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Para Blanca Coaquira (Donde quiera esté su reino) - Tres Tribus Cine

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Es posible que el juez corriera la voz. Lo cierto es que empezamos a<br />

recibir visitas y tuvimos que mudarnos a instalaciones más amplias<br />

y seguras. Contratamos una secretaria para que se encargara de<br />

la agenda y acomodara discretamente a los visitantes, evitando<br />

incómodos encuentros.<br />

Hubo quienes pidieron que les tomásemos fotos por anticipado<br />

para garantizar credibilidad entre los lectores o para obtener un<br />

buen ángulo de <strong>su</strong>s rostros. Destinamos las fotografías a casos<br />

especiales y, en general, continuamos fieles al dibujo, sólo que<br />

ahora teníamos además de artistas plásticos, maquilladores para<br />

las personalidades exigentes, actores de teatro, utileros y extras<br />

capaces de montar escenografías y escenas que, de acuerdo a la<br />

circunstancia, requeríamos. De un periódico, pasé a dirigir una<br />

lucrativa industria. Nuestro tiraje rompió record y empezaron los<br />

encargos del exterior.<br />

Si dijese que nuestros métodos forjaron un mundo mejor,<br />

expresaría una verdad a medias. Ciertamente, disipamos algunas<br />

rencillas, contribuimos a causas nobles y el optimismo se expandió<br />

por la población, incidiendo positivamente en otros aspectos de la<br />

sociedad. Sin embargo, las decisiones de los poderes públicos se<br />

tornaron simplonas y halagüeñas, óptimas a corto plazo, alocadas<br />

en el largo. Se desechaba con facilidad las advertencias de analistas<br />

serios y estrategas; se asignaba un valor desmedido a aquellos<br />

fallos espontáneos que contentaban a todos…<br />

Meditaba esto mismo una fría madrugada de diciembre cuando,<br />

súbitamente, un fardo de periódicos me cayó en la cabeza,<br />

dejándome atontado. El vendedor se disculpó en nombre del<br />

repartidor: éste se hace al capo, pero en verdad no tiene puntería.<br />

Nunca le achunta. Cuando levantó los periódicos del piso, me di<br />

cuenta de que se trataba de la nueva entrega de La Nítida Nota.<br />

Aunque me tiene sin cuidado la competencia, no pude <strong>su</strong>straerme a<br />

la curiosidad y compré uno de <strong>su</strong>s vistosos y coloridos ejemplares.<br />

Distinguí algunas fotos, pero la mayor parte de <strong>su</strong>s optimistas<br />

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