi estado <strong>de</strong> introspección,<br />

me miró a los ojos; <strong>de</strong>spués alzó la vista hacia el público y continuó hablando.<br />

—La interpretación <strong>de</strong> la visión, que no importa que algunos llamen alucinación,<br />

hizo que me diera cuenta <strong>de</strong> que mi pa<strong>de</strong>cimiento psíquico era muy anterior a mis<br />

pérdidas. —Luego dijo que era un ser humano que había resurgido <strong>de</strong> sus cenizas y<br />

recuperó su buen humor para bromear con la multitud—: Cuidado, señoras y señores,<br />

el que les habla <strong>de</strong>svaría <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace años.<br />

La audiencia salió <strong>de</strong> su estado <strong>de</strong> conmoción y se rió. Era una escena difícil <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>scribir.<br />

—Después <strong>de</strong> haber tomado conciencia <strong>de</strong> que había traicionado mis cimientos,<br />

necesitaba encontrar los fundamentos <strong>de</strong> mi personalidad. Fue entonces cuando <strong>de</strong>jé<br />

el hospital y me aislé durante un largo tiempo para encontrarme a mí mismo. Fue un<br />

largo viaje durante el cual me perdí muchas veces. Después <strong>de</strong> ese tiempo, salí <strong>de</strong> mi<br />

capullo y me transformé en una pequeña golondrina que planea sobre las calles y<br />

avenidas alentando a la gente para que busque su propio ser. —Y nuevamente<br />

<strong>de</strong>mostró su buen humor al <strong>de</strong>cir—: ¡Cuidado, amigos, esta locura es contagiosa!<br />

La gente volvió a reírse e irrumpió en aplausos, como si efectivamente <strong>de</strong>searan<br />

contagiarse. Así lo habíamos hecho nosotros, Bartolomé, Bernabé, Dimas, Jurema,<br />

Mónica, yo y tantos otros. Recuerdo como si fuese ayer el día en que yo quería<br />

<strong>de</strong>sistir <strong>de</strong> todo y él me bombar<strong>de</strong>ó con una poesía cuyos pensamientos me

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!