OPINIÓNEditorialEL CUENTO DENUNCA ACABARna visión realista y sin complacencias de la ONE parece indicar que losviejos problemas del que fuera primer conjunto sinfónico del paísarraMra siguen siendo los mismos por le menos desde hace más deuna década. Lis consecuencias de las inercias, de la indecisión, de lainca pandad de ir hasta la raíz de esos problemas, los hacen aflorar de\cz en cuando para recordar a los interesados por el estallo de nuestracultura, que la ONE es una orquesta en perpetuo conflicto.En un país donde se ha emprendido una reconversión industrial dolorosa.con Iodo lo que conlleva de tensión y de malestar social -allí están las asuntos,todavía sin resolver del todo, de los astilleros o de la pesca- ronda lo surrealistaque nadie, que ninguna autoridad ministerial parezca dispuesta a asumir el relativoriesgo de una reconversión que reestructure una orquesta que en estemomento está muy por debajo de lo que de sus prestaciones artísticas se podíaesperar, y del dinero que cuesta al contribuyente español.Porque la ONE es una orquesta cara. Su último presupuesto alcanza los 1.465millones de pesetas, lo cual es una cifra más que considerable sobre todo si lacomparamos con el de orquestas que en estos años lian demostrado un nivel deconstante superación y que las ha llevado a obtener notahles éxitos tanto enEspaña como en el extranjero. Así el presupuesto de la Orquesta Sinfónica deTenerife es de vi8 millones, el de la de Galicia de 710 ti el de la filarmónica deGran Canaria de 600. A lo cual hay que añadir que a través de la taquilla la ONErecupera tan sólo el 27% de sus gastos, y eso teniendo en cuenta que un renglóntan importante en el debe como es el alquiler o mantenimiento de una sala paraella no existe, pues su sede es el Auditorio Nacional de España, en Madrid. Escasi cruel recordar que una compañía privada, Ibermúsica, que trae cada año a lacapital del Estado a algunas de las mejores orquestas, directores e intérpretes delmundo, con un presupuesto de 567 millones, recupera en taquilla el 73% y queel Festival Mozart. con 89.8 millones de presupuesto, el 67,7%.En el recientemente aprobado reglamento de la ONE se habla, como de un grantriunfo, efe la posibilidad de que en su nueva etapa -la historia de la ONE está ¡alonadadt J ntiL'i'os etapas que no llevan a ninguna parte- grabe ¡dos discos! al año.mientras orquestas como ¡a.-> nía» drrihe ocupar un lugar destacado tanto en España como enel escenario internacional.de portadaSjJv,tdorAlartó yBelénGonzafezFotode portada:ChrisiianSteiner/D CEdita: SCHERZO EDITORIAL S.A.C/Marqués de Mondéjar, 1 1. 2" D2BO28 MADRIDTeléfonos: 191) .156 76 22/725 59 09FAX:I9TI7261864Presidente de honoiGerardo Queipa de LlanoPresidentelosé María Queipo de LlanoREVISTA DE MÚSICADirectorAmonio MoralDirector AdjuntoJavier ArrayaRedactor tefeEnrique Martínez MiuraEdición ypuhtkhUdAra riza QumtaniilaRedactor gráficoRafa MartínSecciones:Actualidad. Javier Alfaya y Arturo Reverter.Discos: fosé Luis Pérez de Arte-iga.Alta fidelidad: Eduardo Casanueva PeHrata.faiz: Ebbe Traberg.Música contemporánea: Leopoldo Honiañón,Consejo de RedacciónJavier AUjy.v Roberto Andrade Malde íDominRo del Campo Giste!,Santiago Martín Bermúdez,Antonio Moral H José Luis Pérez de Arteaga,Arijro Reverter y [osé Luis TéflezConiahiiidatí(osé Anión i o AndújarRelaciones externas y suscripcionesAna MaleoDistribución y administraciónCristina García RamosExpedicionesI van Pa&cualAgencia de publicidadDoble Espacio S.AGeneral Vague, 10. 28020 MadridTno.: (91) 555 67 67. Fax: (91) 556 1307Fotocomposít ionEXTRAImpresiónGRÁFICAS ACÁ S.A.EncuademaciónCAYETANO S.L.Deposito LegalM-4t B22-1985I55N0211-4802
OPINIÓNRataplánLA MIRADADE ORFEORescatar de la ignorancia, del ohido enque h memoria colectiva ha sumid» aun artista puede ser una justa y nobilísimaacción. H tiempo, dicen, es severopero aceitado juez que a todos lia idosituando en el lugar que merecían. Noobstante, también les jueces yerran en losfallos, y de ahí la pertinencia de organizarun tomando que restituya :il secuestradoal hogar que nunca debió perder. Unejemplo: Antonio Ros cié Olano. un é nomuy brillante panorama narrativo dd sigloXK español, lúe una pluma tan singularcomo excelente; un escritor tildado derom y dueño de un pirsa que anunciabaa Marcel Proust y de unas preocupacionescercanas a Edgar Alian Poe. fties bien,aún está esperando ser liberado dd zuloen que está metido. Con Wagner, que es alo que vamos, el problema es oüu Esnotorio que fue un genial compositor,capaz de clausurar gloriosamente unaépoca del arte sonoro y al mismo tiempoabrir para éste los caminos por dondetransitará en el porvenir. Su aportación ala ópera, desde una turbadora y misteriosabelleza, lleva la impronta de un trascendentemensaje moral. Propugnó la conjunción,la síntesis de todas las artes, y nohubiera vacilado en servirse del cinematój?afosi los hermanos Lumiére aparecenantes en escena. Escribió trece óperas,diez de las cuales siguen en nuestros díasfigurando por derecho propio en los másexigentes repertorios. Mas, Wagner. hombrea todas luces superior, tuvo unoscomienzos