30.04.2013 Views

Primavera con una esquina rota - Mario Benedetti

Primavera con una esquina rota - Mario Benedetti

Primavera con una esquina rota - Mario Benedetti

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

INTRAMUROS (El balneario)<br />

No sé por qué hoy estuve rememorando largamente<br />

los veranos en Solís Era lindo el ranchito y tan cerca de<br />

la playa A veces, cuando me pongo impaciente o rabioso,<br />

pienso en las d<strong>una</strong>s y me tranquilizo En aquellas<br />

temporaditas tan calmas, tan parecidas a la felicidad,<br />

¿quién iba a pensar que después vendría todo lo que<br />

vino? Recuerdo cuando subimos a la Sierra, y cuando<br />

nos en<strong>con</strong>tramos <strong>con</strong> Sonia y Ruben, y cuando alquilábamos<br />

los caballos vos te estabilizabas en el trote y no<br />

lograbas, pese a tus órdenes y a tus esfuerzos, que el pingo<br />

emprendiera el galope, y en <strong>con</strong>secuencia quedabas<br />

reventada Sin embargo, no sólo me acuerdo de esos detalles<br />

costeño-bucólicos; también tengo presente cierta<br />

sensación de incomodidad que no me dejaba disfrutar<br />

plenamente de aquel sobrio <strong>con</strong>fort de tres semanas ¿Te<br />

acordás de que lo hablamos <strong>una</strong>s cuantas veces, cuando<br />

el atardecer caía sobre el ranchito y la hora del ángelus<br />

nos ponía melancólicos y hasta un poco sombríos? Sí,<br />

nuestro <strong>con</strong>fort era terriblemente austero, nuestro descanso<br />

era baratísimo y nada ostentoso, y sin embargo<br />

pensábamos en los que no tenían nada, ni trabajo ni pan<br />

ni vivienda, ni mucho menos <strong>una</strong> hora especial para la<br />

melancolía porque su amargura era de tiempo completo<br />

Y así terminábamos en silencio, sin soluciones a la vista,<br />

pero sintiéndonos vagamente culpables Y, claro, a la<br />

mañana siguiente, cuando el aire fresco y salobre y el<br />

primer sol penetraban desde temprano en el ranchito,<br />

ante ese visto bueno de la naturaleza se nos iba la mufa<br />

y volvíamos a sentirnos plenos y optimistas y vos te dedicabas<br />

a juntar caracoles y yo a andar en bicicleta porque<br />

ya en aquellos años vos argumentabas que yo tenía cierta<br />

tendencia a la panza, y ya ves, han pasado unos cuan-<br />

88

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!