NEUROLOCíA. VOLUMEN 5, NÚMERO <strong>10</strong>, DICIEMBRE <strong>1990</strong>Se trata de 19 varones y 17 niñas, que fueron vistos porprimera vez en nuestro Servicio cuando contaban con edadesque iban desde recién nacido hasta los 12 años. Comoes sabido, es condición fundamental el que el nevus flamrneusse extienda por territorio facial correspondiente aprimera rama trigeminal. Además puede extenderse porcualquier otra zona facial y/o corporal, pero puede quedarlimitada al territorio del nervio oftálmico en su totalidado a una pequeña porción del mismo. En nuestra serie,el 50 % presentaba el nevus solamente en lado izquierdo,el 22) % solamente en lado derecho y en el 27/ % enambos lados. No encontramos diferencia de afección clínica(retraso psíquico, severidad de las crisis, presentacióny severidad de glaucoma, etc.) entre los casos con afecciónuni y bilateral. El 75 "/o de los pacientes presentaroncrisis epilépticas, la mayoría de las veces de tipo focal, siendo<strong>15</strong>J meses la edad media de comienzo. Aproximadamenteotro 75 "/o de los pacientes presentan retraso psíquicosi bien la mayoría del 25 % de los casos cons¡deradoscomo normales tienen un nivel intelectual nlímite,.Más del 50 % de los sujetos precisaron intervención quirúrgicasobre el ojo afecto de glaucoma, que podía ser bilateralcuando el angioma también lo era. Otro porcentaieimportante de casos presentaban el trastorno en su formamenos severa. Tanto la extensión como la densidadde las calcificaciones y la estrechez de las arterias en elhemisferio afectado tienen carácter progresivo. Las calcificaciones intracraneales típicas de este trastorno, que seven en las placas simples y en la TC, no son parámetrosuficiente para hacer el diagnóstico. Sin angioma facial nohay síndrome de Sturge-Weber. La presencia de un síndromede Klippel-Trenaunay en sujetos con síndrome deSturge-Weber es alta.El valor de la RM en el estud¡o de la epilepsia parcialsevera con TC craneal normalA. López de Munain, J.B. Espinal, B. lndakoetxea,D. Atorrasagasti y J.F. Martí-MassóSección de Neurología. Hospital Nuestra Señora de Aránzazu.San Sebastián.Las epilepsias parciales, consideradas como las formasmás f recuentes de epilepsia, son en ocasiones las más resistentesa la terapia anticomicial, por tanto susceptiblesa tratamiento quirúrgico. Para ello es necesario demostrarcon claridad la existencia de un foco de descarga que seaaccesible a las técnicas neuroquirúrgicas. La práctica seriadade TC puede demostrar la existencia de lesiones inclusotumorales en pacientes cuya evaluación inicial fuenormal. Con objeto de evaluar la existencia de lesionessuscept¡bles de ser abordadas quirúrgicamente y su correlaciónclínico-topográfica, hemos estudiado medianteRM craneal un grupo de pacientes con epilepsia parcialrebelde a los tratamientos con TC craneal normal. Los pacientesse seleccionaron de acuerdo con los siguientes criterios:a) epilepsia parcial rebelde a los anticonvulsionanteshabituales, entendiendo como rebelde la presencia deal menos 1 crisis mensual a pesar de una terapia con almenos 2 fármacos anticonvulsionantes o con 1 fármacoy evidencia de no superior respuesta a politerapia en elpasado; b) al menos una TC craneal con contraste/ normalen los 2 últimos años previos a la RM o con controlescanográfico posterior a la RM si había transcurrido mástiempo, y c) presencia de al menos un EEG alterado. Lascrisis parciales se clasificaron de acuerdo con su fenome-nología en frontales y temporales de acuerdo con la últimarevisión de la Cl. Se recogieron con estos criterios untotal de 27 pacientes ('14 varones y 13 mujeres). La edadmedia de la muestra era de 34/4 ! 12b5 años sin diferenciassignificativas entre sexos y el tiempo medio de evoluciónde la epilepsia era de 240J4 -+ 137,67 meses. Se encontraronanomalías en 3 pacientes, 2 mujeres y un varón(11/1 %)y sólo una de ellas era de naturaleza tumoral(astrocitoma de bajo grado), concordante por su localización(temporal) con el tipo de crisis y por lo tanto susceptiblede tratamiento quirúrgico. El tiempo de evolución mediode estos pacientes era de '180, 192 y 216 meses respectivamente(Media:196 m). Se discuten las característicasclínicas de esta casuística en donde el porcentaje de anomalíashallado es muy inferior al porcentaje medio (325 %)de un conjunto de series reunidas bajo criterios similares.Se puede concluir en que el valor diagnóstico o confines neuroquirúrgicos de la RM en las epilepsias rebeldescon TC normal al menos en pacientes con una largaevolución de su cuadro comicial como era en nuestro estudio,es relativamente bajo.Epilepsia del lóbulo frontalL. F.