08.05.2013 Views

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

Leer online el libro de luna nueva - Edward y Bella

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ventanillas d<strong>el</strong> coche. El camino seguía ad<strong>el</strong>ante. Comencé a ir más <strong>de</strong>prisa, ya que<br />

me estaba poniendo nerviosa. ¿Cuánto tiempo llevaba conduciendo? ¿No <strong>de</strong>bería<br />

haber llegado ya a la casa? El sen<strong>de</strong>ro estaba tan invadido por la espesura que no me<br />

parecía familiar.<br />

¿Qué pasaría si no lograba encontrarlo? Me eché a temblar. ¿Y qué ocurriría si<br />

no quedaba ninguna prueba tangible en absoluto...?<br />

Entonces apareció <strong>el</strong> hueco entre los árboles que yo estaba buscando, sólo que<br />

no se percibía con tanta facilidad como antes. La vegetación en Forks no tardaba<br />

mucho en reclamar cualquier terreno que se quedara baldío. Los altos h<strong>el</strong>echos<br />

habían invadido <strong>el</strong> prado que ro<strong>de</strong>aba la casa, apretándose en torno a los troncos <strong>de</strong><br />

los cedros, llegando incluso al amplio porche. Era como si <strong>el</strong> césped hubiera sido<br />

inundado, hasta la altura <strong>de</strong> la cintura, por ver<strong>de</strong>s olas como plumas.<br />

La casa estaba allí, pero no era la misma. Aunque no creía que nada hubiera<br />

cambiado en <strong>el</strong> exterior, <strong>el</strong> vacío gritaba <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las ventanas cerradas. Resultaba<br />

esp<strong>el</strong>uznante. Por primera vez <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que había visto aqu<strong>el</strong>la hermosa casa, me<br />

pareció que era una guarida apropiada para vampiros.<br />

Frené en seco mientras miraba alre<strong>de</strong>dor. Tuve miedo <strong>de</strong> continuar.<br />

Pero no ocurrió nada. No se oía ninguna voz en mi cabeza...<br />

... <strong>de</strong> modo que <strong>de</strong>jé <strong>el</strong> motor en marcha y salté al mar <strong>de</strong> h<strong>el</strong>echos. Quizás, si<br />

avanzaba hacia la casa, como había ocurrido <strong>el</strong> viernes por la noche...<br />

Me acerqué lentamente hacia la fachada vacía y <strong>de</strong>snuda mientras sentía <strong>el</strong><br />

reconfortante rugido d<strong>el</strong> motor <strong>de</strong> mi coche a mi espalda. Me paré al llegar a las<br />

escaleras d<strong>el</strong> porche, porque allí no había nada. Ni <strong>el</strong> más ligero testimonio <strong>de</strong> su<br />

presencia... <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong> él. La casa estaba allá, como un cuerpo sólido, pero eso<br />

no significaba nada. Su realidad concreta no llenaría <strong>el</strong> vacío <strong>de</strong> mis pesadillas.<br />

Me quedé allí, a unos pasos <strong>de</strong> la casa. No quería mirar por las ventanas. No<br />

estaba segura <strong>de</strong> qué sería más duro <strong>de</strong> ver. Si las habitaciones estuvieran vacías,<br />

sonando a eco <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>el</strong> su<strong>el</strong>o hasta <strong>el</strong> techo, seguramente me resultaría doloroso.<br />

Como ocurrió en <strong>el</strong> funeral <strong>de</strong> la abu<strong>el</strong>ita, cuando mi madre insistió en que no<br />

entrara a verla y permaneciera fuera. Me dijo que no necesitaba verla en ese estado,<br />

que sería mejor recordarla viva y no <strong>de</strong> esa manera.<br />

Pero ¿no sería aún peor que no hubiera ningún cambio? ¿Que los sofás se<br />

encontraran colocados exactamente igual que la última vez, las pinturas en su sitio, y<br />

lo más horrible, <strong>el</strong> piano encima <strong>de</strong> la pequeña tarima? Eso sería casi tan malo como<br />

que la casa entera <strong>de</strong>sapareciera <strong>de</strong> un golpe. La <strong>de</strong>mostración clara <strong>de</strong> que no había<br />

ninguna posesión física que los atara <strong>de</strong> ningún modo. Que todo quedaba, intacto y<br />

olvidado, tras su paso.<br />

Al igual que yo.<br />

Le volví la espalda a ese enorme vacío y me apresuré hacia mi coche. Iba casi<br />

corriendo. Ansiaba alejarme, volver al mundo humano. Me sentía horriblemente<br />

vacía y quería ver a Jacob. Quizás estaba <strong>de</strong>sarrollando una <strong>nueva</strong> clase <strong>de</strong><br />

enfermedad, otro tipo <strong>de</strong> adicción, como lo había sido <strong>el</strong> aturdimiento antes, pero eso<br />

no me preocupaba. Conduje <strong>el</strong> coche lo más rápidamente que pu<strong>de</strong> hasta salir<br />

- 96 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!