Brindis con Witold - Ministerio de Educación
Brindis con Witold - Ministerio de Educación
Brindis con Witold - Ministerio de Educación
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ESTUDIOS LITERARIOS<br />
Ninguno <strong>de</strong> los novelistas actuales que<br />
se <strong>con</strong>si<strong>de</strong>ran indiscutiblemente<br />
importantes, es sólo un novelista, sino<br />
que –sin <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> serlo– lleva <strong>de</strong>ntro a<strong>de</strong>más, un<br />
meollo <strong>de</strong> auténtica filosofía humana...” 1 “<br />
A pesar<br />
<strong>de</strong> que Juan Luis Alborg formuló su i<strong>de</strong>a hace<br />
casi medio siglo, ésta sigue siendo vigente incluso<br />
hoy en día.<br />
Cuando en 1942 Camilo José Cela –un escritor<br />
entonces <strong>de</strong>s<strong>con</strong>ocido– publica su obra primeriza<br />
titulada La familia <strong>de</strong> Pascual Duarte 2 ,en la<br />
narrativa española se inicia no sólo todo un proceso<br />
<strong>de</strong> renovación, sino a<strong>de</strong>más nace un nuevo<br />
fenómeno literario, –que se da principalmente<br />
en la década <strong>de</strong> los cuarenta y a principios <strong>de</strong> los<br />
cincuenta–, <strong>de</strong>nominado más tar<strong>de</strong> “el tremendismo”.<br />
La novela celiana señala un nuevo<br />
rumbo pronto seguido por otros autores, puesto<br />
que el nuevo camino representa una expresión<br />
literaria <strong>con</strong> la que éstos se i<strong>de</strong>ntifican plenamente.<br />
Los escritores que se incorporan al<br />
movimiento tremendista –<strong>de</strong>stacan entre ellos<br />
Carmen Laforet, Miguel Delibes, Ana María<br />
Matute y Darío Fernán<strong>de</strong>z-Flórez–, comparten<br />
<strong>con</strong> Cela el mismo supuesto i<strong>de</strong>ológico, y su<br />
obra –igual que la celiana– representa una evi<strong>de</strong>nte<br />
ruptura <strong>con</strong> la creación literaria anterior.<br />
El tremendismo se caracteriza por una agudizada<br />
inclinación a enfocar la cara oscura <strong>de</strong>l<br />
mundo, retratando los aspectos más bajos y<br />
repugnantes <strong>de</strong> la vida. Po<strong>de</strong>mos observar que<br />
las bases filosóficas <strong>de</strong>l tremendismo se apoyan<br />
en el pesimismo, en el negativismo e incluso en<br />
el nihilismo, ya que el clima social <strong>de</strong>l período<br />
<strong>de</strong> la postguerra era muy favorable para albergar<br />
semejante visión <strong>de</strong>l mundo. Se pue<strong>de</strong> hacer<br />
32 PARALELO50<br />
Las bases filosóficas y<br />
estéticas <strong>de</strong>l tremendismo<br />
[ Las bases filosóficas y estéticas <strong>de</strong>l tremendismo ]<br />
ATHENA ALCHAZIDU<br />
<strong>con</strong>star que el tremendismo supone una apertura<br />
<strong>de</strong> una nueva estética que se impone en la<br />
escena literaria española <strong>de</strong> la posguerra inmediata,<br />
no obstante es necesario subrayar que sus<br />
raíces son muy antiguas, pues po<strong>de</strong>mos en<strong>con</strong>trarlas<br />
ya en la picaresca. 3<br />
Con el surgimiento <strong>de</strong>l tremendismo están relacionadas<br />
dos preguntas elementales. ¿Por qué<br />
dicho fenómeno aparece en el período <strong>de</strong> la posguerra<br />
española? ¿Cuál fue el primer impulso que<br />
<strong>de</strong>senca<strong>de</strong>nó toda una serie <strong>de</strong> cambios en el pensamiento<br />
y en la percepción filosófica, cuyos ecos<br />
en el campo literario posteriormente culminaron<br />
<strong>con</strong> la visión tremendista <strong>de</strong>l mundo? Para po<strong>de</strong>r<br />
respon<strong>de</strong>r estas preguntas tenemos que volver<br />
hasta el principio <strong>de</strong>l siglo XX.<br />
Tras pasar por una época <strong>de</strong> euforia universal y<br />
una admiración por el progreso técnico, hecho<br />
que también tiene su reflejo correspondiente en<br />
la literatura –basta <strong>con</strong> mencionar el futurismo<br />
<strong>de</strong> Marinetti–, se presenta la <strong>de</strong>silusión y el <strong>de</strong>sengaño.<br />
Éste comienza a hacerse evi<strong>de</strong>nte ya en<br />
el tiempo <strong>de</strong> entreguerras, incluso antes; pues ya<br />
la primera década <strong>de</strong>l siglo XX fue testigo <strong>de</strong><br />
importantes cambios, fracasos auténticos <strong>de</strong> las<br />
ilusiones vinculadas al racionalismo científico,<br />
que había llegado a su auge en la segunda mitad<br />
<strong>de</strong>l siglo XIX. El avance tecnológico, que al<br />
principio provocaba mucha admiración, pronto<br />
<strong>de</strong>jó <strong>de</strong> ser percibido en su forma i<strong>de</strong>alizada<br />
–como prueba inequívoca <strong>de</strong> las capacida<strong>de</strong>s y<br />
<strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r humanos–, y empezó a ser visto como<br />
un factor limitador <strong>de</strong>l hombre.<br />
A finales <strong>de</strong> los años veinte España junto <strong>con</strong><br />
toda Europa, pasa por una profunda crisis gene-