-V Oller, A. Russi y B. Oliverlnstituto de Neurología y Neurocirugía. <strong>Barcelona</strong>.La epilepsia del lóbulo frontal (ELF) se caracteriza porpresentar crisis parciales simples o complejas, con o sinevol ución hacia cri si s parciales secu ndariamente generalizadas,tonicoclónicas, asociando un EEC intercrítico típico(puntas, punta-onda) en derivaciones frontales y unEEC crítico s¡n precisar su origen focal en la mayoría delos casos. Con tales criterios se han seleccionado un totalde 62 casos de epilepsias f rontales sobre un banco de datoscon una casuística de 5.000 enfermos epilépticos.Se analiza la semiología de estas crisis que pueden tenerpor su origen frontal rasgos comunes a epilepsias deotra localización, u otros más específicos orientando haciaun origen localizado en área motora suplementaria,ci ngu I u m, región f rontopolar, f rontoorbitaria, dorsolateral,opercular y motora.Se efectúa un análisis de los datos electroencefalográficos,comentando la estrategia de diagnóstico EEC de localizaciónde la lesión epileptógena, ya sea con finalidadprequirúrgica o no.Un seguimiento continuo de estos casos durante añospermitiría llegar a establecer factores pronósticos evolutivospara diferenciar formas de ELF farmacosensibles deotras farmacorresistentes al tratamiento antiepiléptico farmacológico.Estenosis acueductal y neurofibromatos¡sde Von RecklinghausenA. Alfaro, A. Cervelló, M.A. Antolín* y M.T. VillanuevaHosp¡tales Universitarios La Fe y Ceneral. Departamento de MedícinaFacultad de Medicina. Valencia. *'ección de Neurología. Hospital SanPedro de Alcántara. Cáceres.La estenosis acueductal (EA) es un hallazgo infrecuenteen la neurofibromatosis tipo I (NF-l), ya que hasta la fechahan sido publicados menos de 30 casos bien documentadoscon esta asociación.364
XLll Reunión <strong>Anual</strong> de la <strong>Sociedad</strong> Española de NeurologíaPresentamos dos casos de EA en la NF tipo l, correspondientesa un hombre de 48 años y a una muier de 34 quefueron estudiados por crisis epilépticas con aparición tardía.Ambos pacientes presentaban estigmas cutáneos característicosy cumplían criterios diagnósticos estrictos deenfermedad de Von Recklinghausen. En los dos casos, laTC puso de manifiesto una hidrocefalia triventricular. Enla mujer se practicó, además, un estudio por RM, que noevidenció alteraciones periacueductales sugestivas de gliosisni fenómeno de vacío de pulso compatible con obstruccióncompleta a dicho nivel. En ninguno de los pac¡entesse procedió a colocar una derivación, ya que enellos la hidrocefalia permanece compensada y las crisisepilépticas han sido totalmente controladas con medicación.El análisis de nuestros casos y de otros similares de laliteratura nos permite llegar a la conclusión de que la EAno tumoral en la NF-l constituye probablemente una anomalíaasociada del desarrollo, antes que un trastorno secundarioa las complejas alteraciones estructurales propiasde esta enfermedad.Crisis convulsivas causadas por cocaína.Estudio exper¡mental en ratasJ. Tejada, E. DíezTejedor, l. Álvarez, M. Cutiérrez, A. Franky E. de MiguelServicio de Neurología. Hospítal La Paz. Facultad de Medicina. UniversidadAutónoma. Madrid.Las crisis convulsivas en individuos consumidores de cocaínafueron una de las primeras manifestaciones clínicasdescritas. Los mecanismos patogénicos propuestosson: disminución del umbral convulsivógeno, activaciónde focos epileptógenos o por lesiones estructurales de tipoisquémico o hemorrágico.En el presente trabajo experimental reproducimos elefecto convulsivógeno de la cocaína. Se tomaron 5 gruposde ratas adultas Wistar a los que se administraba ladroga por vía subcutánea (grupo l) o intraperitoneal (ll-V). En el grupo I (n:4) la dosis era de 4 