08.12.2012 Views

Sólo un escarabajo (Luis Alberto Battaglia)

Sólo un escarabajo (Luis Alberto Battaglia)

Sólo un escarabajo (Luis Alberto Battaglia)

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Sólo</strong> <strong>un</strong> <strong>escarabajo</strong> (<strong>Luis</strong> <strong>Alberto</strong> <strong>Battaglia</strong>)<br />

CAPÍTULO XIII:<br />

Juan y Verónica<br />

Juan soñó que el menú fueran sus ojos, fueran sus labios, sus senos, su piel, todo su cuerpo, su<br />

espalda, sus piernas; para comerla a besos, para acariciarla, para enredarse en <strong>un</strong> placer carnal<br />

¡Oh el amor! Por <strong>un</strong> minuto de timidez <strong>un</strong> siglo de frustración. Y se quedó quieto; sin besarla, sin<br />

acariciarla, sin contarle sus deseos. Verónica, desde lejos, lo miraba, el restaurante estaba vacío. Hizo<br />

<strong>un</strong>a seña y ella se aproximó. El pidió <strong>un</strong>a comida, que no viene al caso.<br />

La miró alejarse, la minifalda contorneaba y casi exhibía <strong>un</strong>as nalgas bamboleantes. Imaginó<br />

correrla, tocárselas, abrazarla, llevársela del restaurante a <strong>un</strong> lugar solitario y oscuro. Se quedó quieto<br />

como <strong>un</strong>a piedra, como <strong>un</strong> homosexual, como <strong>un</strong> tarado. No debía extralimitarse, propasarse, ser <strong>un</strong><br />

salvaje que toma lo que desea sin importarle más. Ella podría amarlo pero no así, no por la fuerza;<br />

debía ser por la palabra. Pero su lengua estaba inmóvil como su cuerpo, como si <strong>un</strong>a gran parálisis lo<br />

hubiera vencido.<br />

Recordó años de estar callado, de no poder hablar, de que otros se apropiasen de su voz y<br />

sus posibilidades; Cuántas conversaciones dejó pasar, como tantos amores y tantos sueños! ¡Cuántas<br />

palabras se morían adentro, se pudrían adentro! Llegó Verónica y él no pudo hablar, dejó el plato en la<br />

mesa y se alejó "No te vayas" Y él no pudo hablar. "Siento que podríamos amarnos". Y él no pudo.<br />

"Te espero a la salida, vamos a casa". Y no pudo."¡por favor Verónica!" Y no pudo.<br />

Se quedó solo con su comida. Todas las mesas estaban vacías. Verónica no estaba a la vista.<br />

Comió con bronca, con ganas de llamarla para decirle todo. "No, te prohíbo llamarla". Otro le hablaría,<br />

como él pensó hacerlo, insistiría, la conquistaría con sus palabras. "Te prohíbo llamarla" Y él no<br />

podía... por correcto, por serio; nada de eso: <strong>un</strong> cobarde, <strong>un</strong> cobarde. "Te lo prohíbo" La llamó para<br />

pedir el postre. Ella llegó sonriente. "Vos, como postre vos, eso quiero" Pero no, pero no. Ella llegó<br />

trayendo el postre. "Te prohíbo hablarle" Y le gusta y le gusta. "Te prohíbo hablarle" "Quiero hablarle"<br />

"Te lo prohíbo" "Ella se va" Y ella se fue otra vez, y él se quedó solo con su postre. "Porque sos <strong>un</strong><br />

tipo serio" "Un imbécil" "No, <strong>un</strong> tipo serio" Y él se quedó sin ella, muy serio. Otro tal vez la habría<br />

conquistado, y sería menos serio pero más feliz.<br />

EDICIONES BATTAGLIA 1 49

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!