horizonte

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Vida en comunidad
No olvidamos el tiempo litúrgico. Pero del tiempo
existencial, del tempus fugit. Del “ayer se fue, mañana
no ha llegado; / hoy se está yendo sin parar un
punto: / soy son fue, un será y un es… ¿De eso se
habla?
- Eso es para Quevedo y sus secuaces.
- ¿Qué ha hecho el Burgos?
- Lo de siempre: perder hasta con el Grijuelo. Está
el último de la tabla. No hay quien lo salve…
La fauna de esta península rústica está ya incorporada
a nuestras charlas y al cántico de las criaturas:
Hormigas y ratones, bendecid al Señor. /Gatos y gatitos,
bendecid…/ Perdices y gorriones…/ Urracas y
picazas…/ Bandada de estorninos y palomas…/
Moscas y mosquitos, ¡ay!, ¡ay! ¡Los martirizantes
mosquitos! Dámaso Alonso los hubiera incluido en
su poema Los insectos: “Me están doliendo extraordinariamente
los insectos, / porque no hay duda estoy
desconfiando de los insectos. / Cuando zumban y
zumban y zumban los insectos. / Que me están royendo
el mundo, mi alma, mi alma. / y, ¡ah!, los insectos,
/ y, ¡ah!, los puñeteros insectos”.
Pero hay un animalito que entretiene a algunos
videntes con inusitado regocijo: la ardillita, ¡qué maravilla!,
nos visita por la mañanita, vuelve por el mediodiita
y se despide por la tardecita. ¡Qué maravilla!
La ardillita. Pero sus desperdicios incomodan a algún
vidente. Por eso está esperando a “el varón que tiene
corazón de lis, / alma de querube, lengua celestial, el
mismo y dulce Francisco de Asís” para que implore a
la ardillita: “¡Paz, hermana”, “que Dios melifique tu
ser montaraz”.
Parada y fonda: Nos han visitado las comunidades
de Bujedo, Palencia y San Asensio. Casi todas
con el siguiente programa: visita a la ciudad, sobre
todo, al Museo de la Evolución Humana; después, en
nuestra residencia, convivencia festiva entre Hermanos,
y por la tarde, a contemplar La Cartuja.
Algunos Hermanos, durante las vacaciones estivales,
visitaron a su familia burgalesa, convivieron con nosotros
algunas horas, nos actualizaron los ordenadores y
colaboraron intensamente en la tarea de enfrascamiento
de frutas y pimientos… Gracias.
Unos vienen. ¿Y adónde vamos nosotros? Pues…
todos juntos y como un solo hombre, a las centrales
de nutrición: capilla y comedor. Pero algunos, en el
mes de septiembre, disfrutamos de dos encuentros.
Uno con los Hermanos y la dirección de la escuela de
la Santa Espina. Empezamos la vendimia y otras
cosechas… El otro encuentro, en Aguilar de Campoo,
con Hermanos y profesores de Burgos, Santander,
Corrales, Palencia y Bujedo. El día soleado favoreció
la solemnidad de la festividad. Pero que muy bien…
Apéndice 1.º: El día 9 de diciembre, en el puente
de San Pablo, dos vírgenes se me aparecieron. Y me
dijeron: hoy somos 208 Iesu Communio. La Aguilera-Lerma.
Giraron hacia El Espolón. Cáritas me esperaba.
Epílogo 1.º: Día 12 de diciembre. A la puerta de
la clase, me sorprende un desconocido. Busco a un tal
Pedro. Soy Eladio. Me dicen que tengo que dar una
charla a inmigrantes. ¿Y cómo? Estuve 37 años en el
Colegio La Salle. Quiero mucho a los Hermanos.
Tengo 86 años. Estoy muy bien… Saludos y abrazos
a todos los Hermanos.
Son los saludos de Eladio, padre de Roberto de la
Iglesia, superior del Monasterio de San Pedro de
Cardeña.
Los Hnos. Arcadio, Germán, Marcelo, Ángel, Pedro,
Juan José, Hermenegildo, Federico, Mariano y
Bernardo, de la Residencia de Burgos os desean feliz
año 2012.
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