You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
<strong>Diario</strong> <strong>Ana</strong> <strong>Frank</strong><br />
Circulan los rumores más disparatados, y sin embargo se refieren a hechos reales. Así, por<br />
ejemplo, el otro día Kleiman nos informó que en la provincia <strong>de</strong> Güeldres se ha jugado un partido <strong>de</strong><br />
fútbol entre un equipo formado exclusivamente por escondidos y otro por once policías nacionales. El<br />
ayuntamiento <strong>de</strong> Hilversum va a entregar a la población nuevas tarjetas <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación para el racionamiento<br />
<strong>de</strong> alimentos. Para que al gran número <strong>de</strong> escondidos también les toque su parte (las<br />
cartillas con los cupones sólo podrán adquirirse mostrando la tarjeta <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación o al precio <strong>de</strong> 60<br />
florines cada una), las autorida<strong>de</strong>s han citado a la misma hora a todos los escondidos <strong>de</strong> los<br />
alre<strong>de</strong>dores, para que puedan retirar sus tarjetas en una mesa aparte.<br />
Hay que andarse con muchísimo cuidado para que los alemanes no se enteren <strong>de</strong> semejantes<br />
osadías.<br />
Tu <strong>Ana</strong><br />
Domingo, 30 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> 1944<br />
Mi querida Kit:<br />
Otra vez estamos en domingo. Reconozco que ya no me parece un día tan horrible como<br />
antes, pero me sigue pareciendo bastante aburrido.<br />
Todavía no he ido al almacén; quizá aún pueda ir más tar<strong>de</strong>. Anoche bajé yo, sola en plena<br />
oscuridad <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber estado allí con papá hace algunas noches. Estaba en el umbral <strong>de</strong> la escalera,<br />
con un montón <strong>de</strong> aviones alemanes sobrevolando la casa; sabía que era una persona por mí<br />
misma, y que no <strong>de</strong>bía contar con la ayuda <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más. Mi miedo <strong>de</strong>sapareció, levanté la vista al<br />
cielo y confié en Dios.<br />
Tengo una terrible necesidad <strong>de</strong> estar sola. Papá se da cuenta <strong>de</strong> que no soy la <strong>de</strong> siempre,<br />
pero no puedo contarle nada. «¡Dejadme tranquila, <strong>de</strong>jadme sola!»: eso es lo que quisiera gritar todo<br />
el tiempo.<br />
Quién sabe si algún día no me <strong>de</strong>jarán más sola <strong>de</strong> lo que yo<br />
quiero...<br />
Tu <strong>Ana</strong><br />
Jueves, 3 <strong>de</strong> febrero <strong>de</strong> 1944<br />
Querida Kitty:<br />
En todo el país aumenta día a día el clima <strong>de</strong> invasión, y si estuvieras aquí, seguro que por un<br />
lado te impresionarían los preparativos igual que a mí, pero por el otro te reirías <strong>de</strong> nosotros por hacer<br />
tanto aspaviento, quién sabe si para nada.<br />
Los diarios no hacen más que escribir sobre la invasión y vuelven loca a la gente, publicando:<br />
«Si los ingleses llegan a <strong>de</strong>sembarcar en Holanda, las autorida<strong>de</strong>s alemanas <strong>de</strong>berán hacer todo lo<br />
posible para <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r el país, llegando al extremo <strong>de</strong> inundarlo si fuera necesario.» Junto a esta<br />
noticia aparecen mapas en los que vienen indicadas las zonas inundables <strong>de</strong> Holanda. Como entre<br />
ellas figura gran parte <strong>de</strong> Amsterdam, lo primero que nos preguntamos fue qué hacer si las calles <strong>de</strong><br />
la ciudad se llenan con un metro <strong>de</strong> agua. Las respuestas a esta difícil pregunta fueron <strong>de</strong> lo más<br />
variadas:<br />
-Como será imposible ir andando o montar en bicicleta, tendremos que ir va<strong>de</strong>ando por el agua<br />
estancada.<br />
-Que no, que hay que tratar <strong>de</strong> nadar. Nos ponemos todos un gorro <strong>de</strong> baño y un bañador, y<br />
nadamos en lo posible bajo el agua, para que nadie se dé cuenta <strong>de</strong> que somos judíos.<br />
-iPamplinas! Ya quisiera yo ver nadando a las mujeres, con las ratas mordiéndoles los pies.<br />
(Esto, naturalmente, lo dijo un hombre. ¡Ya veremos quién grita más cuando lo muerdan!)<br />
-Ya no podremos abandonar la casa. El almacén se tambalea tanto que con una inundación<br />
así, sin duda se <strong>de</strong>splomará.<br />
-Bueno, bueno, basta ya <strong>de</strong> bromas. Tendremos que hacernos con un barquito.<br />
-¿Para qué? Tengo una i<strong>de</strong>a mucho mejor. Cada uno coge <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sván <strong>de</strong> <strong>de</strong>lante una caja <strong>de</strong><br />
Karneeval Biblioweb – Libros Gratis 79 http://ar.geocities.com/krnv_bweb