j - Memoria Chilena

del almac6n de ventas lo habia invitado a visitar la
tienda del segundo piso, despuCs del primer entrena-
miento.
Usted es cat6lico, jno es cierto?
--Clara, seiiorita.
Habia recibido una estatuilla del santo de pier-
nas atleticas y calzado con zapatillas deportivas.
Le explicaron tambikn, vagamente, el significado
de las palabras que mostraba la figura, en su libro
abierto.
Venite
Vobis
Et leg0
J
Dabo
Vobis
Omnia
Born
. Caucam&n sac6, como primera conclusih, que
San Pancracio, con sus palabras misteriosas, daba la
suerte y lo iba a ayudar en las pr6ximas peleas.
Con la boina metida hasta 10s ojos y el pequefio
maletin bailandole entre 10s dedos, subi6 hasta la ca-
lle Veintiuno de Mayo.
Anochecia con desgano. La ciudad descansaba
de sus calores. Era, para 61, la mejor hora de Santia-
go. Se sentia a punto. Podia correr m&s rkpido que
10s micros; podia tumbar, de un papirote, a1 mhs fir-
me de 10s carabineros que dirigian el trhnsito. Per0 a
61 le gustaba ir lentamente, mirando a las chiquillas
con sus chombas livianas tan prometedoras. Dete-
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