Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero
Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936
Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero de John Maynard Keynes publicado en 1936
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
9 0 LA PROPENSION A CONSUMIR
efectos sobre el consumo de la diferencia entre ingreso e ingreso
neto en la sección cuarta de este capítulo.
3) Cambios imprevistos en el valor de los bienes de capital,
no considerados al calcular el ingreso izeto. Éstos tienen importancia
mayor para modificar la propensión a consumir, desde el
momento que no guardan relación estable o regular con el monto
del ingreso. El consumo de las [92] clases propietarias de riqueza
puede ser extraordinariamente sensible a cambios imprevistos en
el valor monetario de la riqueza. ÍEsto debería clasificarse entre
los factores más importantes susceptibles de ocasionar cambios
a la corta en la propensión a consumir,*
4) Cambios en la. tasa de descuento del futuro, es decir, en
la relación de cambio entre los bienes presentes y los futuros.
Esto no es precisamente lo mismo que la tasa de interés, ya que
tiene en cuenta los cambios futuros en el poder adquisitivo del
dinero, en la medida en que son previstos.)También se tiene que
tomar en cuenta toda clase de riesgos, tales como la probabilidad
de no vivir para gozar los bienes futuros o la de una tributación
confiscatoria. En calidad de aproximación, sin embargo, puede
identificarse con la tasa de interés.
í La influencia de este factor sobre la propensión de gastos que
se hacen con un ingreso dado se presta a muchas dudas. Para la
teoría clásica de la tasa de interés,1 que se basó en la idea de
que la tasa de interés era el factor que ponía en equilibrio la
oferta y la demanda de ahorros, era conveniente suponer que
el gasto en consumo es, ceteris paribus, negativamente sensible
a los cambios en la tasa de interés de manera que cualquier alza
de la misma disminuiría perceptiblemente el consumó) Se ha reconocido
desde hace mucho, no obstante, que el efecto total de
los cambios en la tasa de interés sobre la inclinación a gastar
en consumo presente es compleja e incierta, dependiendo de
tendencias en conflicto, ya que algunos de los motivos subjetivos
para ahorrar se satisfarán con mayor facilidad si la tasa de interés
sube, en tanto que otros se debilitarán. ¡En un periodo largo,
es probable que los cambios sustanciales en la tasa de interés
tiendan a modificar los hábitos sociales considerablemente)) afectando
así la propensión subjetiva a gastar)—aunque resulta difícil
decir en qué dirección, excepto después de haberlo indicado
la experiencia—. Sin embargo, ¡no es probable , que la clase usual
de fluctuaciones a corto plazo en la tasa de interés tenga mucha
influencia directa sobre los gastos en tal o cual sentido) [93] No
1 Cf. cap. 14.
FACTORES OBJETIVOS 91
hay mucha gente que altere su modo de vivir porque la tasa de
interés baje de 5 a 4 por ciento, si su ingreso global es el mismo
de antes; pero, indirectamente, pueden presentarse otros efectos,
aunque no todos en la misma dirección. Quizá la influencia más
importante, que opera a través de cambios en la tasa de interés
sobre la disposición para gastar fondos procedentes de un ingreso
dado, sea el efecto de estos cambios sobre la apreciación o la
depreciación de los valores y otros bienes, porque si un hombre
disfruta de un aumento inesperado en el valor de su capital, es
natural que las razones que lo inducen a gastar actualmente se
fortalezcan, aun cuando, desde el punto de vista de su ingreso,
dicho capital no sea más valioso que antes; y se debiliten si está
sufriendo pérdidas de capital. Pero ya en el párrafo 3 hemos
previsto esta influencia indirecta. Fuera de esto, la conclusión
más importante sugerida por la experiencia es, según creo, que
la influencia a corto plazo de la tasa de interés sobre los gastos
individuales hechos con un determinado ingreso es secundaria
y carece reativamente de importancia, excepto, quizá, cuando se
presenten cambios excepcionalmente grandes. Cuando la tasa de
interés baja mucho, el aumento de la proporción entre una renta
vitalicia que puede comprarse por una suma dada y el interés
anual de esta última puede, sin embargo, proporcionar una fuente
importante de ahorro negativo al fortalecer la práctica de prevenirse
para la vejez por medio de la compra de una renta vitalicia.
Quizá debiera también clasificarse bajo este título aquella situación
anormal en que la propensión a consumir puede estar
agudamente afectada por el desarrollo de una incertidumbre extrema
concerniente al futuro y lo que con él pueda venir.
5) Cambios en la: política fiscal. En la medida en que la propensión
del individuo a ahorrar dependa de los futuros rendimientos
que espera, es claro que está ligada, no sólo con la tasa
de interés, sino con la política fiscal del gobierno. /Los impuestos
sobre el ingreso, especialmente cuando gravan al ingreso “no ganado”,
los impuestos sobre [94] las ganancias del capital, los impuestos
sobre herencias y otros similares, Son tan importantes como
la tasa de interés; en tanto que el alcance de los posibles cambios
en la política fiscal puede ser mayor, en las previsiones pollo
menos, que el de la tasa misma. Si la política fiscal se usa
como un instrumento deliberado para conseguir la mayor igualdad
en la distribución de los ingresos, su efecto sobre el aumento
de la propensión a consumir es, por supuesto, tanto mayor.2 )
2 Puede mencionarse, de paso, que el efecto de la política fiscal sobre el aumento