SAN AGUSTÍN - Alma de Cántaro

142 Anotaciones al libro de Job 38,25
cuando dice: ¿Quién preparó río a la lluvia torrencial?Río
que llene y por donde discurra. Como son los vasos de ira
hechos para la perdición que toman la palabra de la Escritura
como acabo de decir. A través de ellos tiene un curso más
desembarazado aquella perniciosa interpretación que no
aceptan los campos fértiles, y que empuja, derriba y arrastra
cuanto halle inestable con tanto mayor empuje cuanto mayores
visos tiene de proceder de la autoridad de Dios. Por
último, le tientan los vientos a aquel a quien azotan las vanas
sugerencias de los orgullosos, es decir, de los que profieren
palabras vanas por propia autoridad. Quien por juicio de
Dios se prepara para la perdición no obedeciendo sus palabras,
cosa que equivale a edificar sobre arena, no resiste esta
clase de vientos, y al hundirse da paso a los rugidos de la
tormenta. La expresión lluvia torrencial la considero como
de difícil interpretación. Para hacer llover donde no hay
hombre: se sobrentiende ¿quién la dispuso? Opino que
hombre aquí significa la Ley dada a los judíos. Por consiguiente,
entendemos la lluvia del Evangelio que cae sobre
los gentiles. Sobre el desierto en que no hay hombres: entre
los mismos gentiles donde no gozaba de estima el conocedor
de Dios. Para empapar parajes inhóspitos y deshabitados
y para hacer brotar la hierba verde: Muchos son los hijos
de la abandonada, más que los de la que tiene marido. En
estos cuatro versos debe sobrentenderse la misma pregunta:
parauit ualidade pluuiae flamen? (Iob 38,25). Quod inpleat et qua
currat, sicut sunt uasa trae perfecta adperditionem (cf. Rom 9,22),
quae illo modo, quo dixi, Scripturas accipiunt; per illos enim habet
liberiorem cursum perniciosa illa interpretado, quam agri fructiferi non
recipiunt, et tanto maiore inpetu inpellit et deicit et trahit quod instabile
inuenerit, quanto uidetur de auctoritate diuina suscepta- uentis uero
tentatur, quem inflant inanes suasiones hominum superborum, id est ex
propria auctoritate uerba uaná iactantium. Qui ergo iudicio Dei praeparatur
ad perditionem non obtemperando uerbis eius -quod est super
arenam aedificare- non resistit uentis talibus et cadendo fit uia uocibus
tempestatis. Validae autem pluuiae dictum arbitror "difficilis ad capiendum",
id est ad intellegendum. Vtpluat super terram ubi non est
uir. Subaudiendum est "quis praeparauit"? Per uirum autem legem
uidetur significare, quae data est ludaeis. Ergo super gentes intellegimus
imbrem euangelii. In deserto ubi non est homo (Iob 38,26): in
ipsis gentibus, ubi non erat aliqua auctoritas cognoscentis Deum. Vt
satiet inuium et inhabitabile et ut germinet herbae uiror: (Iob
38,27): multi filii desertae magis quam eius quae habet uirum (Is
54,1). In ómnibus autem his quattuor uersibus subaudiendum est: quis
38,28 Capítulo 38 143
¿quién dispuso? ¿Quién es el padre de la lluvia? Como el
esposo que envió a sus hijos a regar la tierra proclamando el
reino de los cielos. ¿Yquién engendró los terrones de rocío?
Los que acogieron con buen talante aquella predicación.
Habla de terrones de rocío como se habla de vasos de
vino, por haber sido fabricados para este menester. ¿De qué
seno sale el hielo? ¿Hay que considerar este hielo como
símbolo de algo positivo por su temple y su resistencia a
licuarse, de modo que se haya dicho: de qué seno sale el
hielo, igual que se dijo: y quién es el padre de la lluvia? ¿O
se toma el seno por un lugar íntimo y escondido, de modo
que la respuesta de su seno sale el hielo equivalga a la
expresión Dios les entregó a su reprobo sentir? ¿O acaso el
hielo sale del seno de aquel que, al aconsejar la impiedad de
la que está lleno a rebosar, hace que se enfríe y endurezca,
una vez que ha perdido el calor de la caridad? ¿Quién conoce
a éste como aquel que apostrofa a los porfiados y recalcitrantes
al Evangelio: Vosotros tenéis por padre al diablo? Y la
escarcha del cielo, ¿quién la engendró? La que desciende
como un río de agua. Lo que acabamos de decir del hielo lo
entiendo aplicable también a la escarcha. La adición en el
cielo no es superflua si se entiende aplicada a los gobernantes,
imitadores de los buenos mensajeros de la verdad que se
transfiguran en ministros de la justicia. Vinculado a esta
praeparauit? Quis est pluuiae (877) pater? Sicut sponsus, qui filios
suos misit praedicatione regni caelorum inrigare terram. Et quis est qui
peperit glebas roris? (Iob 38,28). Bene suscipientes illam praedicationem.
Sic enim ait "glebas roris" quomodo dicuntur uasa uini ad hoc
facta, ut uinum suscipiant. De cuius útero procedit glacies? (Iob
38,29). Vtrum glacies in bono accipienda est propter [610] stabilitatem
et a fluxu continentiam, ut ita dictum sit: de cuius útero procedit
glacies, quemadmodum illud: quis est pluuiae pater? (Iob 38,28). An
uterus pro secreto positus est, ut de eius útero procedat glacies (Iob
38,29), sicut dedit illos Deus in reprobum sensum? (cf. Rom 1,28).
An potius de illius útero procedit glacies, qui persuadendo inpietatem,
qua intrinsecus plenus est, facit frigescere et durescere amisso calore
caritatis? Quis enim hunc nouit, sicut ille, qui ait duris et resistentibus
i'uangelio: uox ex patre diabolo estis? (lo 8,44). Aut pruinam in
cáelo quis genuit? Quae descendit sicut aquae flumen (Iob
38,29.30): quod de glacie in ultimo sensimus, hoc et de pruína accipiendum
puto. Nec tamen frustra est additum "in cáelo", ut ex ipsis qui
praesunt intellegatur imitantibus sane bonos nuntios ueritatis, qui
transfigurant se sicut ministri iustitiae (cf. 2 Cor 11,15). Quo perti-