infames. No fue ese genio precozque al poco de abandonar los pezonesmatemos ya se maneja como Pedropor su casa entre los pentagramas. Las tresprimeras obras que dio a las candilejas{Las fxulcn La prohibición á> aman/ K¿ttziíson burdos remedos de Weber y otrosautores. Y estas óperas que acabo de reseñarson las que ahora el comprador noavisado tiene al alcance de la mano. lasdirige el gran maestro Wolfgang Sawa-Hiseh, liajo cuya batuta actúan la excelenteOrquesta del Estado de Baviera y unrepaito vocal de primera categ< rá. El seBodiscografico que ha puesto en el mercadoese terceto de bodrios responde al nombrede Orfeo. La historia, pues, parecerepetirse: quienes desciendan al mundode las sombras para rescatar un cadáver,por muy bien acompañados que lohagan, perderán el fiambre por habermirado hacia donde no debían. Dicho seacon perdón para la hermosa Euridice.Javier RocaEn mi menorUN INGLES EXCÉNTRICOHace90 años nacía en LondresConstant Lamben, una de las personalíciadesmás raras, originales yfascinantes de la música inglesa. Alos 19 añas le encargaba Diaghilev unballet para sus huestes y él lo escribiósobre Romeo y Julieta. Puso música a laAna Karenina de Julien Durivier conVivien Leigh y Ralph Kichardson. arreglóbuen número de piezas para ladanza -de Purcell a Liszt- y compusouna mezcla de cantata medioescenifieabley concierto para piano sobre unpoema de Sacheverell Sitwell que .sellamó Tbe Río Grande y por la quetodavía .se le recuerda de vez en cuando.También fue director de orquesta yaficionado a la astrologia. y decía que elpreludio de su Ixillet Honascope le habíasido dictado por el fantasma de ISemardvan Dieren, un compositor holandésmuerto en 1936 a quien admirabasobremanera. Le gustaba hacerse fotografías,y se conservan de él algunasexcelentes, casi siempre fumando, y enuna de ellas jugando con su gato, sentadoéste sobre una partitura abierta.Lamben -que desconfiaba de la propiaevolución de su obra, de su .sentido dela liliertad como compositor, de su tendenciaa quedarse con lo que parecíademasiado fácil- murió en 1951. alcoholizado,victima de una diabetes queignoraba, agobiado por el exceso detrabajo y desmoralizado por la falta deéxito ele sus obras cuando le tallabandos días para cumplir los id años. Pero,además. Lamben escribió un libro quehe tenido la suerte de encontrar en unlibrero de viejo londinense y que con eltítulo de Music Ha! da un repaso a !avida musical de los años treinta -seLA ONE O LAANARQUÍA MUSICALSr. Director:En la vida de una orquesta sinfónica,la anarquía, como sinónimo dedesgobierno, es una mala compañerade viaje, pues le dota de vicios, caprichosy mezquindades que incidenmuy negativamente en su rendimiento,en general, y en la calidad de susinterpretaciones, en particular.La disciplina, por el contrario, esuna característica esencial de todabuena orquesta que se precie. Sin disciplina,y por supuesto, sin talento.publicó en 1934- desde el punto devista de quien comienza a ver que seha salido demasiado de la direccióncorrecta, del creador que empieza ya asangrar por todas las heridas, esas queacabaron con él. La intención del libroes reflexionar sobre -la música modernaen relación a las otras artes y en relaciónal entramado social de la vida de hoy.Y es en ese sentido como, por ejemplo,y al hablar del pastiche como forma decreación asentada firmemente- en esavida de hoy sabe, por ejemplo en elcaso de Parade, aplicar el concepto deposguemi -en este caso la del ]•'(- no aun período histórico sino a vina actitudsocial. Califica a Stravinski -a quien enun momento relaciona brillantementecon Gertrude Stein y a quien avisa deque quien vive para la técnica de técnicamuere- y a Diaghilev de -viajeros porel tiempo-, y .se queja del encanto de unPoulenc del que, señala, -hasta en lacheca de la moda se diría de é¡ que estáun poco viejo-. Especialmente brillantesson las páginas que dedica a nacionalismoy forma -dice menos de la Kusiaproletaria Paso de acero que Las botíasoa lo que él denominaba romanticismomecánico, nueva forma de presentar aMimí o a Louise, esta vez travestidas dejugadores de rubgy o conductores delocomotoras. Schoenlierg ha devenidopara Lamben cabeza de una -revoluciónoficial- y Sibelius -el músico al que másadmira- será el gozne sobre el quehabrá de girar la música orquestal delfuturo. Todo, pues, jugosamente discutible,desinhibido, libre, en este ensayoque. creo, merecia este repaso.Luis Suñénesfuerzo y constancia, no puede darseuna óptima interpretación musical,pues la Música, como arle elevado,implica técnica y talento, creatividad ytrabajo, y sin disciplina no puedeordenarse el trabajo interpretativo, ypor tanto, el mensaje musical quedadevaluado. así como en su conjunto lainterpretación musical. faLseada en suesencia.La Orquesta Nacional de España,sufragada con cargo a las PresupuestosGenerales del Estado, como OrganismoAutónomo integrado en la Administraciónestatal, está dando en los últimosaños un muy negativo ejemplo dehasta qué punto una orquesta puedeverse devorad:! por sí misma gracias asu concepción asamblearia y anárquicade lo que debe ser tanto la gestión de