TREINTA AÑOS DE PARÍSsus cuatro hijos, cuatro solterones, áquienes designaban por la profesión quecada cual había ejercido ó ejercían todavía:el Alcalde, el Cónsul, el Notario, elAbogado.Muerto el padre, y casada la únicahermana que habían tenido, los cuatrose habían agrupadoen torno de laanciana, á quiensacrificaban susambiciones y sus'gustos, y unidosen el exclusivoamor de aquellaá quien llamabansu «querida mamá»con respetuosay tierna entonación.¡Buenas gentes! ¡Bendita casa! ¡Cuántasveces, en invierno, h.e ido á buscarospara desquitarme de aquella vida de Parísy sus fiebres, y curarme con las saludablesemanaciones de vuestras colinasprovenzales! Llegaba sin avisar, segurode ser bien acogido, anunciado por elguirigay de los pavos reales, de los pe-CARTAS DESDE MI MOLINO 175rros de caza, Milagro, Milagrillo yTambor, que daban saltos y brincos alrededordel coche, mientras se agitabala cofia arlequinesca de la criada, quecorría á anunciar mi llegada á sus amos,y mientras la queridamamá, me estrechabacontra su mantón decuadros grises, como sifuera yo uno de sushijos.Cinco minutos de tumulto,y una vez terminados-los abrazos yllevada la maleta á micuarto, toda la casa volvíaá quedar en silencioy en calma. Yo llamaba,silbando, al viejoMilagro, un perrito falderoque habían encontradoen el mar, entre los restos de unnaufragio, unos pescadores de Faraman,y subía á mi molino.El tal molino era una ruina; un restoque se derrumbaba, de piedra, de hierroy de tablas viejas que hacía muchos años
I76 TREINTA AÑOS DE PARÍSque no andaba y que yacía con las aspasrotas, inútil como un poeta, mientras quetodo alrededor, á su lado, prosperabay viraba la molinería con toda la fuerzade sus aspas.Existen extrañas afinidades entre nosotrosy las cosas. Desde el primer díaaquel abandonado me era querido; loquería por su abandono precisamente,por su camino escondido entre las hier- "bas, por sus hierbajos grises y perfumados,con los cuales hacía el padre Gauchersu elíxir, por su plataforma estéril,donde se estaba muy bien acurrucadopara resguardarse del viento, mientrasque saltaba un conejo ó mientras unalarga culebra, arrastrándose con sornamaliciosa, venía á cazar los insectos quemenudeaban entre los escombros. Consus crujidos de edificio viejo sacudidopor la tramontana, el ruido de aparejode sus aspas rotas: el molino revolvía enmi pobre cabeza, inquieta y aficionada áviajar con el pensamiento, recuerdos deexpediciones por mar, paradas en los farosy en apartadas islas, y la temblorosaola de alrededor completaba la ilusión.CARTAS DESDE MI MOLINO 177Yo no sé de dónde me ha venido á míesta afición á lo desierto y á lo bravioque tengo desde la niñez, y que parecesentar tan mal á mi exuberante naturaleza;á menos que no sea á un tiempomismo la necesidad física de reparar conun a}-uno de palabras, con una abstinenciade gestos y de voces, el horrible gastode todo nuestro ser que hacemos losmeridionales. En todo caso, debo muchoá estos espirituales retiros; y ningunome ha sido más saludable que aquel viejomolino de Provenza. Hasta tuve enun tiempo ganas de comprarlo; y se podría encontrar en casa del notario deFontvielle una escritura de venta que sequedó en proyecto, pero de la cual meserví para escribir el prólogo de milibro.Mi molino no me ha pertenecido nunca.Lo cual no me impedía pasar allímuchos días de ensueños, de recuerdos,hasta la hora en que el sol de inviernobajaba por entre las pequeñas colinas,cuyas quebraduras llenaba como de unmetal fundido, como de un chorro deoro muy humeante. Entonces, al llama-
- Page 2 and 3:
DAUDET.] J NT A ANc):.>EPARIS
- Page 4 and 5:
TREINTA AÑOS DE PARÍSHimNAttt^ftf
- Page 6 and 7:
COLECCIÓNJUBERAALFONSO DAUDETmili
- Page 8 and 9:
donde era pasante de escuela, para
- Page 10 and 11:
de las diligencias. Aquel desayuno
- Page 12 and 13:
IOTREINTA AÑOS DE PARISza y de los
- Page 14 and 15:
14 TREINTA ANOS DE PARÍSlectura de
- Page 16 and 17:
l8TREINTA AÑOS DE PARÍSparticular
- Page 18 and 19:
2 2 TREINTA AÑOS DE PARÍSgulloso
- Page 20 and 21:
24 TREINTA AÑOS DE PARÍScía de m
- Page 22 and 23:
28 TREINTA AÑOS DE PARÍSción en
- Page 24 and 25:
32 TREINTA ANOS DE PARÍSParís. ¿
- Page 26 and 27:
—¡Pues bien! le daré á usted,
- Page 28 and 29:
40 TREINTA AÑOS DE PARÍSel Duque
- Page 30 and 31:
44 TREINTA AÑOS DE PARÍS¡Qué le
- Page 32 and 33:
TREINTA AÑOS DE PARÍSmedio de uno
- Page 34 and 35:
50 TREINTA ANOS DE PARÍSllevaba en
