08.05.2013 Views

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

que empezar, aunque no por eso <strong>de</strong>jara <strong>de</strong> ser <strong>de</strong> vital interés. Ya me había traído a<br />

casa <strong>de</strong> una pieza y podría <strong>de</strong>cidir marcharse en cualquier momento. Debía<br />

conseguir que no <strong>de</strong>jara <strong>de</strong> hablar. A<strong>de</strong>más, este paréntesis, que era como estar en <strong>el</strong><br />

ci<strong>el</strong>o, no estaría totalmente completo sin <strong>el</strong> sonido <strong>de</strong> su voz—, ¿en qué has andado<br />

hasta hace tres días?<br />

Su rostro se tornó caut<strong>el</strong>oso al momento.<br />

—En nada que me entusiasmara excesivamente.<br />

—Claro que no —mascullé.<br />

—¿Por qué pones esa cara?<br />

—Bueno... —fruncí los labios, pensativa—, si, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> todo, sólo fueras un<br />

sueño, ésa sería exactamente la clase <strong>de</strong> respuesta que darías. Mi imaginación no da<br />

para mucho, está muy claro.<br />

Suspiró.<br />

—Si te lo cuento, ¿te creerás al fin que no estás viviendo una pesadilla?<br />

—¡Una pesadilla! —repetí con resentimiento. Él esperaba mi respuesta—. Quizá<br />

—dije <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> pensarlo un momento—, si me lo cuentas.<br />

—Estuve... cazando.<br />

—¿Eso es todo lo que eres capaz <strong>de</strong> hacer? —le critiqué—. Eso no prueba <strong>de</strong><br />

ninguna manera que esté <strong>de</strong>spierta.<br />

Vaciló y <strong>de</strong>spués habló lentamente, <strong>el</strong>igiendo las palabras con cuidado.<br />

—No estuve <strong>de</strong> caza para alimentarme. En realidad, ponía a prueba mi<br />

habilidad... en <strong>el</strong> rastreo. Y no soy nada bueno.<br />

—¿Y qué fue lo que estuviste rastreando? —le pregunté, intrigada.<br />

—Nada <strong>de</strong> importancia —sus ojos no parecían estar en consonancia con su<br />

expresión; parecía enfadado e incómodo.<br />

—No te entiendo.<br />

Dudó; su rostro se <strong>de</strong>batía, brillando bajo la extraña luz ver<strong>de</strong> d<strong>el</strong> r<strong>el</strong>oj.<br />

—Yo... —inspiró hondo—. Te <strong>de</strong>bo una disculpa. No, sin duda, te <strong>de</strong>bo mucho<br />

más, muchísimo más que eso, pero has <strong>de</strong> saber que yo no tenía ni i<strong>de</strong>a... —sus<br />

palabras empezaron a fluir con mucha rapi<strong>de</strong>z, d<strong>el</strong> modo que yo recordaba que<br />

hablaba cuando se ponía nervioso, y tuve que concentrarme para captarlas todas—.<br />

No me di cuenta d<strong>el</strong> <strong>de</strong>sastre que <strong>de</strong>jaba a mis espaldas. Pensé que te <strong>de</strong>jaba a salvo.<br />

Totalmente a salvo. No tenía ni i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que volvería Victoria... —sus labios se<br />

contrajeron al pronunciar ese nombre—. Debo admitir que presté más atención a los<br />

pensamientos <strong>de</strong> James que a los <strong>de</strong> <strong>el</strong>la cuando la vi aqu<strong>el</strong>la vez y, por consiguiente,<br />

fui incapaz <strong>de</strong> prever esa clase <strong>de</strong> reacción por su parte y <strong>de</strong> <strong>de</strong>scubrir que <strong>el</strong>la tenía<br />

un lazo tan fuerte con él. Creo que me he dado cuenta ahora <strong>de</strong> que Victoria confiaba<br />

tanto en él que jamás pensó que pudiera sucumbir, ni se le pasó por la imaginación.<br />

Quizá fue ese exceso <strong>de</strong> confianza <strong>el</strong> que nubló sus sentimientos por él y lo que me<br />

impidió darme cuenta <strong>de</strong> la profundidad d<strong>el</strong> lazo que los unía.<br />

»Pero, <strong>de</strong> cualquier modo, no tengo excusa alguna por haber permitido que te<br />

enfrentaras sola a todo eso. Cuando oí lo que le contaste a Alice, e incluso lo que <strong>el</strong>la<br />

vio por sí misma, cuando me di cuenta <strong>de</strong> que habías tenido que poner tu vida en<br />

- 301 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!