Solemnidad: Natividad del Señor. Cicl - Autores Catolicos

SOCIEDAD
III-5
Los salvadores humanos, qué pobres, por cada
bocado de pan que parece, es puro veneno por los
aledaños. Todo lo humano en sí por sí e incluso
verdadero, cartón es y nada más. No convendría
olvidarlo por aquello de no repetir la decepción del
“arbolito de la ciencia del bien y del mal”. ¿Y fuera
de Dios? Todo mal. Si, todo mal. Pues queda clara la
naturaleza de las cosas, universal p-a más señas, no
nos deja otra. ¿Todos igual? Pues en esto sí.
“Las revoluciones latinoamericanas han producido
dictaduras en todos los casos, desde....hasta.... A
pesar de decirse revolucionarios, no fueron propiamente
porque una revolución implica una toma violenta del
poder y la abolición del sistema imperante”. (Manual
del P. I.) Pero rectifico la cita: la situación
imperante puede que también sea bien recalcitrante, e
incluso ilegítima hablando en justicia, (democracia
aparte). ¡Hace siglos que falta legitimidad pues no hay
idea clara de la vara de medir; no hay metro y se mide!
¡No es cosa de sangre, es cosa de verdad, de justicia y
bien¡ ¡No poner tan sonso al pobre maniqueo que incluso
Gerundio lo venza en la lid! ¡Cuando el pueblo sabe de
filosofía, de ciencia y de arte, es que se ha acabado
la ciencia y el arte! ¡Y el pueblo somos todos cuando
nos salimos fuera de lo que a fondo sabemos, de la
claridad! Y voy a decir una herejía: incluso las
revoluciones independentistas son sin fundamento. ¡Las
“alzadas” han de ser para rectificar y unir¡ ¡Lo demás
jamás pasará de algaradas¡ ¡Los nacionalismos –del que
todos somos hijos- son asonantes asonadas disonantes!
¡La fuerza, la unión, la conjunción, el pluralismo
integrado! La modernidad es esencialmente adolescente y
como tal se porta. Y las almas criadas en ella son la
pura adolescencia suelta, a tumbos, y a humo de pajas.
Basta verles cómo presumen de ciencia (“creen en la
ciencia como en la Virgen de Fátima”, se quejaba
Ortega), y era y es verdad. Y lo mismo pasa como en
muchas más cosas. Dos de ellas: las independencias, la
conciencia entronizada, la oposición o independencia a
cara de perro de Iglesia y Estado, y que tanto el clero
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