horizonte

astante caluroso para estar ya en las postrimerías del
verano, pero con buena temperatura, nos aproximamos
hasta el pantano de Aguilar –lugar bien conocido
por la mayoría de los excursionistas que integrábamos
el grupo– La mañana y la tarde las gastamos
dando paseos –no largos– por los alrededores. Francamente
fue un día para recordar; lo pasamos bien y
con abundante alegría. Mutuamente nos enteramos de
lo poco diferente en nuestras comunidades de este
pequeño sector; pero disfrutamos haciéndonos saber
que hay poco nuevo que contar. La jornada de la
mañana terminó con una comida bien fraterna entre
todos los participantes; almuerzo que como todos los
años fue rico y abundante. Durante la tarde se formaron
grupos de juegos variados e interesantes: cartas,
parchís y entretenimientos varios. El día fue entretenido
y variado. Quedamos francamente contentos y
satisfechos por haber hecho un pequeño esfuerzo para
abandonar la monotonía ordinaria en nuestras comunidades
habituales. Alegre jornada la que transcurrió
en Aguilar.
Día de reunión con muchos Hermanos – La jornada
fue buena y entretenida. La mañana la dedicamos
a la cosa seria. Empezamos el día con una oración
muy sentida y seria; fue una oración en un estilo
nuevo y bien aprovechada por la asamblea. Siguió la
reflexión sobre el Capítulo de Distrito. El Hno. Provincial
nos explicó lo que podía ser y cómo celebrarlo;
y también cómo lo podían sentir los diversos Sectores
y por los varios Hnos. Fue una magnífica expo-
Vida en comunidad
sición, bien estructurada y presentada a la asamblea.
Después de larga reflexión y breve descanso, celebramos
la reunión por grupos para aportar ideas al
Capítulo que se celebrará en el 2012, recién estrenado.
Tras una breve puesta en común tuvimos la celebración
de la Eucaristía, por cierto muy sentida y
profunda. A continuación nos acercamos a los comedores
donde nos tenían preparada un flamante comida;
celebramos el fraternal acto entre Hermanos, que
resultó del agrado de todos.
La tarde fue empleada al disfrute del tiempo de
ocio. El Hno. Rufino nos tenía bien preparado este
encuentro de la tarde. A las cuatro salimos para Frómista.
Allí ya nos estaban esperando los guías. Esperanza
fue nuestro primer presentador. Nos explicó, al
pormenor, la iglesia de San Martín, por dentro y por
fuera. Después de esta gran explicación, ella misma
nos condujo hasta la otra iglesia donde se nos hizo
una buena demostración de lo que era y es el “Camino
de Santiago”. Escenas muy claras y expresivas
de todo lo referente al “camino”. ¡Qué admiraciones
más puestas a punto! Todo fue seguido por el gran
grupo, punto por punto y paso a paso; nos pareció
estar viviendo aquella época de tantos y tan gratos
recuerdos. Los que ya hicieron el Camino de Santiago
les sirvió para recordarlo de nuevo; y a los que no
lo hemos celebrado, nos vinieron ganas, aunque ya es
un poco tarde, de calzarnos las botas campestres y
ponernos en camino.
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