29.03.2020 Views

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936

Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

2 9 2 BREVES CONSIDERACIONES

O, nuevamente, se supone que el mal aparece si el aumento

de inversión ha sido promovido por una baja en la tasa de interés,

creada por un aumento en la cantidad de dinero. Sin embargo,

la tasa de interés preexistente no tiene ninguna virtud

especial y no se obliga a nadie a tomar el nuevo dinero —se crea

con el fin de satisfacer la mayor preferencia por la liquidez que

[328] corresponde a la menor tasa de interés o al mayor volumen

de operaciones, y se -sostiene por aquellos individuos que prefieren

conservar dinero en vez de prestarlo a una tasa más baja—,

O, una vez más, se sugiere que un auge se caracteriza por el “consumo

de capital”, lo que probablemente signifique inversión neta

negativa, es decir, por una excesiva propensión a consumir. A

menos que se hayan confundido los fenómenos del ciclo económico

con los de huida del dinero, como los que ocurrieron durante

los colapsos monetarios europeos posteriores a la guerra, los

hechos indican todo lo contrario. Además, aunque así fuera, una

reducción en la tasa de interés constituiría un remedio más plausible

para las condiciones de subinversión que el alza de la misma.

A mi modo de ver, ninguna de estas escuelas de pensamiento hacen

sentido, excepto, quizá, si se da el supuesto tácito de que la

producción en conjunto sea incapaz de variar. Pero una teoría ...

que supone constante la producción, no es evidentemente una gran

ayuda para explicar el ciclo económico.

VII

En los primeros estudios sobre el ciclo económico, sobre todo en los

de Jevons, se encontró una explicación en las fluctuaciones agrícolas

debidas a las estaciones, más que en el fenómeno de la industria.

A la luz de la teoría anterior, esto parece una forma muy

lógica de abordar el problema; porque aún las fluctuaciones actuales

en las existencias de productos agrícolas entre un año y

otro son uno de los renglones individuales más importantes, dentro

del conjunto de los motivos de variación en la tasa de inversión

corriente; mientras que cuando Jevons escribió —y sobre todo

en el periodo a que se refieren la mayor parte de sus estadísticas—,

este factor debe haber tenido más importancia que los

demás.

La teoría de Jevons de que el ciclo económico se debía primordialmente

a las fluctuaciones en la munificencia de las cosechas,

puede volver a exponerse como sigue; cuando se logra una

cosecha excepcionalmente grande, por lo general se hace una adi-

NOTAS SOBRE EL CICLO ECONÓMICO 2 9 3

ción importante [329] a la cantidad conservada para años futuros.

El producto de esta adición se agrega a las entradas corrientes de

los agricultores y se considera por éstos como ingresos; mientras

que el aumento de las existencias no implica una sangría en los

gastos que de sus ingresos hacen otros sectores de la comunidad,

sino que se financia con fondos procedentes de los ahorros. Esto

quiere decir que la adición a las existencias es una suma a la inversión

corriente. Esta conclusión no se invalida aunque los precios

bajen mucho. De modo semejante, cuando hay una cosecha

pobre, se recurre a las existencias almacenadas para atender al consumo

corriente, de manera que una parte correspondiente de los

gastos que de sus ingresos hacen los consumidores, no crea ingreso

corriente para los agricultores. Esto quiere decir que lo que se

toma de las existencias comporta una reducción correspondiente

en la inversión actual. De este modo, si se considera constante la

inversión que se hace en otros sentidos, puede ser grande la diferencia

en la inversión total entre un año en el que haya una adición

sustancial a las existencias y otro en el cual haya una reducción

fuerte de las mismas; y en una comunidad donde la

agricultura sea la industria predominante, será abrumadoramente

grande, comparada con cualquier otra causa usual de fluctuaciones

en la inversión. Así resulta natural encontrar que el punto

superior de inflexión está indicado por cosechas abundantes y el

inferior por las deficientes. La otra teoría de que hay causas físicas

de los ciclos reguladores de buenas y malas cosechas, es, por

supuesto, asunto diferente, con el que nada tenemos que ver aquí.

Más recientemente, se ha presentado la teoría de que son las

cosechas escasas y no las abundantes las que resultan buenas para

el comercio, ya sea porque las malas hacen que la población se

aplique al trabajo por una remuneración real menor o porque

se considere que la redistribución resultante de la capacidad adquisitiva

es favorable al consumo. Es innecesario decir que no son

éstas las teorías en que pienso al hacer la descripción anterior

de los fenómenos de las cosechas como una explicación del ciclo

económico. [330]

Los motivos agrícolas de la fluctuación son, sin embargo, de

importancia mucho menor en el mundo moderno, y ello por dos

razones; en primer lugar, la producción agrícola es una proporción

considerablemente menor de la total. Y en segundo el desarrollo

de un mercado mundial para la mayor parte de los productos

agrícolas, que se surte en ambos hemisferios, hace que, en

promedio, se neutralicen los efectos de las buenas y las malas

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!