REVISTA EJÉRCITO Nº 848 NOVIEMBRE 2011 - Portal de Cultura ...

está estructurado de tal forma que las demandas
de adquisición de imágenes que realizan los
usuarios militares se encaminen, para su programación
y coordinación, por vías separadas de las
que utilizan los usuarios civiles.
La integración de este nuevo sistema en el
CESAEROB ha requerido ampliar el edificio
existente y solicitar un aumento de la plantilla
actual de 30 efectivos, repartidos entre los tres
Ejércitos. Además, se hace necesario desarrollar
un sistema multimisión que permita, desde una
única herramienta, gestionar de manera unificada
las necesidades de imágenes de los usuarios,
tanto en Helios como en Pléiades o en cualquier
sistema futuro.
Un SatélitE RadaR ESPañol: PaZ
Las capacidades de obtención de imágenes
satelitales, con fines de seguridad y defensa, no
pueden estar completas si se dispone exclusivamente
de sensores ópticos. La meteorología es un
factor determinante que impide la adquisición de
tomas de vista, con este tipo de sensores, cuando
hay presencia de nubes. Esta limitación es especialmente
relevante en las zonas ecuatoriales. Por
ello es necesario disponer de un sistema espacial
de observación de la Tierra con tecnología radar,
capaz de proporcionar imágenes «todo tiempo»
que complementen las obtenidas en el espectro
visible.
En el año 2007 se puso en marcha el llamado
Programa Nacional de Observación de la
Tierra por satélite (PNOT), con la finalidad de
convertir a España en el primer país de Europa
en disponer de ambas tecnologías: óptica con
el satélite Ingenio y radar con el satélite Paz.
Se espera que este último esté ya en órbita en
2013, siendo su principal cliente el Ministerio
de Defensa y el CESAEROB el centro encargado
de la programación, producción, archivo y
distribución de las imágenes demandadas por
los usuarios militares.
HISDESAT será la empresa propietaria del sa
télite y la responsable de su mando y control,
mientras que EADS-CASA Espacio será la encargada
de su fabricación. El Ministerio de Defensa
aportará 135 de los 160 millones de euros necesarios
para su puesta en funcionamiento.
El satélite Ingenio, que incorporará sensores
ópticos, será financiado en su mayoría por el Mi-
Armamento y Material
nisterio de Industria, Turismo y Comercio, siendo
gestionado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico
Industrial (CDTI). Su puesta en órbita
se prevé para no antes de 2014 y sus fines estarán
orientados a usos civiles relacionados con
actuaciones medioambientales, usos del suelo,
cartografía, etc, aunque no se descarta su empleo
en misiones de seguridad y defensa.
No cabe duda que el PNOT va a significar un
paso decisivo para la industria espacial española
que redundará en la mejora de su capacidad
tecnológica, de la cual el Ministerio de Defensa
será uno de los grandes beneficiados.
Las imágenes radar proporcionadas por el
satélite Paz, supondrán un nuevo reto para el
personal experto en fotointerpretación destinado
en el CESAEROB debido a la complejidad que
conlleva su explotación. Ya se ha realizado algún
curso de formación y se deberán hacer más
si las condiciones económicas no lo impiden,
pero será la experiencia que vayan acumulando
los fotointérpretes con el trabajo diario, la que
permita extraer de estas imágenes el máximo de
información.
Como se puede deducir, durante los próximos
tres años el CESAEROB va a experimentar una
transformación sin parangón en sus quince años
de historia. Pasará de acoger un solo sistema de
observación por satélite, a ser capaz de explotar
tres diferentes que coexistirán durante algún tiempo:
Helios, Pléiades y Paz. Esto implicará, posiblemente,
transformar infraestructuras, reestructurar
su orgánica, aumentar su plantilla y, sobre todo,
va a exigir un esfuerzo de formación y especialización
de todos sus componentes. La tecnología,
por muy avanzada y compleja que sea, solo dará
frutos si detrás de ella se encuentra personal altamente
cualificado y motivado para pilotarla.
A la vista de lo expuesto, se puede concluir
que el CESAEROB es mucho más que un centro
singular. La participación de personal de los tres
Ejércitos, su dependencia operativa del CIFAS
y sobre todo la diversidad de usuarios que se
benefician de su trabajo, le confieren un carácter
conjunto que contrasta con su dependencia
orgánica. Su capacidad para operar, en un futuro
próximo, varios sistemas espaciales de observación
de la Tierra, va a colocar a nuestras Fuerzas
Armadas en una posición de privilegio en el
campo de la inteligencia de imágenes.n
REVISTA EJÉRCITO • N. 848 NOVIEMBRE • 2011 105