Pares cum Paribus Nº 4: Índice - Facultad de Ciencias Sociales ...

granjearás un excelente tutor en esta ciudad, que podrá rescatarte de tantas
calamidades y sacarte de tan aguda pobreza. Y si dices que esto no lo puedes
realizar honestamente, debes saber que, aunque algo de deshonestidad tiene,
acarreará muchísimas ventajas, y verás que en realidad es casi siempre tanto el
provecho, que parecerá que a la muchacha la conviertes en honorable. ¿Qué
cosa hay, en efecto, que él no dará? ¿Qué no hará en beneficio tuyo? Y tus
familiares podrán ir a tu casa a compartir todos sus bienes. Además, también su
poder debe ser para ti motivo de urgencia; lo que tú misma generosamente no
ofrecieras, él mismo lo arrebataría por la fuerza, y no tendría nada que
agradecerte. Por todo esto, si decides valerte de mi consejo, no debes vacilar en
hacer entrega de Climestra a la pasión del muchacho.
270 Glauca.- Ya que me confié tu decisión, y con buenas razones me induces a
que la entregue, yo, con tal que Climestra primero así lo quiera, la pongo a
disposición de él, cosa que de ningún modo habría permitido, si no hubiera dado
fe a tus palabras, ni su poder pareciera amenazarme.
271 Calímaca.- Falta averiguar ahora, Glauca, si ella quiere dar su aprobación a
esto.
272 Glauca.- Pregúntale tú, Calímaca. - (Consigo.) Ahora, dado que es ventajoso
que en estas condiciones ponga a mi hija a disposición de Poliodoro, he decidido
hacerlo; es conveniente, en efecto, que también yo me acomode a las
circunstancias y me sume a la opinión de otras que anteponen el provecho a la
honestidad. Durante el tiempo en que, hasta ahora, he cultivado la honestidad y
he procurado que también la cultiven mis hijos, he pasado siempre la vida en la
mayor pobreza y con grandes molestias, y nunca he tenido en mi mesa un vino
que no estuviera pasado ni un pan que no fuera negro; ahora, por cierto -así lo
espero-, podré emborracharme exquisitamente con vino y hartarme con el
mejor pan, mientras apoyo a este Poliodoro para que consiga a mi hija; porque
ahora mi deseo es que ella se muestre favorable a Calímaca y esté dispuesta a
darle su amor a Poliodoro. Yo no podría tratar de convencerla de algo
deshonesto, ya que siempre, hasta esta edad, le he aconsejado preservar su
honor, aunque ahora la realidad me fuerza a cambiar de opinión.
273 Calímaca.- Voy a ir yo misma, entonces, donde Climestra, y conversaré la
cosa con ella.- ¡Eh, Climestra!
Htm diagramación, gráficos, Oscar Aguilera
F.
Chile
© 1997 Programa de Informática, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de