29.03.2020 Views

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

C A P IT U L O 21

LA TEORÍA DE LOS PRECIOS

M i e n t r a s los economistas se ocupan de lo que se llama teoría

del valor han acostumbrado enseñar que los precios están regidos

por las condiciones de la oferta y la demanda; habiendo desempeñado

papel prominente, en particular, los cambios en el costo

marginal y en la elasticidad de oferta en periodos cortos. Pero

cuando pasan, en el Libro II, o más frecuentemente en otra obra,

a la teoría del dinero y de los precios, ya no oímos hablar más

de estos conceptos familiares pero inteligibles y nos trasladamos

a un mundo en dbnde los precios están gobernados por la cantidad

de dinero, por su velocidad-ingreso, por la velocidad de

circulación relativamente al volumen de tránsacciones, por el atesoramiento,

por el ahorro forzado, por la inflación y la deflación

et hoc genus omne; y se hace muy poco esfuerzo, o bien ninguno,

para ligar estas frases más vagas con nuestras ideas anteriores de

las elasticidades de oferta y demanda. Si reflexionamos sobre lo

que se nos ha enseñado y tratamos de racionalizarlo, en los estudios

más sencillos parece que la elasticidad de oferta debe haber

llegado a cero y la demanda a ser proporcional a la cantidad de

dinero; mientras que en los estudios más elevados nos encontramos

perdidos en una niebla donde no hay nada claro y todo es

posible. Todos estamos acostumbrados a colocarnos algunas veces

a un lado de la luna y otras en el contrario, sin saber qué ruta o

trayecto los une, relacionándolos, aparentemente, según nuestro

modo de caminar y nuestras vidas soñadoras. [292]

Uno de los objetos de los capítulos anteriores ha sido escapar

de esta doble vida y poner la teoría de los precios, en conjunto,

en contacto íntimo con la teoría del valor. La división de la economía

en teoría del valor y la distribución por una parte y teoría

del dinero por la otra, es, en mi opinión, una separación falsa.

Sugiero que la dicotomía correcta es entre la teoría de la industria

o firma individual y las remuneraciones y distribución de una

cantidad dada de recursos entre diversos usos por una parte y

la teoría de la producción y la ocupación en conjunto por la otra.

Es verdad que mientras nos limitemos al estudio de la industria

o firma individual, suponiendo que la cantidad total de recursos

empleados es constante y, provisionalmente, que las condiciones

* 260

I

L A T E O R ÍA DE LO S PRECIO S 261

de otras industrias o firmas no han cambiado, no nos estaremos

refiriendo a las características importantes del dinero. Pero tan

pronto como pasamos al problema de lo que determina la producción

y la ocupación en conjunto, necesitamos la teoría completa

de una economía monetaria.

0 quizá pudiéramos trazar nuestra línea divisoria entre la

teoría del equilibrio estacionario y la teoría del equilibrio móvil

—queriendo decir con ésta la de un sistema en que los pumos

de vista cambiantes acerca del futuro son capaces de influir en

la situación presente—. Porque la importancia del. dinero surge

esencialmente de que es un eslabón entre el presente y el futuro.

Podemos considerar qué distribución de recursos entre los diferentes

usos será compatible con el equilibrio, bajo la influencia

de los motivos económicos normales en un mundo en que nuestras

opiniones relativas al futuro son estables y dignas de confianza

por todos conceptos —quizá con una división más entre

una economía que no cambia y otra que está sujeta a variar,

pero en la que todas las cosas se prevén desde el principio—.

O podemos pasar de esta propedéutica simplificada a los problemas

del mundo real, en el que nuestras previsiones anteriores

pueden quedar fallidas [293], y las expectativas relativas al futuro

afectar lo que hacemos en la actualidad. Sólo cuando hayamos

realizado esta transición deben entrar en nuestros cálculos las

propiedades peculiares del dinero como un eslabón entre el presente

y el futuro. Pero aunque la teoría del equilibrio móvil debe

seguirse necesariamente en términos de una economía monetaria,

sigue siendo una teoría del valor y de la distribución y no una

“teoría del dinero” autónoma. El dinero en sus atributos importantes

es, sobre todo, un artificio sutil para ligar el presente con

el futuro; y no podemos siquiera empezar a examinar el efecto

de las expectativas cambiantes sobre las actividades corrientes,

excepto en términos monetarios. No podemos librarnos del dinero

aun cuando aboliéramos el oro, la plata y los instrumentos de

moneda corriente. Mientras exista algún bien durable, éste podrá

poseer los atributos monetarios1 y, por tanto, dar origen a los

problemas característicos de una economía monetaria.

II

El nivel particular de precios en una rama industrial concreta

depende, en parte, de la tasa de remuneración de los factores pro-

1 Cf. capítulo 17.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!