12.07.2015 Views

Scherzo. Núm. 99

Scherzo. Núm. 99

Scherzo. Núm. 99

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Reedicioneseditor. Los iniérpretes trazan un recorridoplástico y contrastado, desde la rusticidadde Sola saleta a la plasmación de la influencia(Je los cultismos del madrigal ilaliano.Las Lecoits de ténébres de Michel Lamben,en el trabajo a la batuta y a la tecla dePiveteau (5 61213 2). quien crea un acompañamientomuy rico, merece una versióndesigual por los muy distimos niveles delas aportaciones vocales. En gran forma elcontratenor Charles Bren, pero de una teatralidadsobrecargada la contralto NathalieStutzmann y muy destemplado el tenorHoward Crook.Medlam y el London Baroque plantean,como es casi obligado, la diferenciacióninsirumental en la.s Sonatas en trío deCorelii (5 61210 2) entre las páginas dacbiesa y da camera, mas esto es sólo supunto de partida. No eluden un .sentidodeclamatorio muy barroco -como en elprimer Allegro de la Op. I, n' 9-, aunquesobre todo subrayan la sorpresa, la invenciónformal de la sonata.El disco dedicado a Vivaldi por losTavemer Players y dirección de AndrewParrón (5 61275 2) no discurre ni por lascaminos de la exuberancia instrumental-Concertó per la Orcbestra di Dresda- nilos de la energía acentual. Ofrece, en cambio,magnificas labores solistas a la flautadulce -Marión Verbruggen en el RV 95- yal violin -Holloway y Goodman en el RV556. También destaca la violinista MonícaHuggett en la versión de La cetra op. 9 conKraemer y los Raglán Baroque Players (5612-46 2). versión donde el fraseo de laslentos aventaja al ligero academicismo deltratamiento de los tiempos rápidos.El citado john Holloway, con DavittMoroney, realiza unas excelentes Sonataspara tiólin y clave deBach (5 61237 2),Susan Sheppard confiereigualmente unpapel destacado alchelo en las obrascon bajo continuo.Articulación variada,entronque del ornamentoe indudableraíz core lliano-vi valdianade las obrasson los puntos demira de las versiones,en las que el tecladoasume en ocasionesla voz principal.La Water Mustie de Haendel a cargo delLinde Consort y .su fundador (5 61240 2) esuno de los ejemplares de menor interés delconjunto. Versión no especialmente clara,de escaso relieve tímbrico y acentuaciónlaxa. Intervenciones poco felices de trompasy trompetas, sobre todo al inicio de lasegunda su ¡te.Los mismos intérpretes tocan en undisco dedicado a la flauta de pico barroca(5 61248 2). En este caso. Linde, en sudoble papel de solista y director, se muestracapaz tanto de la grisura del comienzode la Sutleóe Telemann tomo del animadoacompañamiento y b suelta dicción de suinstrumento en la Sonata tena de AlessandroScarlatti. En tanto que recital de parecidascaracterísticas, es mucho más interesanteel CD de Han de Vries con Sonatasde Tekmann y Haendel (5 61211 2).donde resalta la penetrante sonoridad y laarticulación muy ágil del solista. Notablestrabajos al clave deAsperen y Hogwood.Resulta muy razonable peasar que lasobras para tecla deSoler fuesen interpretadasen su épocatanto al fortepianocomo al clave; es loque defiende MaggieColé, distribuyendoentre los dos instrumentossu selecciónde doce composiciones(5 61220 2).Recreaciones percutidas en el primer caso,con visos de acercarse a un lenguaje dasicistaQMozart?); y espectacularidad mecánicaen el segundo, sobre todo en el Fandango.Un disco completamente excepcionales el de las Sinfonías «%. 26. 52y 53 deHaydn por La Petite Bande y dirección deSigiswald Kuijken (5 61212 2). Los músicosevidencian su versatilidad pasando delvibrante inicio de la segunda de las obrasal velado Andante que le sigue. Rítmicaagitada -Vivace de la n" 53-, sentido dramático-Presto de la n" 52- y presencia deun clave en absoluto arcaizante.Del excelente ciclo de las Misas mozartianaspor Peter Neumann y el CollegiumCartusianum, se propone esta vez la Misade la Coronación K. 317 y la Misa solemneK. 