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manantiales granada_dos.qxp 08/05/2006 15:26 PÆgina 224
GUIA MANANTIALES GRANADA
una cota entre 1000 y 1150 m respectivamente,
son más caudalosos y vierten sus
aguas directamente al cauce, aunque en
parte son captadas para abastecimiento urbano
y uso agrícola.
En el mismo sector, más al este, tiene lugar
el nacimiento del río Beas, afluente del
Darro, que, aunque menos caudaloso, comparte
determinadas singularidades de carácter
geológico e hidrogeológico.
El acceso hasta el paraje del nacimiento del
río Darro se realiza a través de la autovía A-
92, desde Granada hacia Guadix, tomando el
desvío de Huétor Santillán. Un vez en el núcleo
se toma un camino que va paralelo al río
y pasa debajo del viaducto; finalmente, el camino
se corta con una cadena y hay que continuar
a pie durante unos dos kilómetros.
Las aguas del río Darro, son captadas para
abastecimiento urbano de Huétor Santillán,
y para uso agrícola, a excepción del
manantial de la Teja que presenta en su entorno
un área recreativa.
Referencias históricas
La historia conocida sobre el río Darro se
relaciona con la historia minera de la época
romana. El nombre del río Darro, de origen
romano, ya hace mención a su contenido en
oro (Dauro = que da oro). Desde esta época,
e incluso más antiguo, en el río se obtenía
oro mediante la utilización de batea,
sobre todo en el tramo que discurre entre la
cortijada de Jesús del Valle y Plaza Nueva,
dentro de la propia ciudad de Granada y a
los pies de la Alhambra. Esta actividad se
ha mantenido hasta entrado el siglo XX, con
momentos de auge y decadencia.
Además, otro de los principales aprovechamientos
del Darro, junto con el río Genil y la
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❖ Mina de Lancha de Cenes.
Los romanos lo bautizaron
como Dauro, El que da oro.
La recogida del oro
mediante batea en el río
Darro se ha realizado hasta
los inicios del siglo XX
Fuente de Alfacar, ha sido el abastecimiento
de la ciudad de Granada. Continúa L. Yagüe en
su obra “Análisis de las aguas de Granada y
sus contornos e indicaciones de las virtudes
medicinales que tienen”: “Del Darro se derivan
dos acequias, subdividiéndose después
en otras dos cada una de ellas, llegando el
agua por cuatro acequias distintas a la Ciudad.
La primera, o sea la acequia Real, se divide en
la del Generalife, llamada con razón el Tercio,
y en la Real de la Alhambra; y la segunda, o
sea la acequia de la Ciudad, se divide a su vez
en la de San Juan, que sigue su curso a la derecha
del río para penetrar por la cuesta del
Chapiz, y la de Santa Ana, que pasando al lado
izquierdo por el sitio denominado molino de
la Higuera, corre por debajo de las fuentes de
la Salud, Agrilla y Avellano, penetrando después
en la Ciudad por la falda de la Alhambra
al barrio de donde toma su nombre”.
Otros vestigios etnográficos relacionados
con la explotación para uso agrícola, se sitúan
en las planicies de la ribera del río.
Son las acequias que eran recorridas por
estas aguas para regar las huertas.
En Lancha de Cenes, muy próximo al núcleo
de Granada, en el valle del río Genil,
existía una mina de oro a cielo abierto. Su
origen fue romano y el método de explotación
fue el “Ruina Montium”, que consistía en derruir
grandes masas de tierra mediante la inyección
de agua a través de galerías, previamente
construidas, originando grandes
desprendimientos. En la actualidad en la zona
se pueden reconocer huellas de estos
desprendimientos, así como restos de estas
antiguas galerías. Uno de los restos más singulares
es el canal romano, que consistía en
un canal, derivación del río Beas, afluente
del río Darro, de unos 10 km de trazado que
conducía las aguas directamente a la mina
de oro como suministro de agua empleada
en los lavaderos de las arenas auríferas. Tanto
el canal como otras infraestructuras asociadas
a las minas fueron reutilizadas en la
época de los árabes. No obstante, para las
explotaciones retomadas por los franceses
en el siglo XIX tuvieron que realizarse nuevas
construcciones dado el mal estado en el que
se encontraban.
Contexto hidrogeológico
El nacimiento del río Darro, se sitúa en la
unidad de Blanquizares del Complejo Alpujárride
de las Zonas Internas de la Cordillera
Bética, y conforma una estructura
compleja en la que se involucran varias
unidades tectónicas. La unidad de Blanquizares
consta de un tramo inferior de filitas,
esquistos y cuarcitas y un tramo su-
Nacimiento de río Darro
❖ Restos del patrimonio minero – industrial
próximos a las explotaciones.
❖ Canal de los Franceses.
perior de calizas, dolomías y mármoles,
muy fracturados. A lo largo del cauce, el
río atraviesa otros materiales que afloran
en ventanas tectónicas, como las formaciones
carbonatadas de las unidades del
Subbético Interno (Zonas Externas) y, finalmente,
los materiales detríticos, conglomerados
y arenas, del relleno de la Depresión
de Granada.
La unidad tectónica sobre la que nace el
río Darro está incluida en el acuífero de La
Peza, del cual hemos hablado en capítulos
anteriores. Los materiales permeables corresponden
a las formaciones carbonatadas,
que limitan al norte y al sureste con materiales
impermeables, y al este y oeste con los
materiales de permeabilidad media de las depresiones
de Granada y de Guadix – Baza.
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