- Page 36 and 37:
encantadora actriz!... Ahora todo e
- Page 38 and 39:
urla! De pronto se oyen dos sonoras
- Page 40 and 41:
TREINTA AÑOS DE PARÍSras por medi
- Page 42 and 43:
MI PRI..ERFRACse reía como una loc
- Page 44 and 45:
a mi pluma, hojas que tiraba yo fur
- Page 46 and 47:
lamos de periódicos, teatros y bou
- Page 48 and 49: á las altas horas de la madrugada,
- Page 50 and 51: franqueando afios , vacíos y lagun
- Page 52 and 53: TREINTA AÑOS DE PARIScomedimiento,
- Page 54 and 55: oso presidio, más que la del cura,
- Page 56 and 57: LOS SALONES LITERARIOS (i)No creo q
- Page 58 and 59: tLOS SALONES LITERARIOSrante miles
- Page 60 and 61: del Bajo Imperio. Poetas: Octavio L
- Page 62 and 63: Todo el citado personal, un tanto h
- Page 64 and 65: iosa, muy curiosa y muy simpática
- Page 66 and 67: 114 TREINTA AÑOS DE PARÍSobstruye
- Page 68 and 69: Andaba largo rato por los muelles a
- Page 70 and 71: condenado después á. no sé qué
- Page 72 and 73: lio con el sombrero redondo y la bl
- Page 74 and 75: sus esfuerzos y la de manera cómo
- Page 76 and 77: ^mr^trsombras tristes como las que
- Page 78 and 79: cipadamente, con esa prudencia prop
- Page 80 and 81: Buisson se envolvió en su dignidad
- Page 82 and 83: 144 TREINTA AÑOS DE PARÍS
- Page 84 and 85: concierto fueron cerradas por haber
- Page 86 and 87: das furiosas de ojos negros, gritos
- Page 88 and 89: olas, se sacudía la blanca espuma
- Page 90 and 91: ía de una dama llamada Florencia,
- Page 92 and 93: panteras, en los dromedarios, en to
- Page 94 and 95: TREINTA AÑOS DE PARÍScon, había
- Page 96 and 97: *m170 TREINTA AÑOS DE PARÍStoches
- Page 100 and 101: R - • / .111'CARTAS DESDE MI MOLI
- Page 102 and 103: ción de cuentos de leyendas, todos
- Page 104 and 105: o,;/tos por un telón de árboles p
- Page 106 and 107: 190 TREINTA AÑOS DE PARÍSde aquel
- Page 108 and 109: ancio, lo mismo que las otras obras
- Page 110 and 111: TREINTA AÑOS DE PARÍSechaba de me
- Page 112 and 113: a, que el retintín de una campanil
- Page 114 and 115: TREINTA AÑOS DE PARÍSeos deseaban
- Page 116 and 117: A pesar de la emoción, á pesar de
- Page 118 and 119: tra la sencillez de las costumbres
- Page 120 and 121: no era la de un cualquiera, para ac
- Page 122 and 123: TREINTA AÑOS DE PARIScombatientes
- Page 124 and 125: maba lo que escribía con el nombre
- Page 126 and 127: ENRIQUEROCHEFORTdavía usa ahora; a
- Page 128 and 129: pricho se convertía en manía, en
- Page 130 and 131: traje de sacamuelas, con un águila
- Page 132 and 133: coloradota y afeitada, nariz romana
- Page 134 and 135: gua, de apariencia muy burguesa, en
- Page 136 and 137: 244 TREINTA AÑOS DE PARÍScon algu
- Page 138 and 139: cáteles... sí, Las uvas moscatele
- Page 140 and 141: nos, ventorrillos y tabernas, elís
- Page 142 and 143: algunas noches para ir á verlo al
- Page 144 and 145: 260 TREINTA AÑOS DE PARÍSCÓMO AC
- Page 146 and 147: chacho simpático, siempre con su b
- Page 148 and 149:
TREINTA AÑOS DE PARÍSCÓMO ACABÓ
- Page 150 and 151:
qué despertar más amargo en el de
- Page 152 and 153:
si no tuviese dientes: una boca de
- Page 154 and 155:
dos que volvían á su memoria, exc
- Page 156 and 157:
al gobernador de Argel, á quien co
- Page 158 and 159:
mi mesa, había una de un médico d
- Page 160 and 161:
vial, el Loira y el puerto de Saint
- Page 162 and 163:
ventorrillos de las orillas del lag
- Page 164 and 165:
TT!rosa muerte. La madre, á quien
- Page 166 and 167:
por el techo arañando las tejas, u
- Page 168 and 169:
LA ISLA DE LOS GORRIOxNES(ENCUENTRO
- Page 170 and 171:
312 TREINTA AÑOS DE PARÍSLa barba
- Page 172 and 173:
co también. Un cuadro de Nittis. E
- Page 174 and 175:
medorcillo empapelado al estilo bur
- Page 176 and 177:
no siempre variado de Todo-París,
- Page 178 and 179:
el castillo, los bosques y las casc
- Page 180 and 181:
jando. Un poco de latón, un poco d
- Page 182 and 183:
Esa costumbre mía de que acabo deh
- Page 184 and 185:
personajes. La entrada y salida de
- Page 186 and 187:
342 TREINTA AÑOS DE PARISlir de su
- Page 188 and 189:
TOURGUENEFFI!Esto era hace diez ó
- Page 190 and 191:
naturaleza, y los que la aman no de
- Page 192 and 193:
es de letras, en general, la abomin
- Page 194 and 195:
lia regia mansión almenada, toda l
- Page 196 and 197:
- ^ T ^ I ^ i r u n a c o s a : el
- Page 198 and 199:
Aflores'Siempre estaba la casa llen
- Page 200 and 201:
me trata cual no digan dueñas. Com