337(5 61244 2) en lecturas ligeras, texturasclarísimas y conté nación lógica delos elementos. No se evita la orientaciónbachiana en el Benedictusde la segundade las obras. Sólo laspérdidas de homogeneidaddel timbre dela soprano PatriziaKwella (como en elDona nobispacem dela K. 317) dañan unpoco el logro.La linea elegantedel violonchelistaWouter Moller, su virtuosismoincluso-Finale del G. 474-,aun con los problemasque le plantea laescritura en la 7.ona más aguda (Rondó delG. 482). compensan los acompañamientosun punto caídos de Linde de los Conciertosn*. 7, 7y 9 de Boccherini (5 61239 2).Dos son ¡os registras con Melvyn Tanal fortepiano. El que contiene las Sonatasn%. 11, 13, 14, 19y 20 de Beethoven (561238 2) es sobre todo valioso por el tonoingenuo de las partituras de la Op. 49 y lastintas de la Op. 22. La Claro de luna esplanteada casi como una improvisación,que falla en el Finale. un tanto atropellado.En las SonalasD. 959y D. 960de Schubert(5 61272 2). Tan. sin dejar de expresar losaspectos dolientes o elegiacos de amboslentos, se lanza más que nada al canto,apoyado en un lempo flexible.Mackerras logra una sensacional lecturade la Sinfonía n s 9de este mismo compositoral frente de la Orquesta Age of Enlightenment(5 61245 2). Profundidad decampo, coherencia motívica, gran trabajode la cuerda construyenuna recreaciónnada tímida,que se entrega a unadanza desenfrenadaon el <strong>Scherzo</strong> y seFERRANDOÍ ierra de modoimplacable con elfulgurante Finale.Hausmusik ponede manifiesto lasconexiones entre elPrimer Quinteto y elOcteto de Mendelssohn(5 45168 2. reediciónno en serie económica). Sin embargo,el Op. IH carece de la fuerza de inventiva delOp. 20, que en esta versión de tonalidadesmates se aleja de toda implicación orquestal;la segunda parte de la obra es la más conseguida,en especial el enérgico Presto.E.M.M.A FALTA DE PAN...Curiosa, muy curiosa la política de grabacionesy lanzamientos de esta importantemultinacional de la música clasica grabada.Mientras otros sellos consideradas comercialmentemarginales se lanzan, a vecescon riesgo, a sacar a la luz pública grabacionesde composiciones desconocidas ocasi, o que nunca fueron grabadas, o loque es más importante, música de nuestrotiempo, de hoy, estos sellos tan conocidoscomo sobrevalorados mantienen sus dividendosy los hacen crecer a base de reeditarun fondo de catálogo cada poco tiempo,aprovechando una efemérides oinventándosela; reorganizándolas enciclos, compositores (rara vez), directoresy solistas, con una presentación o conotra, y un sin fin de variaciones sobre elmismo tema que llegan a producir náuseamusical Está bien reeditar para los nuevaspúblicos grabaciones de referencia, por elmotivo que sea, pero esto no siempre ocurre.Por si no nos habíamos dado cuenta,estas multinacionales del disco están alservicio exclusivo de los balances anuales,la dimensión cultural, esencia del materialcon el que trabajan, les es completamenteajena, llentro de este panorama un pobrecomo, paradójicamente, pingüe, la reediciónde grabaciones, si no excepcionalesen todos los casos, sí de muy alto nivel,supone una ventaja para el aficionado yespecialmente para el principiante por laposibilidad de comprar a má-s bajo precioobras y versiones que merecen la pena. Yeste es el caso de la serie Master. Periódicamentela casa discográfica a que nosreferimos hace una nueva entrega de estasgrabaciones, aunque desconocemos el criteriode selección./j

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!