11.07.2015 Views

Pensamientos-sobre-el-papismo

Pensamientos-sobre-el-papismo

Pensamientos-sobre-el-papismo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

68procedemos á dirijir nuestros ruegos á algunos Santos cscojidos,invocándolos por sus nombres, para esto es necesarioque sepamos 1 'ecsactamente quienes son ; y, para sabertanto, debiamos haber conocido sus corazones durante suvida, 6, en caso de no haberlos conocido, debemos poderdivisar ahora lo que pasa en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o. Mas tanto lo unocomo lo otro supera nuestra int<strong>el</strong>ijencia. Podríamos errarfácilmente, orando á algunos difuntos que se tienen porSantos. No es difícil saber á quienes la iglesia titulaSantos ; pero es dable que los canonizados no sean siempr<strong>el</strong>os Santos verdaderos. Y, supuesto que pudiésemos saberque ciertos sujetos que un tiempo estaban en la tierra,estaban ahora en los ci<strong>el</strong>os, aun nos quedaría otra cosaque hacer, y esto es, que nuestra voz les alcanzase, porquees acierto que sería muy imítil hacer súplicas al que nolas podría oír. ¿Mas como haremos esto? Los Santosestán en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o, <strong>el</strong> pecador suplicante está en la tierra,y media mucha distancia entre <strong>el</strong>los. La voz de los pecadoresque están en la tierra no alcanza á los Santos d<strong>el</strong>ci<strong>el</strong>o. Si digo : "Pedro, ora por mí," ¿ como sabe él loque le digo ? Pedro no es omnipresente. Dirán que Diosle avisa de que le estoy orando. Pero ¿ de donde se tracla prueba de esto ? Y, dado que fuese así, ¿ qué nos serviría? Según esta idea, Dios avisa á Pedio de que ciertopecador de la ticira quiere que él, Pedro, pida á él. Dios,que le dé sigo. Todo esto es rodear mucho. El hombreharía mucho mejor en no molestar á Pedro, sino decir deana vez : "Dios, apiádate de mí, pecador."Mas aqu<strong>el</strong>los preguntan con ayre de confianza, si nopedimos á los Santos vivientes para que oren por nosotros.Así lo hacemos, porque estamos divinamente autorizadospara esto. Pero esto no es orar á <strong>el</strong>los. Grande es ladiferencia entre orar á un Santo que está en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o, ypedir á un compañero de nuestra peregrinación liácia labienaventuranza, que ore por nosotros al Dios d<strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!