02.05.2020 Views

Arde la vida - Magali Tajes

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

«Yo te lo tendría que haber dicho». «No hubiera cambiado nada».

«Quizás para mí sí». «Yo estaba muy boludo también».

«Sí. Pero hiciste que me animara a algo a lo que le tenía un miedo

terrible. Gracias». «No me agradezcas nada. Fue algo que hicimos los dos».

«Igual, gracias. Te quiero». «Yo también te quiero, Maguito». «¿Te dije que

te busqué las tetas? Aunque con mis 85, vos no estarías en una situación muy

diferente». Nos reímos, y entonces, lo miro y me doy cuenta de que me sigue

pareciendo hermoso. También soy consciente de que algo no hubo entre

nosotros. De que algo no pasó.

Unas chispas no bastan para provocar un incendio entre dos personas.

Sobre todo, cuando el miedo está ahí, invocando un diluvio que apague

cualquier intento.

Miedo tonto,

miedo ciego,

miedo mío.

Miedo opaco,

miedo vulnerable,

miedo tuyo.

Miedo que sangra,

miedo herido,

miedo nuestro.

Aunque cierres los ojos no se va.

Porque hasta que no abras el alma,

no se va a ir.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!