FINAL-VISIÒN_EDUCATIVA_17
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educadores preocupados por sus discípulos son, justamente, algunas expresiones<br />
de Generatividad: son un “desvío energético hacia la productividad y la creatividad<br />
al servicio de las generaciones” (Erikson, 1985: 68). El radio de relaciones<br />
significativas incluye ahora el trabajo dividido y la compartición de un hogar.<br />
Sin embargo, el tener hijos no es sinónimo de ser productivo. Por ello,<br />
Erikson hacía énfasis que, los seres humanos, como seres que enseñan y<br />
aprenden, pueden ser “generativos” o productivos, al cuidar de sus ideas y de los<br />
logros que se han forjado. Es importante que las personas en proceso de<br />
envejecer continúen siendo creativas; continúen formulándose ideales y<br />
manteniendo sus principios. Es totalmente necesario que un adulto mayor<br />
conserve un amplio radio de intereses, y se experimente a sí mismo como un ente<br />
productivo, porque de lo contrario, puede caer en el aburrimiento, e incluso en el<br />
estancamiento (Frager y Fadiman, 2010).<br />
Los adultos mayores deben procurar la continuidad de sus conocimientos, y<br />
deben también participar en las instituciones sociales, productivamente, de modo<br />
que respalden a la sociedad a través de sus aportaciones. Hay que mantener<br />
vivos los conocimientos, las destrezas, las ideas, las convicciones, los objetivos.<br />
b) Etapa VIII. Integridad del yo versus Desesperación (65 años, hasta la<br />
muerte)<br />
El fruto de las siete etapas anteriores del desarrollo humano madura en la octava:<br />
la Integridad del yo. Sólo arribará a ella quien se haya experimentado como<br />
cuidador de cosas y de personas; quien haya sido generador de seres humanos o<br />
productos o ideas y haya experimentado triunfos y frustraciones concatenados con<br />
todo esto.<br />
La Integridad se alcanza cuando el individuo ha desarrollado en grado<br />
suficiente todas las cualidades yoicas, de acuerdo a su ubicación socio-culturalhistórica;<br />
debe haber estado en contacto con lo producido en la política, la<br />
economía, las artes, las ciencias, la religión, la tecnología, correspondientes a tal<br />
ubicación (Erikson, 1993).<br />
La Integridad del yo requiere integración emocional que permite combinar el<br />
pasado con las responsabilidades, obligaciones y funciones presentes: es la<br />
aceptación del hecho de que uno es el responsable de la propia vida. Surge un<br />
sentimiento de camaradería, aún con personas de épocas lejanas, que han sido<br />
creadores de productos, sistemas, y lenguajes que manifiestan y transmiten la<br />
dignidad de lo humano, e incluso el amor. Es la conciencia de que todos esos<br />
estilos de vida no pueden ser absolutos, sino relativos, pero han investido de<br />
significado el esfuerzo humano. Por eso, quien ha alcanzado la Integridad está<br />
dispuesto a defender su propio estilo de vida: comparte la integridad humana<br />
correspondiente a su propio ciclo vital combinado con el segmento de la historia<br />
correspondiente (Erikson, 1968).<br />
La vejez y la senilidad tendrían que ser plenas y significativas cuando el<br />
individuo ha alcanzado la Integridad. Si así ha ocurrido, se registrará una<br />
preocupación desinteresada aunque activa por la vida: la sabiduría. Hay una<br />
REVISTA VISIÖN <strong>EDUCATIVA</strong> IUNAES<br />
Vol. 8, No. <strong>17</strong> Abril de 2014 a Septiembre de 2014<br />
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