XXIX Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

FILOSOFÍA
Teorema
La voluntad divina pide arrepentimiento para “borrar y perdonar todo pecado”,
(A, Mt 18); “de cada hombre”, (C, Lc 15); y esto exige nuestra entrega
absoluta, (B, Mc 8).
La adecuación a la realidad humana y social en Ortega y
Gasset.
“Lo que ha pasado aquí es que nos hemos empeñado en
tocar malagueñas con orquesta. Es menester que, si no
poseemos más que pensamientos simplicísimos y efectos
incomplejos, la expresión sea correspondiente. Lo
sustancial no ha cambiado en nosotros, no ha
progresado: una intimidad balbuciente, entre gótica y
celtíbera”.
“Por un caso de hipocresía colectiva, tan grave y
tan tenaz que es acaso sin ejemplo en la historia,
habíanse acostumbrado los españoles, a hacerse la
ilusión de que respiraban cuando abrían la boca, no
habiendo aire en torno, a creer que aprendían algo
cuando leían los libros de sus pensadores o escuchaban
cosas con algún sentido cuando hablaban sus oradores, o
administraban cuando sus empleados partían en las naves
con rumbo a las colonias, o con las postas y galeras
hacia las provincias. Al cabo del tiempo habíanse
atrapado las facultades primarias y perdido la noción
de la realidad, llegó a creerse de buena fe que aquello
era pensar, sentir, querer. En el fondo ha sido nuestro
pueblo el más satisfecho de ser como era y el que menos
ha padecido sentimientos de emulación y menos ha
deseado el ser como otro.
Ortega va mostrando cómo van naciendo las leyes de
un ambiente popular. Y se remonta a la unidad de
pensamiento que ha dado origen a los idiomas...o algo
así. “El lenguaje es la manifestación de la comunidad
radical de espíritus, es la comunicación misma. La
unidad originaria del lenguaje revela la unidad del
pensamiento, y el pensamiento central del hombre
primitivo no es la aritmética o la física, es su noción
de Dios sobre el mundo, y del mundo bajo Dios, es el
mito”.
“Pues el rompimiento de la unidad lingüística
requiere para ser explicado, según Schelling, una
cosmovisión profunda en los senos de las conciencias
humanas. El Dios único se partió en dioses y la
humanidad quedó disgregada por grietas hondísimas, y
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