SAN AGUSTÍN - Alma de Cántaro

632 Concordancia de los evangelistas 3,25,85
de que forman parte los ocho pueden computarse, sin desentonar,
como un todo desde la parte, según la costumbre de
las Escrituras 164 .
85. Compárese también lo que dice el apóstol Pablo,
para ver si plantea alguna cuestión. Dice: Resucitó al tercer
día, según las Escrituras, y se aparecida Cefas. No dijo «se
apareció en primer lugar a Cefas», pues contradeciría a lo
que se lee en el evangelio que se apareció primero a las
mujeres. Luego -dice- a doce cualesquiera, en cualquier
hora, pero en el mismo día de la resurrección. Luego se
apareció a más de quinientos hermanos a la vez-, ya se
refiera a los que estaban congregados con los once con las
puertas cerradas por miedo a los judíos, y adonde entró
Jesús, después de salir Tomás, ya después de ocho días, a
cualquier momento, no hay contradicción alguna. Después
-dice- se apareció a Santiago: no debemos aceptar que
entonces le vio por primera vez Santiago, sino que se trata de
una manifestación particular a él. Finalmente a todos los
apóstoles: tampoco aquí debemos entender que se les apareció
por primera vez entonces, sino que ya convivían como
más íntimamente con él hasta el día de su ascensión. Al
último de todos -dice- se me apareció también a mí como
ralis saeculi, quia et illi primi decem dies, in quibus erant
illi octo dies, a parte totum possunt more Scripturarum non dissone
conputari.
85. Conferatur ergo et quod ait apostolus Paulus, utrum nihil
adferat quaestionis. Resurrexit, inquit, tertio die secun[391]dum
Scripturas et apparuit Cephae (1 Cor 15,4.5). Non dixit 'primo apparuit
Cephae' (cf. Le 24,34-36), nam esset contrarium, quod primo
mulieribus apparuisse in euangelio legitur (cf. Me 16,9; Mt 28,9.10).
Postea, inquit, duodecitn quibuslibet (1 Cor 15,5), qua hora libet, ipso
tamen resurrectionis die. Deinde apparuit plus quam quingentis fratribus
simul (1 Cor 15,6), siue isti cum illis undecim erant congregati
clausis ostiis propter metum Iudaeorum, unde cum exisset Thomas,
uenit ad eos lesus, siue post octo illos dies quando libet (cf. 20,19-26),
nihil habet aduersi. Postea, inquit, apparuit Iacobo, non tune autem
primum accipere debemus uisum esse Iacobo, qed aliqua propria manifestatione
singulariter. Deinde apostolis ómnibus (1 Cor 15,7), nec
illis tune primum, sed iam ut familiarius conuersaretur cum eis usque
ad diem ascensionis suae (cf. Act 9,3-9)- Nouissimo autem omnium,
164 Cf. nota complementaria 27: Sinécdoque.
3, 25, 86 Libro III 633
a un abortivo, pero esto ya desde el cielo, después de no
corto tiempo de su resurrección.
86. Veamos ya lo que habíamos diferido, es decir:
¿Qué cosa quería significaría cuando, al resucitar, les dio,
según Mateo y Marcos, este mandato: Os precederé a Galilea,
allí me veréis? Cosa que, si bien se cumplió, fue después
de mucho tiempo, no obstante que del modo de mandarlo
cabía suponer que -aunque sin prejuicio de la necesidad-
se debía hacer o sólo eso o eso lo primero. Sin duda,
puesto que las palabras no son del evangelista que relata que
así aconteció, sino del ángel por mandato divino y luego
personalmente del Señor; mejor, del evangelista que lo relata,
pero porque así lo dijo el ángel y el Señor, hay que
asumirlo como dicho proféticamente i«