mg/kg/día duranteuna semana (n=2) y 2 semanas (n:2). En el grupo ll (n:B)S mg/kg/día por un mes (n=4) y dos meses (n=4). En losgrupos lll (n=3), IV (n:4) y V (n=9) se emplearon dosisde 16 mg; 32 rñg, y 6a m{kgldía, respectivamente, duranteun mes. Se utilizaron 4 animales control. Todos los animalesdel grupo V presentaron convulsiones (p < 0001)siete de los cuales fallecieron tras un episodio convulsivoprolongado ocurrido entre el primer y tercer día. Las dosrestantes presentaban convulsiones durante las dos primerasinoculaciones y después.mostraban hiperactividadsin aparición de convulsiones. Estas comenzaba entre los5 y <strong>10</strong> minutos de la inyección de la cocaína, eran inicialmentesacudidas mioclónicas cefálicas y continuabancomo generalizadas tonicoclónicas. En 3 animales de estegrupo el examen macroscópico de los cerebros evidencióhemorragias subaracnoideas.Concluimos considerando que la aparición de estas crisisconvulsivas parece estar directamente relacionada conla dosis aplicada y no con el período de duración del ensayo.Estos datos podrían ser extrapolables a la clinica humana.Patogénicamente en 3 casos se explicaría por lashemorragias encefálicas. No obstante, habrá que considerarotros mecanismos responsables de las crisis enausencia de lesión orgánica y relacionadas con los efectosde la cocaína. Serían necesarios estudios ulteriorespara identificar estos mecanismos y su relación con la clínicahumana.Crisis parciales simples: correlac¡ón clínico-funcionalcon electrodos subduralesS. Arroyo, C.L. Krauss, S. Uematsu y R.P. LesserEpilepsy Monitoring lJnit. Neurology Department (Meyer 2-147). JohnsHopkíns Hospital. Baltimore. EE.UU.Se presenta el caso de una niña de '12 años con crisisparciales simples sensitivas y motoras causadas por un astrocitomaen el lóbulo frontal derecho. Mediante monitorizacióncon una malriz (grid) de electrodos subduralesse demostraron2 áreas diferentes de comienzo de lascrisis. Un área, localizada en la región superoposterior dellóbulo f rontal derecho, se asociaba con sensación anormalictal en la extremidad superior izquierda. La otra área,localizada en la región inferoanterior derecha, se asociabaa protrusión lingual y contracción hemifacial izquierda.Mediante mapeo funcional con estimulación de loselectrodos subdurales. se determ¡nó una estrecha correspondenciaentre los focos epileptógenos y los cambiosmotores y sensitivos en la extremidad superior y fasciesizquierdas y la lengua. Es de señalar que la región motoray sensitiva correspondiente a la extremidad superior izquierdaestaba separada por la masa tumoral de la regióncorrespondiente a la hemicara izquierda y lengua.Este caso demuestra la estrecha relación entre áreas queproducen comportamientos clínicos focales ictales y áreasque producen respuestas motoras y sensitivas a la estimulacióncortical. Se sugiere que las respuestas a la actividadepileptogénica endógena y a la estimulación corticalen el área perirolándica mediante electrodos subduralesreflelan mecanismos fisiológicos comunes subyacentes.Crisis focales y carbamacepina. Estudio a largo plazoB. Anciones, M.A. Hernández, M. Lara, A.B. Camineroy C. MuñozServicio de Neurología. Hospital La Paz. Madrid.El objetivo de esta comunicación es realizar un análisisretrospect¡vo de la eficacia de la carbamacepina en el tratamientoa largo plazo de las crisis parciales y sus efectossecu ndarios.Hemos contado con el seguimiento lineal de 200 pacientestratados con carbamacepina como único fármaco porun período de tiempo entre 4 y <strong>10</strong> años. Se trataba de <strong>10</strong>9varones y 91 mujeres de edades comprendidas entre B y60 años. Dentro de las crisis el 51 o/o eran parciales simples;el 32 o/o con sintomatología complela y cerca de untercio habían presentado generalización. La etiología eramúltiple predominando las secundarias a encefalopatíasconnatales e idiopáticas. En todos los casos existió la crisiscon soporte EEC patológico y la carbamacepina fue elprimer fármaco instaurado en el 62 % de los casos. En loscasos objeto de análisis siempre que fue posible (BB %)el nivel estuvo en límites terapéuticos.41365
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