XXIX Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B ... - Autores Catolicos

HISTORIA
La paz con Dios y con los hombres y las.
La fe divina relativiza toda la creación pues nada
puede sustraerse de la autoridad amorosa del Señor. Es
por eso por lo que la Historia humana habría que verla
como correspondencia a Dios (punto esencial), y como
concordancia más o menos perfecta dentro del humano
discurrir.
Cortés viene de La Hibueras de descubierta donde ha
estado durante dos años, en una verdadera Odisea llena
de penalidades. Viene envejecido. Mientras tanto las
autoridades dejadas por él, perpetran todo tipo de
fechorías. Vuelve el 28 de Enero de 1528.
De camino es recibido triunfalmente tanto por
indios como por españoles.
“Indios y españoles rivalizaban en el deseo de
manifestar su gratitud al hombre a quien consideraban
como su verdadero caudillo y gobernador. Todos
anhelaban la paz que viene cuando rige un pais la
autoridad dignificada por la justicia. Oro, mantas,
gallinas, le llegaban por doquier. En Tlaxcala solió
toda la ciudad a recibirlo bailando de alegría”.
Cortés se dirige al monasterio de san Francisco a
dar gracias a Nuestro Señor por “me haber sacado de
tantos y tan grandes peligros y trabajos, y haberme
traído a tanto sosiego y descanso, y por ver la tierra
que tan en trabajo estaba, puesta en tanto sosiego y
conformidad, y allí estuve seis días con los frailes,
hasta dar cuenta a Dios de mis culpas”.
Ante las autoridades pervertidas, la Corte manda
un “Justicia Mayor”, Ponce de León. “El nuevo juez
produjo en todas partes la mejor impresión y Cortés en
particular sintió honda satisfacción al verse en manos
de un hombre tan recto y desinteresado”.
Pero frente a éste y en su entorno está Fray Tomás
Ortiz. “más desventurado para entender en negocios –
dice Bernal Díaz- que no para el santo cargo que
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